Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

“Si tan sólo alguien nos explicara esto desde pequeños, cuánto más fácil sería todo... para los maestros y padres enseñar, para nosotros disponernos a aprender, a obedecer, a ser dóciles...” Inicio: 30 septiembre 2010. Objetivo: Recopilación de las virtudes para dejar un arma de reconstrucción de las personas y por ende de la sociedad. Hay un ataque intelectual y moral dirigido a la persona humana y a toda nuestra cultura cristiana al que habremos de responder.
Autora y asesora del curso: Marta Arrechea Harriet de Olivero

Moderadores: Catholic.net, mayra novelo, Moderadores Animadores

Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor mayra novelo » Vie Ene 28, 2011 5:36 am

Curso: Las 54 virtudes atacadas
Autora y asesora del curso: Marta Arrechea Harriet de Olivero
Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia




LA CONSTANCIA


La constancia, hija de la fortaleza, es la virtud que “nos conduce a llevar a cabo lo necesario para alcanzar las metas que nos hemos propuesto, pese a las dificultades internas o externas o a la disminución de la motivación personal por el tiempo transcurrido, sustentando el trabajo a fuerza de voluntad sólida que nos lleva a un esfuerzo continuado, venciendo las dificultades y venciéndonos a nosotros mismos”.

Dicho en otras palabras, la constancia es lo que fortalece nuestra voluntad para continuar en una meta que nos hemos propuesto y nos ayuda a vencernos a nosotros mismos para no flaquear en lo cotidiano. Así como la tolerancia y la paciencia están dirigidas hacia las personas, la constancia está dirigida hacia un objetivo bueno, una meta o tarea a lograr.

Es una virtud íntimamente relacionada con la perseverancia. Las distinguen las distintas dificultades y el tiempo que conlleva el tratar de superar a cada una. Así como la perseverancia es más firme y se prolonga a través del tiempo, la constancia robustece al alma contra los impedimentos y dificultades menores y de todos los días que nos llegan del exterior, del medio en que nos movemos Necesitaremos ser constantes para lograr cualquier meta o hábito bueno que nos permitirá adelantar en la virtud. La constancia nos hará realizar todo lo que debemos hacer aunque nos resulte pequeño e insignificante el no hacerlo. Desde hacer todos los días los deberes y tareas ni bien llegamos del colegio, (y descansamos un rato mientras tomamos algo), guardar nuestros libros y cuadernos después de hacer los deberes en la mochila o continuar con el buen hábito de coser los botones que hacen falta cada vez que planchamos y vemos que se han caído. Si lo hacemos así, con constancia, un poco todos los días, poco tendremos que estudiar para los exámenes porque será un fuerte repaso. Nos lucirá el haber sido constantes durante el año y podremos disfrutar de las vacaciones. De la misma manera tendremos siempre la ropa con los botones al día.

Necesitaremos constancia para ordenar la pila de remeras del ropero cada vez que sacamos una de abajo o del fondo, sin dejarla toda caída sabiendo que sólo nos llevará medio minuto hacerlo pero preferimos irnos a jugar con nuestros amigos o tomar mate con la vecina. Para agradecer cada vez que recibimos un regalo, contestar una carta o un mail. Ser constantes para no interrumpir el tratamiento médico ni bien lo comenzamos porque nos parece que ese remedio que nos recetó no nos hace nada. Con las sesiones de rehabilitación que nos recomendó la kinesióloga porque creemos que esa gimnasia de una hora dos veces por semana no es significativa. Para visitar dos veces por año al dentista como el mismo nos lo aconsejó. Para practicar un deporte si lo queremos hacer bien o aprender un idioma si lo queremos hablar sin acento extranjero.

Para esto hace falta generar desde la infancia un clima de orden, de trabajo y de esfuerzo (tan erosionado hoy en día), donde cada uno sea responsable de sus cosas y ejercitar la voluntad con pequeños hechos. No basta con tener buen corazón, habremos de formarlos en la constancia y la fuerza de voluntad con actos simples como: levantarse siempre con el despertador, bañarse todos los días aunque no tengamos ganas, peinarnos varias veces al día para no andar desaliñados y desprolijos (pensando principalmente en agradar a los demás) y especialmente antes de sentarse a la mesa, dejar la mochila en el lugar que corresponde, todos los días, cuando volvemos del colegio, (y no tirada sobre la mesa de entrada), llevar las zapatillas embarradas hasta el lavadero cada vez que volvemos de jugar al rugby. Obligar a los hijos pequeños y adolescentes a estos pequeños actos que ordenan y fortalecen la voluntad, aunque estemos cansadas de hacerlo y de repetirlo todos los días. Porque esa es la parte que nos toca a los padres, y a todos los adultos en general, la constancia en la formación y educación diaria de los más jóvenes, sin claudicar. Más adelante, ya adultos, la constancia será la virtud clave de lo que llamamos el mantenimiento de las cosas Ya sea el auto nos llevará a revisar periódicamente el aceite para que no se estropee el motor, a lavarlo tal vez semanalmente para mantenerlo limpio. Al buen mantenimiento de la casa, ya sea podando las enredaderas en el invierno, limpiando las canaletas varias veces en el otoño, cambiando los cueritos de las canillas cada vez que haga falta o en llamar el plomero cada vez que sea necesario y no dejar que las pérdidas de agua se agraven, pintando las persianas o llamando al carpintero o al herrero para que nos arregle las que se vencieron con el uso. Para mantener nuestra salud nos llevará a privarnos de comer chocolate ni frituras porque sufrimos del hígado y nos hace mal etc. Todo buen mantenimiento necesita imperiosamente de la virtud de la constancia, de lo diario, de lo cotidiano, de lo que aparenta ser poco importante pero no lo es.

La constancia suprimirá el “me gustaría” o el “podría” por el “puedo y lo lograré” y su premio será constatar el premio, la satisfacción y el orgullo que brinda el deber cumplido, aún en las pequeñas cosas.

Los vicios opuestos a la constancia son: la inconstancia (por defecto), que Santo Tomás llama molicie o blandura, debido a la pereza, a la mediocridad, al desaliento y a la ausencia de metas claras. El otro es la terquedad (por exceso) que se obstina en no ceder o cambiar la decisión cuando lo razonable es hacerlo. Empecinarnos en querer pintar el cuarto, (lo que está bien), pero un día húmedo de lluvia, cuando todos nos dicen (apoyados en el sentido común y la experiencia) que la humedad impedirá que la pintura se seque y retrasará el trabajo durante días complicando a todos los de la casa.



LA PERSEVERANCIA



La perseverancia es “una virtud que inclina a persistir en el ejercicio del bien a pesar de la molestia que su prolongación nos ocasione” (1)

Dicho en otras palabras, es la firmeza y constancia en los propósitos y en las resoluciones de ánimo. La perseverancia es la firmeza que nos hace resistir y continuar en nuestras metas, nuestros objetivos o nuestros trabajos, que generalmente estarán plagados de obstáculos en el camino de nuestras vidas y de nuestra salvación. “Se distingue de la longanimidad (que es la grandeza y constancia de ánimo en las adversidades) en que ésta se refiere más bien al comienzo de una obra virtuosa que no se consumará del todo hasta pasado largo tiempo; mientras que la perseverancia se refiere a la continuación del camino ya emprendido, a pesar de los obstáculos y molestias que vayan surgiendo en él. Lanzarse a una empresa virtuosa de larga y difícil ejecución es propio de la longanimidad; permanecer inquebrantablemente en el camino emprendido un día y otro día, sin desfallecer jamás, es propio de la perseverancia. Todas las virtudes necesitan de la ayuda y complemento de la perseverancia, sin la cual ninguna podría ser perfecta ni siquiera mantenerse mucho tiempo.” (2) Porque toda virtud, para ser incorporada a una vida virtuosa, necesita de la perseverancia. Es por eso que la Iglesia siempre enseñó el catecismo de la perseverancia.

Dios es inmutable y siempre igual a sí mismo. Nosotros somos los variables y mudables de principios, metas y opiniones. Nuestra naturaleza se cansa, es inconstante. Ya San Pablo decía: “No hago el bien que quiero sino el mal que no quiero”. De ahí que el combate nos fortalezca. La perseverancia, indispensable para cumplir cualquier meta que nos propongamos, nos ayudará a pelear contra nuestra propia naturaleza. Como quien bien nos conoce, el diablo viejo, le aconseja en las “Cartas del diablo a su sobrino” el arte de hacer caer a las almas: “Es tan difícil para estas criaturas el perseverar (3).

Ese rever constante con el espejo retrovisor genera angustia y desazón. Si he decidido dar la vida para defender la Patria o contraer matrimonio, no es bueno para la paz de mi alma revisar mi decisión a cada paso y cada instante, sino centrar mis fuerzas en mantener mi objetivo según lo haya valorado en su momento como lo mejor y más importante. De ahí que la perseverancia deba estar asistida de la virtud cardinal de la fortaleza, para no desmayar en el objetivo emprendido a través del tiempo. Muchas veces la duda se instalará en nuestro camino como una elección más pero, salvo que tengamos una verdadera opción mejor con sólidos argumentos, (y aunque seamos autónomos y nos auto abastezcamos), el terminar lo que hemos empezado (desde lijar y pintar todas las puertas de la casa como nos habíamos comprometido a hacer que tal vez nos llevará el año entero, el rehacer todos los planos que hemos perdido o el terminar una carrera), es un problema de principios que nos ordenará y nos fortalecerá. No quiere decir que no habremos de pedir ayuda en el camino. Es más. Vacilaremos, dudaremos, nos sentiremos cansados y nos preguntaremos si vale la pena continuar con el esfuerzo... La prudencia, (indispensable en todas las decisiones humanas), nos hará pedir consejo en más de una oportunidad achicando el margen de error. Para esto, nos hará falta además humildad, para reconocer que los seres humanos solos no podemos, que necesitamos ayuda. Con estas ayudas naturales, (consejos de padres, familiares y buenos amigos), y sobre todo, las sobrenaturales, (consejos y apoyo de sacerdotes y Sacramentos) nos mantendremos en nuestros buenos propósitos hasta alcanzar la meta. La persona perseverante no es la rutinaria que hace las cosas de una manera metódica, casi sin pensarlas ni razonarlas, que encuentra una huella y la sigue sin plantearse nada. La persona perseverante a elegido un camino bueno se ha decidido a alcanzar una meta que primero ha visto y analizado como buena. La abrazará, enfrentara los obstáculos y no mermará su esfuerzo por alcanzarla. Volverá a empezar a pesar de la contrariedad. Su meta es el logro del objetivo a alcanzar. “Persevera y triunfarás” dice el sabio refrán popular. Y la persona perseverante mira siempre su objetivo con luces largas, no con las cortas.

Para ser perseverantes como padres, deberemos insistir en educar hasta la fatiga en un clima totalmente adverso no sólo a la educación cristiana, sino a todo orden natural como personas. Imposible educar sin perseverancia. Como cónyuges deberemos ser perseverantes en llevar adelante nuestros matrimonios hasta que la muerte nos separe, como habremos jurado un día ante Dios a Quien sólo le habrá bastado nuestra palabra. Ser perseverantes en mantenernos fieles durante años aunque nuestro cónyuge no lo merezca o no nos lo inspire. Porque ser fiel es un acto de la voluntad, pero serlo durante años (con motivos en contra y con oportunidades de no serlo) requiere muchas veces de una dosis heroica de fortaleza y perseverancia en los principios. Hoy más que nunca ya que nada nos ayuda.

Para ser perseverantes como estudiantes, deberemos luchar contra la pereza, las diversiones que nos alejarán de los estudios, los pseudo amigos que nos llamarán por teléfono incitándonos a dejar de estudiar y sobre ponernos a nuestros fracasos en los exámenes.

Para ser perseverantes como pacientes tendremos que mantener un tratamiento médico o de rehabilitación cuando y durante todo el tiempo que el médico nos lo pida. Hay accidentados en sillas de ruedas que trabajan años para volver a caminar. Para terminar de pagar un crédito (para lo cual habremos de privarnos de otros placeres y gratificaciones tal vez durante años). Para cumplir con una meta espiritual, laboral, intelectual, deportiva o económica. Aún detrás de cualquier campeón en el mundo del deporte que nos lo presentan rodeado de gloria habrá horas de entrenamiento perseverante en soledad.

La perseverancia no es terquedad que es cuando nos obstinamos o nos mantenemos inflexibles en cambiar de opinión o en reconocer que nos hemos equivocado sin siquiera analizarlo, cuando todo nos indica que estamos en el error. A la perseverancia se opone la inconstancia, que es la superficialidad con que cambiamos de opinión, de amigos, de trabajo o de objetivos, y demuestra, entre otras cosas, una gran superficialidad e inestabilidad en nuestras vidas. Lo grave de este vicio es que generalmente tampoco lo aceptamos, y nos vivimos disculpando ante los demás y ante nosotros mismos de todos nuestros vaivenes, tratando de dar explicaciones que justifiquen nuestra actitud. Si no conocemos a nuestros defectos interiores no podremos combatirlos. Hay empresas inmersas en condiciones tan desfavorables que necesitan de individuos con temple de acero para contrarrestarlas y salir adelante. Para ello hará falta la virtud de la tenacidad superior aún a la perseverancia, por ser más aguda y la meta a lograr más ardua y difícil.

La tenacidad es la capacidad para superar esfuerzos psicológicos superiores, sin que ellos nos venzan o nos fracturen. Es la resistencia relacionada con las tensiones del alma y de la voluntad, que conlleva una lucha espiritual, la que se opone a que nuestro objetivo sea roto, partido o pulverizado. Podremos ser perseverantes en aprender bien y sin acento extranjero un idioma, o en ganar una carrera de natación. Ahora, si queremos recibirnos de abogados siendo ciegos de nacimiento, pintar cuadros con los dedos de los pies, (porque nos faltan las manos), lograr méritos deportivos siendo paralíticos o volver a caminar (cuando aún los médicos han perdido las esperanzas) necesitaremos enormes dosis de tenacidad. Siempre nos generarán enorme respeto las personas que, aún con grandes limitaciones, se imponen a sí mismas un objetivo y nada las detiene.

¿Qué forja la tenacidad? La disciplina, la constancia practicada como estilo de vida, la perseverancia, el optimismo, la esperanza, pero en dosis superiores a lo normal y prolongadas en el tiempo. La tenacidad florece sobre todas estas virtudes. La tenacidad no es obstinación, porfía, terquedad, mantenerse enceguecido sin escuchar argumentos que nos persuaden de una postura que no es razonable. Esta no es una actitud cristiana, sino necia. La persona tenaz tiene ideales y objetivos elevados que la sostienen (naturales y sobrenaturales) pero ideales, metas buenas y positivas como dijimos anteriormente.

Nando Parrado tenía tan sólo veinte años cuando el 13 de Octubre de 1972 el avión en el que viajaba con su equipo de rugby se estrelló en la Cordillera de los Andes. Protagonizó una de las tragedias aéreas más dramáticas de la historia. Cuarenta personas iban a bordo, entre ellas, su madre y su hermana menor. Sólo dieciséis sobrevivieron al frío de los 6.000 metros de altura y al hambre extrema. La carne congelada de sus compañeros muertos, les salvaron la vida. Después de setenta y dos días en la cordillera, Parrado y Canessa decidieron caminar para tratar de salvar al resto de sus compañeros de morir de hambre. Después de una tenaz travesía de varios días, y ante la inminencia de llegar a una cima de una montañas en donde pensaron que se encontrarían finalmente con verdes valles que los llevarían a la salvación, se encontraron nuevamente con una enorme cadena de montañas.

Ante la dramática situación Nando Parrado relata a los medios:” Tomar decisiones; aunque suene extraño, eso fue lo más importante. Siempre digo que allá arriba tomé la decisión más importante de mi vida en veinte segundos. Estábamos en la expedición con Roberto Canessa; desde hacía días caminábamos para tratar de llegar a algún lado, pero lo único que veíamos era nieve y montañas. En una de las escaladas llegamos hasta una cumbre convencidos de que del otro lado veríamos algo que nos diera una mínima esperanza. Subimos hasta lo más alto, levantamos la cabeza y, en lugar de ver un valle verde, nos dimos cuenta de que seguíamos en medio de la cordillera. En ese momento yo elegí cómo morir, me paré frente a Roberto y le dije: “O nos morimos mirándonos a los ojos o nos morimos caminando. Yo quiero morir luchando”. Fue la decisión más importante que tomé en mi vida: cómo morir. Decisiones, de eso se trata la vida. De tomar decisiones. La gente tiene miedo de decidir, miedo de hacer. Yo las decisiones más difíciles de mi vida las tomé allí.” (4) Después de diez días de una maratónica y tenaz caminata a través de inmensas montañas, y de una odisea que parecía imposible de lograr, Nando Parrado y Roberto Canessa vieron a un hombre, al campesino que los ayudaría y que finalmente permitiría la salvación de todos los sobrevivientes.

A los 46 años, y luego de perder paulatinamente la audición, el compositor alemán Ludwig van Beethoven quedó completamente sordo. Aún así, y a pesar de sus preocupaciones financieras, disgustos familiares y enfermedades, gracias a su tenacidad compuso gran parte de su obra. Nos legó así la maravillosa música que Dios quiso que tuviera adentro para elevar de manera prodigiosa nuestros espíritus hacia Él.

Luis Pasteur, químico francés, fue quien dió un golpe mortal a la teoría de la generación espontánea de los microbios, demostrando que tenían progenitores. Fue quien sentó el principio de la técnica aséptica que desarrollaría después el Dr. Lister, y descubrió la vacuna contra la rabia. Con una vida laboriosa y fecunda y una existencia austera y monacal, como acompaña en general a los hombres de ciencia, trabajando en un edificio que no era apto ni siquiera para alojar a conejillos de la India, Pasteur emprendió su maravillosa aventura para demostrar que los microbios debían tener progenitores. Vivía entre los sabios escépticos, botánicos incrédulos y evolucionistas, de la margen izquierda del Sena. Hombres sin Dios, partidarios de la generación espontánea y evolucionistas quienes, sentados cómodamente en sus despachos, vociferaban, pero no hacían un solo experimento. No obstante, Pasteur como buen cristiano decía “Mi convicción viene del corazón y no de la inteligencia. Me entrego a aquellos sentimientos acerca de la eternidad que surgen naturalmente en mí. Hay algo en lo profundo de nuestra alma que nos dice que el mundo debe ser algo más que una combinación de hechos”.

En el año 1892 Pasteur cumplió 70 años y se celebró en la Sorbona un gran homenaje en su honor. Cuando Pasteur cruzaba la sala cojeando, apoyado en el brazo del Presidente de la República, Lister, el más famoso de los cirujanos de Francia, se levantó de su asiento y lo abrazó, y tanto los preclaros hombres de barbas grises como los estudiantes en las altas graderías gritaron e hicieron retemblar las paredes con sus vítores. Por fin llegó el momento en que el anciano cazador de microbios tenía que pronunciar su discurso, pero estaba tan emocionado que su hijo tuvo que leerlo en su lugar. Sus últimas palabras fueron una llamada religiosa a favor de una nueva forma de vida para los hombres. Era a los estudiantes a quienes se dirigía cuando dijo: “No os dejéis corromper por el escepticismo desaprobador y estéril, no os dejéis desalentar por la tristeza de ciertas horas que pasan sobre las naciones. Vivid en la quieta paz de las bibliotecas y los laboratorios. Preguntaos primero: ¿Qué he hecho para formarme?...y, a medida que vayáis avanzando en vuestra formación: Qué he hecho por mi país? Hasta que llegue el momento en que podáis sentir la alegría inmensa de pensar que habéis contribuida de algún modo al progreso y al bien de la humanidad”. (5)

Tomas Edison, expulsado 3 veces de la escuela porque debido a su sordera parcial, (producida por la escarlatina), la maestra lo consideraba un retrasado, hizo 2000 experiencias hasta inventar la lamparita. Un periodista le preguntó el porqué de tantos fracasos. Y Edison respondió: “¡No fracasé!.... ¡Inventé la lamparita!!!. Ocurre que fue un proceso de 2000 pasos”...

Nosotros hoy disfrutamos en todos los órdenes de los logros de estos hombres de ciencia que han tomado, como tantos otros en la vida, estas posturas de esfuerzo, sacrificio, perseverancia y tenacidad.


Notas
(1) “Teología de la perfección cristiana”. Rvdo P. Royo Marín. Editorial BAC. Pág 593
(2) “Teología de la perfección cristiana”. Rvdo. P. Royo Marín. Editorial BAC. Pág 593.
(3) “Cartas del diablo a su sobrino”. C.S.Lewis. Editorial Andrés Bello. Pág 133
(4) Revista del diario “La Nación” (8/ 10/ 06). Pág 27.
(5) “Los cazadores de microbios”. Paul de Kowif





Ejercicio y tarea (para publicar en los foros del curso)

En relación a La Constancia


1. ¿Qué es la virtud de la constancia? ¿De qué virtudes se ayuda?
2. ¿Cuáles son los frutos de la vivencia de esta virtud?
3. ¿Cuáles son los “ambientes” o “actitudes” que refuerzan la virtud de la constancia?
4. ¿Cuáles son los vicios contrarios a esta virtud?
5. ¿Algún comentario o sugerencia?

En relación a La Perseverancia


1. ¿Qué es la virtud de la perseverancia?
2. ¿Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia?
3. ¿Cuáles son las características de una persona que vive esta virtud?
4. ¿Qué es lo que forja esta virtud?
5. La tenacidad nada tiene que ver con: “me gusta, encantaría, me muero de ganas”. Es una cosa muy distinta. A la hora de analizar el éxito de los grandes hombres, en la mayoría de los casos, se debió a la persistencia y a la concentración de esfuerzo, a la exactitud de propósitos. “A quien pone estos medios Dios le concede llegar al éxito”. ¿Eres perseverante? ¿Cuáles son los medios que más te ayudan? ¿Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar?
6. ¿Algún comentario o sugerencia?


Para reflexión personal

1. ¿Cómo va mi constancia en vivir mi vocación (padre, madre, laico, consagrado)?¿admite dudas?¿Se fija demasiado en las dificultades?¿Busco modos de eludirla?¿Tengo claro y decidió lo que soy y lo que espero?
2. ¿Convencido que en el camino hay caídas, soy pronto en levantarme, siempre después del fracaso renuevo mi esfuerzo?
3. ¿Sueño en santidades mágicas de consecución instantánea? ¿tengo la ilusión de ser sabio, formado, mejor persona, sin trabajo duro, obscuro y constante? ¿por deseo de terminar nunca hago perfectamente lo que debo hacer abandono el esfuerzo y trabajo logrado?
4. ¿Acostumbro hacer las cosas después de pensarlas bien? ¿Me suelo contentar con planes de trabajo amplios pero si bajar jamás a su realización?
5. ¿Tengo muchos fracasos en los que al examinarme puedo descubrir como su causa la falta de constancia? ¿Suelo desistir ante la primera dificultad? ¿Si es muy grande o molesta me rindo ante ella? ¿O se me enardece el alma ante ella? ¿me gusta comenzar todos los días como si iniciase mi camino hacia la santidad, vivido como si fuera el último?
6. ¿Me sostiene la seguridad de que Cristo me acompaña?¿esta certeza me sirve para ser constante en la fe, en la esperanza?
7. ¿Manda en mí mi razón y voluntad? ¿O mis potencias inferiores?
8. ¿Mi primer ejercicio de perseverancia consiste en obedecer a Dios? ¿Puedo decir que por ello que tengo la fuerza de voluntad suficiente para evitar el pecado, el dominio necesario para prevenir y modelar los movimientos violentos de mis pasiones, mis afectos y sentimientos?
9. ¿Soy perseverante al poner por obra mis propósitos? ¿O son fruto del sentimentalismo? ¿Me excuso constantemente ante el incumplimiento pero en el fondo es porque no tengo la decisión ni la voluntad para hacerlo?
10. ¿Cuáles son los medios que me ayudan a perseverar?



Si tienes alguna duda sobre el tema puedes consultar a Marta Arrechea Harriet de Olivero en su consultorio virtual


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Si te falta alguna lección del curso o deseas consultar las anteriores, da click en el siguiente enlace:
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor rafa ayala » Vie Ene 28, 2011 11:12 am

En relación a La Constancia

1. ¿Qué es la virtud de la constancia? ¿De qué virtudes se ayuda?

La constancia, hija de la fortaleza, es la virtud que “nos conduce a llevar a cabo lo necesario para alcanzar las metas que nos hemos propuesto, pese a las dificultades internas o externas o a la disminución de la motivación personal por el tiempo transcurrido, sustentando el trabajo a fuerza de voluntad sólida que nos lleva a un esfuerzo continuado, venciendo las dificultades y venciéndonos a nosotros mismos”. La constancia es lo que fortalece nuestra voluntad para continuar en una meta que nos hemos propuesto y nos ayuda a vencernos a nosotros mismos para no flaquear en lo cotidiano. Así como la tolerancia y la paciencia están dirigidas hacia las personas, la constancia está dirigida hacia un objetivo bueno, una meta o tarea a lograr.
Es una virtud íntimamente relacionada con la perseverancia. Las distinguen las distintas dificultades y el tiempo que conlleva el tratar de superar a cada una. Así como la perseverancia es más firme y se prolonga a través del tiempo, la constancia robustece al alma contra los impedimentos y dificultades menores y de todos los días que nos llegan del exterior, del medio en que nos movemos

2. ¿Cuáles son los frutos de la vivencia de esta virtud?

Robustece al alma contra los impedimentos y dificultades menores y de todos los días que nos llegan del exterior,
Realizar todo lo que debemos hacer aunque nos resulte pequeño e insignificante el no hacerlo.

3. ¿Cuáles son los “ambientes” o “actitudes” que refuerzan la virtud de la constancia?

Orden, trabajo y esfuerzo

4. ¿Cuáles son los vicios contrarios a esta virtud?

La inconstancia (por defecto).
La terquedad (por exceso) que se obstina en no ceder o cambiar la decisión cuando lo razonable es hacerlo.

En relación a La Perseverancia

1. ¿Qué es la virtud de la perseverancia?

La perseverancia es “una virtud que inclina a persistir en el ejercicio del bien a pesar de la molestia que su prolongación nos ocasione” , es la firmeza y constancia en los propósitos y en las resoluciones de ánimo, es la firmeza que nos hace resistir y continuar en nuestras metas, nuestros objetivos o nuestros trabajos, que generalmente estarán plagados de obstáculos en el camino de nuestras vidas y de nuestra salvación

2. ¿Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia?

En que La Constancia se refiere más bien al comienzo de una obra virtuosa que no se consumará del todo hasta pasado largo tiempo; mientras que la perseverancia se refiere a la continuación del camino ya emprendido, a pesar de los obstáculos y molestias que vayan surgiendo en él.

3. ¿Cuáles son las características de una persona que vive esta virtud?

Debe estar revestido de de otras virtudes como la Fortaleza, la Prudencia y la Humildad.

4. ¿Qué es lo que forja esta virtud? .
La persona perseverante no es la rutinaria que hace las cosas de una manera metódica, casi sin pensarlas ni razonarlas, que encuentra una huella y la sigue sin plantearse nada. La persona perseverante a elegido un camino bueno se ha decidido a alcanzar una meta que primero ha visto y analizado como buena. La abrazará, enfrentara los obstáculos y no mermará su esfuerzo por alcanzarla. Volverá a empezar a pesar de la contrariedad. Su meta es el logro del objetivo a alcanzar.

5. La tenacidad nada tiene que ver con: “me gusta, encantaría, me muero de ganas”. Es una cosa muy distinta. A la hora de analizar el éxito de los grandes hombres, en la mayoría de los casos, se debió a la persistencia y a la concentración de esfuerzo, a la exactitud de propósitos. “A quien pone estos medios Dios le concede llegar al éxito”. ¿Eres perseverante?
¿Cuáles son los medios que más te ayudan? ¿Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar?

Soy un perseverante intermitente, pero siempre la fe la tengo puesta en Dios y con El he logrado las metas que me propongo. Sobre todo el desánimo de no lograr el fin propuesto al primer intento es la dificultad más grave que me ocurre.
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor Ivoire » Vie Ene 28, 2011 11:33 am

En relación a La Constancia

1. ¿Qué es la virtud de la constancia? ¿De qué virtudes se ayuda?
Es aquella que nos conduce a esforzarnos de forma continua, para alcanzar las metas propuestas, luchando contra las dificultades internas y externas.
Se ayuda de virtudes como la fortaleza y la responsabilidad.

2. ¿Cuáles son los frutos de la vivencia de esta virtud?
Ella robustece el alma contra los impedimentos y dificultades menores, lo cotidiano, cumpliendo con el deber aunque parezca pequeño o insignificante,

3. ¿Cuáles son los “ambientes” o “actitudes” que refuerzan la virtud de la constancia?
El ambiente principal es el hogar con la familia, quien enseña desde lo más sencillo, a cumplir con los deberes cotidianos, en una actitud de formación y trabajo continuo.

4. ¿Cuáles son los vicios contrarios a esta virtud?
la inconstancia, que resulta en pereza, mediocridad, desaliento y a la ausencia de metas claras.
Y la terquedad, de quien no cede o cambia una decisión o conducta, cuando esto es lo más razonable.

En relación a La Perseverancia


1. ¿Qué es la virtud de la perseverancia?
Es aquella que nos inclina a persistir en el ejercicio del bien, con firmeza, constancia y ánimo para alcanzar los propósitos, a pesar de las dificultades, obstáculos, y el tiempo.

2. ¿Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia?
La constancia nos ayuda en dificultades menores y de todos los días.
La perseverancia es más firme y se prolonga a través del tiempo.
3. ¿Cuáles son las características de una persona que vive esta virtud?
La firmeza y la constancia, el buen ánimo, la fortaleza, la prudencia, la humildad, tiene un objetivo claro, la fidelidad, la responsabilidad.
4. ¿Qué es lo que forja esta virtud?
La disciplina, la constancia en el estilo de vida, la perseverancia, el optimismo, la esperanza en dosis superiores y prolongadas en el tiempo.
5. La tenacidad nada tiene que ver con: “me gusta, encantaría, me muero de ganas”. Es una cosa muy distinta. A la hora de analizar el éxito de los grandes hombres, en la mayoría de los casos, se debió a la persistencia y a la concentración de esfuerzo, a la exactitud de propósitos. “A quien pone estos medios Dios le concede llegar al éxito”. ¿Eres perseverante? ¿Cuáles son los medios que más te ayudan? ¿Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar?
Reconozco que no soy perseverante, aunque a veces por mi sentido de responsabilidad, cumplo con los objetivos, y también me mantengo firme en ciertas ideas, pero quizás me falta más ánimo, ser más emprendedora, o mayor motivación para iniciar un camino y llevarlo a término.
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor lurig6r » Vie Ene 28, 2011 1:10 pm

.En relación a la Constancia

¿Qué es la virtud de la constancia? ¿De qué virtudes se ayuda?

Es lo que fortalece nuestra voluntad para continuar en una meta que nos hemos propuesto y nos ayuda a vencernos a nosotros mismos para no flaquear en lo cotidiano.
La constancia se ayuda de las virtudes de la tolerancia y la perseverancia.

2. ¿Cuáles son los frutos de la vivencia de esta virtud?

Robustece al alma contra los impedimentos y dificultades menores y de todos los días que nos llegan del exterior,
Nos permite realizar todo lo que debemos hacer aunque nos resulte pequeño e insignificante el no hacerlo.

3. ¿Cuáles son los “ambientes” o “actitudes” que refuerzan la virtud de la constancia?

Orden en casa , disposición al trabajo y fuerza de voluntad para hacer las cosas.

4. ¿Cuáles son los vicios contrarios a esta virtud?

La inconstancia, la flojera, desaliento , terquedad que se obstina en no ceder o cambiar de decisión cuando lo razonable es hacerlo.

En relación a La Perseverancia

1. ¿Qué es la virtud de la perseverancia?

La perseverancia es “una virtud que inclina a persistir en el ejercicio del bien a pesar de la molestia que su prolongación nos ocasione”

2. ¿Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia?

En que La Constancia se refiere más bien al comienzo de una obra virtuosa que no se consumará del todo hasta pasado largo tiempo; mientras que la perseverancia se refiere a la continuación del camino ya emprendido, a pesar de los obstáculos y molestias que vayan surgiendo en él.

3. ¿Cuáles son las características de una persona que vive esta virtud?

Debe estar revestido de otras virtudes como la Fortaleza, la Prudencia y la Tenacidad.

4. ¿Qué es lo que forja esta virtud? .
La disciplina, la constancia practicada como estilo de vida, la perseverancia, el optimismo, la esperanza, pero en dosis superiores a lo normal y prolongadas en el tiempo. La tenacidad florece sobre todas estas virtudes. La tenacidad no es obstinación, porfía, terquedad, mantenerse enceguecido sin escuchar argumentos que nos persuaden de una postura que no es razonable. Esta no es una actitud cristiana, sino necia. La persona tenaz tiene ideales y objetivos elevados que la sostienen (naturales y sobrenaturales) pero ideales, metas buenas y positivas .
5. La tenacidad nada tiene que ver con: “me gusta, encantaría, me muero de ganas”. Es una cosa muy distinta. A la hora de analizar el éxito de los grandes hombres, en la mayoría de los casos, se debió a la persistencia y a la concentración de esfuerzo, a la exactitud de propósitos. “A quien pone estos medios Dios le concede llegar al éxito”. ¿Eres perseverante?
¿Cuáles son los medios que más te ayudan? ¿Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar?
Soy perseverante, por que Creo en Dios y mantengo mi Fe en El.
Creo que debo de poner mas optimismo en hacer las cosas.
Los medios que me ayudan a perseverar son la fortaleza, la tolerancia y la esperanza.
6.-La tenacidad es una actitud cristiana y nos ayuda a realizar nuestros ideales, la disciplina tambien es importante .
Un abrazo Mayra , te felicito por tu Curso los ejemplos que nos han puesto son muy interesantes .
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor anam46 » Vie Ene 28, 2011 3:01 pm

Una vez más con sincera alegría me conecto con todos ustedes y doy respuesta a este nuevo cuestionario.-
CONSTANCIA.-
1.- Esta virtud permite alcanzar las metas por medio de todas las acciones que sean necesarias, más allá de las dificultades internas o externas que se puedan presentasr. Por lo tanto esta virtud robustece la voluntad y el esfuerzo para poder enfrentar los contratiempos.
2.- Los frutos de poder vivir esta virtud son : ROBUSTECER EL ALMA y AFIANZAR LA VOLUNTAD Y EL ESFUERZO
3.- Los ambientes o actitudes que resfuerzan esta virtud son:
- la formación de un buen corazón
- el orden y el trabajo
- el esfuerzo
4.- Los vicios contrarios a esta virtud son la INCONSTANCIA y la TERQUEDAD.-

PERSEVERANCIA.-
1.- Esta virtud nos inclina a persistir en el ejercicio del bien más allá de lo que esto pueda ocasionar. Nos otorga la confianza y la firmeza en los propósitos y las resoluciones.
2.- La CONSTANCIA robustece el alma
La PERSEVERANCIA se prolonga en elm tiempo y es más firme que la anterior.
3.- Las personas que viven esta virtud se destacan por no perder su rumbo, por cumplir con sus objetivos y compromiso a pesar de las dificultades o el tiempo que exija la tarea que han emprendido. Estas personas no se doblegan ni bajan los brazos aunque esten solas o el esfuerzo sea muy grande pues su compromiso de vida es verdadero y profundo.
4.- La Perseverancia es asistida por la virtud cardinal de la fortaleza .Se forja en la firmeza que permite resistir y continuar frente a los buenos propósitos, objetivos o trabajos.
Esta virtud es tán importante que todas las otras virtudes necesitan de ella.
5.- Atento a todo lo que se ha dicho frete a estas virtudes, creo ser perseverante en las distintas situaciones de mi vida.
Puedo serlo o al menos intentarlo, porque desde pequeña dentro de la familia y luego en mis lugares de formación, siempre se destacaron el esfuerzo, el compromiso, el valor del estudio, la honestidad , los "buenos principios".
Si a ello le sumo la formación cristiana recibida desde mis abuelos y la búsqueda personal desde mi formación cristiana, se profundizaron más los aspectos mencionados.
Por momento es difícil ser perseverante pues esta sociedad ,en las que nos toca vivir y convivir, muy alejada se encuentra de esta virtud. El interés personal, el individualismo, el ser " amigo de ", etc. abren caminos y puertas que no me interesan pero hacen por momentos mucho más pesado el camino para cumplir con los propósitos . Propósitos que no están apartados de mis tareas cotidianas sino que le dan sentido a ellas. Propósitos que al estar vinculados con la recta intención y los valores, muchas veces son menospreciados o considerados "pasados de moda", en consecuencia aparecen calificativos como "estructurada", "idealista","eso ya no se hace más",etc.etc..Gracias a Dios no bajo los brazos pues tengo muy claro el camino por el que quiero andar.
Con un fuerte abrazo me despido de todos hasta la próxima semana.
anam46
 
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor macamposr » Vie Ene 28, 2011 4:03 pm

En relación a La Constancia
1. ¿Qué es la virtud de la constancia?
R: Es la que nos conduce a llevar a cabo lo necesario para alcanzar las metas que nos hemos propuesto, pese a las dificultades internas o externas o a la disminución de la motivación personal por el tiempo transcurrido, sustentando el trabajo a fuerza de voluntad sólida que nos lleva a un esfuerzo continuado, venciendo las dificultades y venciéndonos a nosotros mismos.
¿De qué virtudes se ayuda?
R: Se ayuda de las virtudes de la fortaleza la templanza, el orden, la laboriosidad.
2. ¿Cuáles son los frutos de la vivencia de esta virtud?
R: Cito textualmente al poeta y literato italiano, Arturo Graf, “Constancia es la virtud por la cual todas las otras virtudes dan su fruto”. Yo pienso que todas las virtudes, nos ayudan a imitar mejor a Cristo, modelo de todas las virtudes. Y como Él nos mostró, es la constancia la que nos ayuda a ser la tierra buena donde la semilla de la voz de Dios y las virtudes puedan crecer y dar fruto con constancia (Lucas 8:15). Por ello es bueno tener a la mano algunos elementos que pueden ayudar para formar esta virtud. Por ejemplo, Él nos mostro constantemente su amor, desde su nacimiento hasta la muerte en la cruz. En la propia vida, el discípulo tiene que sembrar las buenas disposiciones, regarlas con constancia y confiar en Dios, quien realizará el crecimiento de la virtud.
3. ¿Cuáles son los “ambientes” o “actitudes” que refuerzan la virtud de la constancia?
R: Para desarrollar la virtud de la constancia, no hace falta un esfuerzo sobrehumano, sino más bien un método, ritmo, claridad de propósito y sentido de equilibrio. Así como las gotas de agua que, sin ser más fuertes que la roca, la erosionan más y más con el transcurrir del tiempo hasta perforarla, de la misma manera la aplicación constante de una acción orientada hacia un fin, nos proporcionará la agradable satisfacción de llegar a concretar nuestros anhelos más profundos.
4. ¿Cuáles son los vicios contrarios a esta virtud?
R: la inconstancia (por defecto), que Santo Tomás llama molicie o blandura, debido a la pereza, a la mediocridad, al desaliento y a la ausencia de metas claras. El otro es la terquedad (por exceso) que se obstina en no ceder o cambiar la decisión cuando lo razonable es hacerlo. Empecinarnos en querer pintar el cuarto, (lo que está bien), pero un día húmedo de lluvia, cuando todos nos dicen (apoyados en el sentido común y la experiencia) que la humedad impedirá que la pintura se seque y retrasará el trabajo durante días complicando a todos los de la casa.
5. ¿Algún comentario o sugerencia?

En relación a La Perseverancia
1. ¿Qué es la virtud de la perseverancia?
R: La virtud que inclina a persistir en el ejercicio del bien a pesar de la molestia que su prolongación nos ocasione.
2. ¿Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia?
R: La perseverancia y la constancia tienen el mismo fin y es propio de ambas mantenerse firmes en el bien. Pero los objetos que ofrecen dificultad para permanecer en el bien son diferentes, pues la perseverancia vence la dificultad que implica la duración del acto y la constancia vence la dificultad originada por todos los obstáculos externos.
3. ¿Cuáles son las características de una persona que vive esta virtud?
R: Una persona perseverante tiene las siguientes características:
1. Una gran determinación: para resistir los embates del tiempo, las angustias del desánimo y el rostro amenazante de la aflicción.
2. Una férrea autodisciplina. Para imponerse el deber de continuar adelante en los momentos en que el camino es pedregoso y el sendero se torna empinado.
3. Una sólida convicción. Convicción en sus principios, creencias y valores. Esa convicción le permitirá saber que está en lo correcto aunque las voces de su alrededor manifiesten lo contrario.
4. Facultad de auto-motivarse. Es posible que en la hora crítica podamos consultar a alguien cuyas palabras nos motiven. Pero es bueno estar preparado porque si no tenemos quien nos motive tendremos que acudir a la más sencilla de las soluciones: motivarnos nosotros mismos.
5. Una fe sólida en Dios. En dos personas debemos confiar: en Dios y en nosotros mismos. Mucho cuidado con el orden, porque no puede alterarse. Primero, fe en Dios, luego en nosotros mismos.
La perseverancia es una demostración de fortaleza pero también de la confianza puesta en Dios, bondadoso y lleno de poder. Yo tengo dos frases que me llenan de entereza y serenidad, las leo y repito cada vez que me es necesario:
"Todo lo puedo en Cristo que me fortalece." (Filipenses. 4:13).
“Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?” Romanos 8:31
4. ¿Qué es lo que forja esta virtud?
R: La disciplina, la constancia practicada como estilo de vida, la perseverancia, el optimismo, la esperanza, pero en dosis superiores a lo normal y prolongadas en el tiempo. La tenacidad florece sobre todas estas virtudes. La tenacidad no es obstinación, porfía, terquedad, mantenerse enceguecido sin escuchar argumentos que nos persuaden de una postura que no es razonable. Esta no es una actitud cristiana, sino necia. La persona tenaz tiene ideales y objetivos elevados que la sostienen (naturales y sobrenaturales) pero ideales, metas buenas y positivas.
5. La tenacidad nada tiene que ver con: “me gusta, encantaría, me muero de ganas”. Es una cosa muy distinta. A la hora de analizar el éxito de los grandes hombres, en la mayoría de los casos, se debió a la persistencia y a la concentración de esfuerzo, a la exactitud de propósitos. “A quien pone estos medios Dios le concede llegar al éxito”. ¿Eres perseverante? ¿Cuáles son los medios que más te ayudan? ¿Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar?
R: No, yo creo que no he alcanzado a ser perseverante, y mi principal obstáculo es que no tengo claridad de metas, no tengo foco, y caigo muchas veces en el desánimo, cuando no salen las cosas como lo pensé. Creo también que a veces mi fe flaquea, y es cuando recurro a las frases que mencioné en la pregunta número tres.
6. ¿Algún comentario o sugerencia?
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor makon » Vie Ene 28, 2011 7:22 pm

En relación a La Constancia

1. ¿Qué es la virtud de la constancia? ¿De qué virtudes se ayuda?
Es la virtud que nos conduce a llevar a cabo todo lo necesario para alcanzar las metas que nos hemos propuesto, a pesar de las dificultades que se nos presenten, y nos ayuda a vencernos a nosotros mismos para no flaquear en lo cotidiano. Fortalece nuestra voluntad
Es hija de la fortaleza, le ayudan la tolerancia, la paciencia, la perseverancia, orden.

2. ¿Cuáles son los frutos de la vivencia de esta virtud?
El fruto principal es el logro de las metas y objetivos que nos proponemos, robustece nuestra alma contra los impedimentos que se presenten, nos hace ordenados, disciplinados, perseverantes y nos ayuda a vencer la pereza , el desaliento y la mediocridad.
El ver nuestras metas logradas nos invita a seguir perseverando y luchando por nuestros objetivos.

3. ¿Cuáles son los “ambientes” o “actitudes” que refuerzan la virtud de la constancia?
En el hogar, ser ordenado con todas las cosas que nos toca ordenar. Cumplir con nuestras responsabilidades de acuerdo a nuestro lugar y nuestro estado. Respetar horarios y reglas. No claudicar en la educación de los hijos ni en la lucha diaria.
En el trabajo, el cumplir con las tareas encomendadas y luchar por mejorar.
En el deporte, entrenar como nos lo exigen.
En el caso de tratamientos médicos, seguirlos al pie de la letra y no interrumpirlos.
En la escuela, estudiar y cumplir con todas las tareas que se nos piden.

4. ¿Cuáles son los vicios contrarios a esta virtud?
La incostancia, por defecto, y la terquedad por exceso.

5. ¿Algún comentario o sugerencia?

En relación a La Perseverancia
1. ¿Qué es la virtud de la perseverancia?
Es la virtud que nos inclina a persistir en el ejercicio del bien, a pesar de la molestia que su prolongación nos ocasione. Nos da firmeza y constancia en nuestros propósitos y en las resoluciones de ánimo y nos hace resistir y continuar.

2. ¿Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia?
La constancia nos fortalece y nos ayuda contra los impedimentos menores de todos los días, por pequeñas cosas que parezcan. Es el mantenimiento de lo diario, de lo cotidiano.
La perseverancia es más firme porque se prolonga a través del tiempo. Es la continuación del camino ya emprendido y a pesar de todo. Permanecer inquebrantables.

3. ¿Cuáles son las características de una persona que vive esta virtud?
Es una persona que ha elegido un camino bueno, se ha decidido a alcanzar una meta que analizó como buena. La abraza, enfrenta los obstáculos y no merma esfuerzos para alcanzarla. Vuelve a empezar a pesar de las contrariedades. Es humilde porque reconoce que necesita ayuda y sabe pedir consejo(prudente) para tomar decisiones y achicar el margen de error.

4. ¿Qué es lo que forja esta virtud
Fortaleza, disciplina, constancia, esperanza, optimismo, humildad y objetivos buenos bien planteados y definidos.

5. La tenacidad nada tiene que ver con: “me gusta, encantaría, me muero de ganas”. Es una cosa muy distinta. A la hora de analizar el éxito de los grandes hombres, en la mayoría de los casos, se debió a la persistencia y a la concentración de esfuerzo, a la exactitud de propósitos. “A quien pone estos medios Dios le concede llegar al éxito”. ¿Eres perseverante? ¿Cuáles son los medios que más te ayudan? ¿Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar?
Si soy perseverante. Los medios que me ayudan entre otros, son la disciplina del día a día como el despertarme temprano a pesar de las desveladas, el ejercicio diario, una dieta balanceada, el cumplimiento de mis deberes de esposa y madre, el cumplir con mi trabajo a tiempo, el mantener ordenada mi casa y mis papeles, el no desfallecer en la educación de mis hijos, repitiéndoles cada día si es necesario, lo que está bien. Siendo fiel a mi esposo día con día; defendiendo a la familia y mis principios en pláticas y reuniones.
Las dificultades que no me dejan avanzar son a veces el desánimo, el no tener el éxito esperado en las actividades realizadas, la falta de organización del tiempo.
6. ¿Algún comentario o sugerencia?
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor Gabriela_Ladron » Vie Ene 28, 2011 10:39 pm

En relación a La Constancia

1. ¿Qué es la virtud de la constancia? ¿De qué virtudes se ayuda?

Es la virtud que nos conduce a llevar a cabo las buenas metas propuestas. Se ayuda de la fortaleza para continuar en el camino hacia nuestras metas. También se ayuda de la perseverancia.

2. ¿Cuáles son los frutos de la vivencia de esta virtud?

El alma se robustece y nos lleva a la consecución de fines positivos.

3. ¿Cuáles son los “ambientes” o “actitudes” que refuerzan la virtud de la constancia?

El clima de orden, trabajo y esfuerzo la fortalece.

4. ¿Cuáles son los vicios contrarios a esta virtud?

La pereza, la inconstancia, la mediocridad, la terquedad.

5. ¿Algún comentario o sugerencia?

La constancia implica un fin positivo.


En relación a La Perseverancia


1. ¿Qué es la virtud de la perseverancia?

Es la virtud que no lleva a continuar en el ejercicio del bien, a pesar de las molestias que esto nos pueda ocasionar.

2. ¿Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia?

La constancia habla de la firmeza, y comprende a la constancia. La constancia es el enfoque hacia el fin positivo-

3. ¿Cuáles son las características de una persona que vive esta virtud?

Es el trabajo sin desfallecer, la continuación en las obras virtuosas.

4. ¿Qué es lo que forja esta virtud?

La forja la educación, el constante entrenamiento y la tenacidad.

5. La tenacidad nada tiene que ver con: “me gusta, encantaría, me muero de ganas”. Es una cosa muy distinta. A la hora de analizar el éxito de los grandes hombres, en la mayoría de los casos, se debió a la persistencia y a la concentración de esfuerzo, a la exactitud de propósitos. “A quien pone estos medios Dios le concede llegar al éxito”. ¿Eres perseverante? ¿Cuáles son los medios que más te ayudan? ¿Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar?

Soy perseverante. Me ayuda la constancia y la organización, así como la responsabilidad y la fe. Las dificultades que impiden avanzar no son insalvables, solo son obstáculos que debo aprender a vencer. Y son muchos, pero a la vez, no son imposibles de vencer.
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor marisa725 » Sab Ene 29, 2011 12:28 am

En relación a la Constancia

1.- ¿ Qué es la virtud de la constancia ?. ¿ De qué virtudes se ayuda ?
La constancia, hija de la fortaleza, es la virtud que " nos conduce a llevar a cabo lo necesario para alcanzar las metas que nos hemos propuesto, pese a las dificultades internas o externas o en la disminución de la motivación personal por el tiempo transcurrido, sustentando el trabajo a fuerza de voluntad sólida que nos lleva a un esfuerzo continuado, venciendo las dificultades y venciéndonos a nosotros mismos ".

Es una virtud íntimamente relacionada con la perseverancia. Las distinguen las distintas dificultades y el tiempo que conlleva el tratar de superar a cada uno. Así como la perseverancia es más firme y se prolonga a través del tiempo, la contancia robustece el alma contra los impedimentos y las dificultades menores y de todos los días que nos llegan del exterior, del medio en que nos movemos.
Necesitamos ser constante, para lograr cualquier meta o hábito bueno que nos permitirá adelantar en la virtud.
La constancia nos hará realizar todo lo que debemos hacer aunque nos resulte pequeño e insignificante no hacerlo.
Los hombres estamos llamados a ser la tierra buena, donde la semilla de la voz de Dios y las virtudes puedan crecer y dar fruto con perseverancia ( cf. Lc 8, 15 )
La constancia es la virtud, por la cual todas las otras virtudes dan fruto.

2.- ¿ Cuáles son los frutos de la vivencia de ésta virtud ?
Los frutos de ésta virtud son:
- La constancia suprimirá el " me gustaría " o el " podría " por el " puedo y lo lograré " , entonces podrá constatar su premio. la satisfacción y el orgullo que brinda el deber cumplido, aún en las pequeñas cosas.
Ejemplo: Si nos enfermamos de una enfermedad incurable, entonces seguiremos el tratamiento para una mejor calidad de vida.
Para conquistar algo, necesitamos de la constancia, para que rinda frutos. Quien es constante, tiene facilidad para triunfar, porque se habitúa a la lucha diaria que implica esta virtud, a vencer las dificultades e inclusive vencerse a sí mismo.

3.-¿ Cuáles son " los ambientes" o " actitudes " que refuerzan la virtud de la constancia ?
Hace falta generar desde la infancia un clima de orden, de trabajo y de esfuerzo ( tan erosionado hoy en día ), donde cada uno sea responsable de sus cosas y ejercitar la voluntad con pequeños hechos. No basta con tener buen corazón, habremos de formarlos en la constancia y la fuerza de voluntad con actos simples como: levantarse siempre con el despertador, bañarse todos los días aunque no tengamos ganas, peinarnos varias veces al día, para no andar desaliñados y desprolijos ( pensando principalmente en agradar a los demás ) y especialmente antes de sentarse a la mesa, dejar la mochila en el lugar que corresponde, todos los días, cuando volvemos del colegio, y no tirada sobre la mesa de entrada; llevar las zapatillas embarradas hasta el lavadero cada vez que volvamos de jugar.
Obligar a los hijos pequeños y adolescentes a éstos pequeños actos que ordenan y fortalecen la voluntad, aunque estemos cansados de hacerlo y de repetirlo todos los días. Porque esa es la parte que nos toca a los padres, y a todos los adultos en general, la contancia en la formación y educación diaria de los más jóvenes, sin claudicar. Mas adelante, ya adultos, la constancia será la virtud clave de lo que llamamos el mantenimiento de las cosas.

4.- ¿ Cuáles son los vicios contrarios a ésta virtud ?
Los vicios opuestos a la constancia son:
a.-La inconstancia ( por defecto ), que Santo Tomás llama molicie o blandura, debido a la pereza, a la mediocridad, al desaliento y a la ausencia de metas claras.
b.-La terquedad ( por exceso ), que se obstina en no ceder o cambiar la decisión, cuando lo razonable es hacerlo.
Los niños no nacen tercos, se hacen. Nuestra educación tuvo defectos que lo han convertido en terco y recalcitrante, Por eso las relaciones entre padres e hijos, entre maestros y alumnos, deben ser cordiales y de un respeto mutuo total.

5.-¿ Algún comentario o sugerencia ?
Laureano López nos dice:
Toda virtud nos ayuda a imitar mejor a Cristo, modelo de todas las virtudes. Él nos mostró constantemente su amor, desde su nacimiento hasta la muerte en la cruz. En la propia vida, el discípulo tiene que sembrar las buenas disposiciones; regarlas con costancia y confiar en Dios, quien realizará el crecimiento de la virtud.
El hombre de Dios, San Bernardo de Claraval, que era tenaz y perseverante, resumía así su experiencia: " poco aprovechará un hombre que siguiera a Cristo, si al final de su vida no consigue alcanzarle ".


En relación a la Perseverancia

1.- ¿ Qué es la virtud de la perseverancia ?
La perseverancia es " una virtud que inclina a persistir en el ejercicio del bien a pesar de la molestia que su prolongación nos ocasione ".
Dicho en otras palabras, es la firmeza y contancia en los propósitos y en las resoluciones de ánimo.
Es una virtud adjunta a la fortaleza, como virtud secundaria respecto de la virtud principal, que inclina a permanecer en el ejercicio del bien, a pesar de las molestias que ocasione su prolongación.

2.- ¿ Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia ?
- La perseverancia está ligada a muchos procesos exitosos en la vida, practicamente toda actividad requiere de constancia para llegar a buen término o final. Constituye un esfuerzo significativo y alegre por la victoria que se pone enfrente de la persona que determina objetivos nobles en su vida, cualesquiera que ellos sean.
- La perseverancia es condición de toda virtud y es una virtud adjunta a la fortaleza, como virtud secundaria respecto de la virtud principal.
- La constancia pertenece a la paciencia. Pero la paciencia es diferente de la perseverancia; entonces la constancia no pertenece a la perseverancia.
- La diferencia entre la perseverancia y la constancia cabría situarla en que la primera hace relación a que se continúe y se persista en la práctica del bien, mientras que la segunda acentúa las dificultades ante los obstáculos exteriores con que se tropieza.
Mientras no se tenga constancia y perseverancia en lo que estamos haciendo, entonces no lograremos nuestros objetivos.

3.- ¿ Cuáles son las características de una persona que vive ésta virtud ?
La persona perseverante no es la rutinaria que hace las cosas de una manera metódica, casi sin pensarlas ni razonarlas, que encuentra una huella y la sigue sin plantearse nada.
La persona perseverante a elegido un camino bueno, se ha decidido a alcanzar una meta que primero ha visto y analizado como buena, La abrazará, enfrentará a los obstáculos y no mermará su esfuerzo por alcanzarla. Volverá a empezar a pesar de la contrariedad. Su meta es el logro del objetivo a alcanzar. " Persevera y triunfarás ", dice el sabio refrán popular. Y la persona perseverante mira siempre su objetivo con luces largas, no con las cortas.

4.- ¿ Qué es lo que forja esta virtud ?
- El esfuerzo por cristalizar deseos rectos nos lleva a desarrollar talentos, a alcanzar metas espirituales y a prestar servicio a los demás.
- Para hacer algo en la vida, para ser exitoso en lo que uno se desempeñe, no se puede abandonar la lucha y retirarse a medio camino por algún problema; se debe luchar hasta alcanzar la meta.
- El optimismo, hay que luchar contra el desaliento. Si no lo hacemos, seremos pesimistas y luego tibios.
- Las cosas no se dan por si solas, hay que buscarlas y luchar por ellas.
- El sentido común. Obtendremos la dicha de luchar por lo que queremos.
- Hay que aprender a valernos por nosotros mismos y a trabajar con empeño, para alcanzar nustras metas.
- La firmeza en las dificultades y la constancia en la búsqueda del bien.
- Ser consciente que nadie puede responder por nosotros.
- La tenacidad, que es la capacidad para superar esfuerzos psicológicos superiores, sin que ellos nos vengan o nos fracturen.
- Todo en la vida exige posturas de esfuerzo, sacrificio, perseverancia y tenacidad.

5.- La tenacidad nada tiene que ver con: " me gusta, me encantaría, me muero de ganas ". Es una cosa muy distinta. A la hora de analizar el éxito de los grandes hombres, en la mayoría de los casos, se debió a la persistencia y a la concentración de esfuerzo, a la exactitud de propósitos. " A quien pone estos medios Dios le concede llegar al éxito ". ¿ Eres perseverante?. ¿ Cuáles son los medios que más te ayudan?. ¿ Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar ?
- Si soy perseverante, siempre lucho por conseguir mi meta; siempre y cuando esa meta no me aleje de Dios; además uso los medios necesarios para llegar a ello.
- Los medios que más me ayudan, para ser perseveante son: el esfuerzo, los sacrificios y la tenacidad.
Me fijo un objetivo y hago lo necesario para cumplirlo, para colaborar al bien de mi familia y de mi país.
No estamos en este mundo, para ser simples espectadores, sino que Dios nos envió para realizar una tarea, una misión y solo nosotros tenemos que hacerlo.
- Las dificultades que no me dejan avanzar en la perseverancia es muchas veces la falta de energía suficiente para perseverar; para seguir luchando a pesar de los fracasos.
Pero los católicos no podemos dejar de perseverar, aunque nos cueste, para poder llegar a vivir la Bienaventuranza Eterna.

6.- ¿ Algún comentario o sugerencia?
Para ser perseverante debemos ejercitar nuestra fuerza de voluntad, luchando todos los días contra la pereza, la negligencia y el descuido.
Mediante las virtudes de la fe, la esperanza y la perseverancia, el ser humano mejorará su carácter, desarrollará la confianza en sí mismo y luego se notará en sus acciones hacia las demás personas.
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor mariaines » Sab Ene 29, 2011 7:09 am

En relación a La Constancia


1. ¿Qué es la virtud de la constancia? ¿De qué virtudes se ayuda?
La constancia, hija de la fortaleza, es la virtud que nos conduce a llevar a cabo lo necesario para alcanzar las metas que nos hemos propuesto, pese a las dificultades internas o externas o a la disminución de la motivación personal por el tiempo transcurrido, sustentando el trabajo a fuerza de voluntad sólida que nos lleva a un esfuerzo continuado, venciendo las dificultades y venciéndonos a nosotros mismos.
Es una virtud íntimamente relacionada con la perseverancia.
2. ¿Cuáles son los frutos de la vivencia de esta virtud?
Los frutos son de una vida ordenada así , la constancia es lo que fortalece nuestra voluntad para continuar en una meta que nos hemos propuesto y nos ayuda a vencernos a nosotros mismos para no flaquear en lo cotidiano. Así como la tolerancia y la paciencia están dirigidas hacia las personas, la constancia está dirigida hacia un objetivo bueno, una meta o tarea a lograr.

3. ¿Cuáles son los “ambientes” o “actitudes” que refuerzan la virtud de la constancia?
El ambiente de la casa, de la escuela y la actitud de continuo vencimiento de nosotros mismos refuerzan esta virtud.
4. ¿Cuáles son los vicios contrarios a esta virtud?
Los vicios opuestos a la constancia son: la inconstancia (por defecto), que Santo Tomás llama molicie o blandura, debido a la pereza, a la mediocridad, al desaliento y a la ausencia de metas claras. El otro es la terquedad (por exceso) que se obstina en no ceder o cambiar la decisión cuando lo razonable es hacerlo. Empecinarnos en querer pintar el cuarto, (lo que está bien), pero un día húmedo de lluvia, cuando todos nos dicen (apoyados en el sentido común y la experiencia) que la humedad impedirá que la pintura se seque y retrasará el trabajo durante días complicando a todos los de la casa.

5. ¿Algún comentario o sugerencia?

En relación a La Perseverancia


1. ¿Qué es la virtud de la perseverancia?
La perseverancia es “una virtud que inclina a persistir en el ejercicio del bien a pesar de la molestia que su prolongación nos ocasione”
2. ¿Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia?
La constancia nos conduce a llevar a cabo lo necesario para alcanzar las metas que nos hemos propuesto, pese a las dificultades internas o externas o a la disminución de la motivación personal por el tiempo transcurrido, sustentando el trabajo a fuerza de voluntad sólida que nos lleva a un esfuerzo continuado, venciendo las dificultades y venciéndonos a nosotros mismos.
La perseverancia inclina a persistir en el ejercicio del bien.
3. ¿Cuáles son las características de una persona que vive esta virtud?
La persona perseverante a elegido un camino bueno se ha decidido a alcanzar una meta que primero ha visto y analizado como buena. La abrazará, enfrentara los obstáculos y no mermará su esfuerzo por alcanzarla. Volverá a empezar a pesar de la contrariedad. Su meta es el logro del objetivo a alcanzar. “Persevera y triunfarás” dice el sabio refrán popular. Y la persona perseverante mira siempre su objetivo con luces largas, no con las cortas.

4. ¿Qué es lo que forja esta virtud?
La disciplina, la constancia practicada como estilo de vida, la perseverancia, el optimismo, la esperanza, pero en dosis superiores a lo normal y prolongadas en el tiempo. La tenacidad florece sobre todas estas virtudes.
5. La tenacidad nada tiene que ver con: “me gusta, encantaría, me muero de ganas”. Es una cosa muy distinta. A la hora de analizar el éxito de los grandes hombres, en la mayoría de los casos, se debió a la persistencia y a la concentración de esfuerzo, a la exactitud de propósitos. “A quien pone estos medios Dios le concede llegar al éxito”. ¿Eres perseverante? ¿Cuáles son los medios que más te ayudan? ¿Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar?
Si soy perseverante cuando me propongo algo y lo que me la dificulta es que tengo que estar atenta a no caer en la terquedad.
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor luis guillermo » Sab Ene 29, 2011 10:20 am

En relación a La Constancia

1. ¿Qué es la virtud de la constancia? ¿De qué virtudes se ayuda?
La constancia, hija de la fortaleza, es la virtud que “nos conduce a llevar a cabo lo necesario para alcanzar las metas que nos hemos propuesto, pese a las dificultades internas o externas o a la disminución de la motivación personal por el tiempo transcurrido, sustentando el trabajo a fuerza de voluntad sólida que nos lleva a un esfuerzo continuado, venciendo las dificultades y venciéndonos a nosotros mismos”.

2. ¿Cuáles son los frutos de la vivencia de esta virtud?
Fortalecer nuestra voluntad para no rendirnos ante las adversidades de la vida.

3. ¿Cuáles son los “ambientes” o “actitudes” que refuerzan la virtud de la constancia?
El orden, la disciplina, la voluntad, el vencer nuestra pereza, la oración constante, el trabajo paciente, tener claro nuestro norte, nuestras metas , y por su puesto nuestra gran meta que es siempre Jesús y María

4. ¿Cuáles son los vicios contrarios a esta virtud?
La pereza, la desmotivación, la duda, el miedo, no tener claro nuestros objetivos.

5. ¿Algún comentario o sugerencia?
Es una hermosa virtud muy apropiada para estos tiempos de consumismo, poca valoración a Dios.


En relación a La Perseverancia

1. ¿Qué es la virtud de la perseverancia?
La perseverancia es “una virtud que inclina a persistir en el ejercicio del bien a pesar de la molestia que su prolongación nos ocasione

2. ¿Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia?
La perseverancia se prolonga más en el tiempo. La constancia nos renueva, pero la perseverancia requiere de más fuerza para seguir adelante con nuestras metas, tanto así que la perseverancia llevada a límites superiores ya se convierte en tenacidad, con la cual nada nos detiene. La tenacidad requiere de gran fuerza interna.

3. ¿Cuáles son las características de una persona que vive esta virtud?
Su gran paciencia, fortaleza interna, su comprensión para con nuestro prójimo.

4. ¿Qué es lo que forja esta virtud?
Una gran fuerza interna, señoría y grandeza ante las adversidades de la vida. Maestría en la vida para enseñar a los más jóvenes, para comprender más a las personas.

5. La tenacidad nada tiene que ver con: “me gusta, encantaría, me muero de ganas”. Es una cosa muy distinta. A la hora de analizar el éxito de los grandes hombres, en la mayoría de los casos, se debió a la persistencia y a la concentración de esfuerzo, a la exactitud de propósitos. “A quien pone estos medios Dios le concede llegar al éxito”. ¿Eres perseverante? ¿Cuáles son los medios que más te ayudan? ¿Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar?
He aprendido a ser perseverante cada vez más, justo ahora vivo una experiencia muy difícil. Tal vez me quede sin trabajo, mi esposa no sabe nada , pero sólo estoy re inventándome con un trabajo que hace años he soñado. Tengo miedo pero también tengo fe y tengo la fuerza para no rendirme, y luchar por Dios, por mi familia, por mi comunidad, por mí mismo.

6. ¿Algún comentario o sugerencia?
Gracias por esta oportunidad de narrar algo de mi difícil experiencia.
Luis Guillermo
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Salud Fisica y Emocional
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor Silviamaria » Sab Ene 29, 2011 3:04 pm

Hola, muchos saludos a todos. Mis respuestas son las siguientes:

En relación a La Constancia
1. ¿Qué es la virtud de la constancia? ¿De qué virtudes se ayuda?
Es la virtud que fortalece nuestra voluntad para continuar en una meta que nos hemos propuesto y nos ayuda a vencernos a nosotros mismos para no flaquear en lo cotidiano. Está dirigida hacia un objetivo bueno, una meta o tarea a lograr.
Se ayuda en la perseverancia que es más firme y se prolonga a través del tiempo, y en la fortaleza que robustece al alma contra los impedimentos y dificultades del medio en que nos movemos.

2. ¿Cuáles son los frutos de la vivencia de esta virtud?
Los frutos de vivir esta virtud son que si hacemos todas nuestras cosas, poco a poco diariamente con constancia podremos disfrutar de los resultados, por ejemplo en el estudio, en el trabajo, con nuestra enfermedad, los amigos, los compromisos, en los quehaceres de la casa. Se alivian las tareas

3.¿Cuáles son los “ambientes” o “actitudes” que refuerzan la virtud de la constancia?
En el hogar desde la infancia se practica esta virtud en los pequeños y cotidianos actos del diario vivir, ya cuando la persona es mayor se le hace normal ser responsable porque es constante y tiene fuerza de voluntad para cumplir con sus obligaciones y deberes por muy pequeños que sean.

4. ¿Cuáles son los vicios contrarios a esta virtud?
La inconstancia (por defecto) y la terquedad (por exceso).

En relación a La Perseverancia
1. ¿Qué es la virtud de la perseverancia?
Es la firmeza que nos hace resistir y continuar en nuestras metas, nuestros objetivos o nuestros trabajos, que generalmente estarán plagados de obstáculos en el camino de nuestras vidas y de nuestra salvación.

2.¿Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia?
La diferencia está en que la constancia es el inicio de una obra virtuosa que no se consumará del todo hasta pasado largo tiempo; y la perseverancia es la continuación del camino ya emprendido, a pesar de los obstáculos y molestias que vayan surgiendo en él.

3. ¿Cuáles son las características de una persona que vive esta virtud?
El trabajo constante, la fortaleza, la prudencia, para continuar con la obtención de sus objetivos y la humildad que debe estar presente en todos los actos de la vida.

4. ¿Qué es lo que forja esta virtud?
La educación que nace en el hogar como todas las virtudes, la constancia, la disciplina y la tenacidad para lograr los objetivos propuestos, si se cae vuelve a levantarse es perseverante.

5. La tenacidad nada tiene que ver con: “me gusta, encantaría, me muero de ganas”. Es una cosa muy distinta. A la hora de analizar el éxito de los grandes hombres, en la mayoría de los casos, se debió a la persistencia y a la concentración de esfuerzo, a la exactitud de propósitos. “A quien pone estos medios Dios le concede llegar al éxito”. ¿Eres perseverante? ¿Cuáles son los medios que más te ayudan? ¿Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar?

Soy perseverante en los actos de mi vida, con la ayuda de Dios y la Virgen tengo seguro todo lo que emprendo siempre con honestidad, sinceridad y humildad. Tengo que tener mucha fuerza de voluntad para no desanimarme porque allí si que todo se descontrola, hay que ser optimista, organizado, responsable y no perder la Fe en Dios.

Hasta la próxima lección, que pasen bien durante esta semana. :)
Silviamaria
 
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor maite3x56 » Sab Ene 29, 2011 7:01 pm

hola


1. ¿Qué es la virtud de la constancia? ¿De qué virtudes se ayuda?
La constancia, hija de la fortaleza, es la virtud que “nos conduce a llevar a cabo lo necesario para alcanzar las metas que nos hemos propuesto, pese a las dificultades internas o externas o a la disminución de la motivación personal por el tiempo transcurrido, sustentando el trabajo a fuerza de voluntad sólida que nos lleva a un esfuerzo continuado, venciendo las dificultades y venciéndonos a nosotros mismos”.
Dicho en otras palabras, la constancia es lo que fortalece nuestra voluntad para continuar en una meta que nos hemos propuesto y nos ayuda a vencernos a nosotros mismos para no flaquear en lo cotidiano. Así como la tolerancia y la paciencia están dirigidas hacia las personas, la constancia está dirigida hacia un objetivo bueno, una meta o Es una virtud íntimamente relacionada con la perseverancia. Las distinguen las distintas dificultades y el tiempo que conlleva el tratar de superar a cada una. Así como la perseverancia es más firme y se prolonga a través del tiempo, la constancia robustece al alma contra los impedimentos y dificultades menores y de todos los días que nos llegan del exterior, del medio en que nos movemos Necesitaremos ser constantes para lograr cualquier meta o hábito bueno que nos permitirá adelantar en la virtud. La constancia nos hará realizar todo lo que debemos hacer aunque nos resulte pequeño e insignificante el no hacerlo. tarea a lograr.

2. ¿Cuáles son los frutos de la vivencia de esta virtud?
Para esto hace falta generar desde la infancia un clima de orden, de trabajo y de esfuerzo (tan erosionado hoy en día), donde cada uno sea responsable de sus cosas y ejercitar la voluntad con pequeños hechos. No basta con tener buen corazón, habremos de formarlos en la constancia y la fuerza de voluntad con actos simples como: levantarse siempre con el despertador, bañarse todos los días aunque no tengamos ganas, peinarnos varias veces al día para no andar desaliñados y desprolijos (pensando principalmente en agradar a los demás) y especialmente antes de sentarse a la mesa, dejar la mochila en el lugar que corresponde, todos los días, cuando volvemos del colegio, (y no tirada sobre la mesa de entrada), llevar las zapatillas embarradas hasta el lavadero cada vez que volvemos de jugar al rugby. Obligar a los hijos pequeños y adolescentes a estos pequeños actos que ordenan y fortalecen la voluntad, aunque estemos cansadas de hacerlo y de repetirlo todos los días. Porque esa es la parte que nos toca a los padres, y a todos los adultos en general, la constancia en la formación y educación diaria de los más jóvenes, sin claudicar. Más adelante, ya adultos, la constancia será la virtud clave de lo que llamamos el mantenimiento de las cosas Ya sea el auto nos llevará a revisar periódicamente el aceite para que no se estropee el motor, a lavarlo tal vez semanalmente para mantenerlo limpio. Al buen mantenimiento de la casa, ya sea podando las enredaderas en el invierno, limpiando las canaletas varias veces en el otoño, cambiando los cueritos de las canillas cada vez que haga falta o en llamar el plomero cada vez que sea necesario y no dejar que las pérdidas de agua se agraven, pintando las persianas o llamando al carpintero o al herrero para que nos arregle las que se vencieron con el uso. Para mantener nuestra salud nos llevará a privarnos de comer chocolate ni frituras porque sufrimos del hígado y nos hace mal etc. Todo buen mantenimiento necesita imperiosamente de la virtud de la constancia, de lo diario, de lo cotidiano, de lo que aparenta ser poco importante pero no lo es.
Para esto hace falta generar desde la infancia un clima de orden, de trabajo y de esfuerzo (tan erosionado hoy en día), donde cada uno sea responsable de sus cosas y ejercitar la voluntad con pequeños hechos. No basta con tener buen corazón, habremos de formarlos en la constancia y la fuerza de voluntad con actos simples como: levantarse siempre con el despertador, bañarse todos los días aunque no tengamos ganas, peinarnos varias veces al día para no andar desaliñados y desprolijos (pensando principalmente en agradar a los demás) y especialmente antes de sentarse a la mesa, dejar la mochila en el lugar que corresponde, todos los días, cuando volvemos del colegio, (y no tirada sobre la mesa de entrada), llevar las zapatillas embarradas hasta el lavadero cada vez que volvemos de jugar al rugby. Obligar a los hijos pequeños y adolescentes a estos pequeños actos que ordenan y fortalecen la voluntad, aunque estemos cansadas de hacerlo y de repetirlo todos los días. Porque esa es la parte que nos toca a los padres, y a todos los adultos en general, la constancia en la formación y educación diaria de los más jóvenes, sin claudicar. Más adelante, ya adultos, la constancia será la virtud clave de lo que llamamos el mantenimiento de las cosas Ya sea el auto nos llevará a revisar periódicamente el aceite para que no se estropee el motor, a lavarlo tal vez semanalmente para mantenerlo limpio. Al buen mantenimiento de la casa, ya sea podando las enredaderas en el invierno, limpiando las canaletas varias veces en el otoño, cambiando los cueritos de las canillas cada vez que haga falta o en llamar el plomero cada vez que sea necesario y no dejar que las pérdidas de agua se agraven, pintando las persianas o llamando al carpintero o al herrero para que nos arregle las que se vencieron con el uso. Para mantener nuestra salud nos llevará a privarnos de comer chocolate ni frituras porque sufrimos del hígado y nos hace mal etc. Todo buen mantenimiento necesita imperiosamente de la virtud de la constancia, de lo diario, de lo cotidiano, de lo que aparenta ser poco importante pero no lo es.
3. ¿Cuáles son los “ambientes” o “actitudes” que refuerzan la virtud de la constancia?
La constancia suprimirá el “me gustaría” o el “podría” por el “puedo y lo lograré” y su premio será constatar el premio, la satisfacción y el orgullo que brinda el deber cumplido, aún en las pequeñas cosas.


4. ¿Cuáles son los vicios contrarios a esta virtud?
Los vicios opuestos a la constancia son: la inconstancia (por defecto), que Santo Tomás llama molicie o blandura, debido a la pereza, a la mediocridad, al desaliento y a la ausencia de metas claras. El otro es la terquedad (por exceso) que se obstina en no ceder o cambiar la decisión cuando lo razonable es hacerlo. Empecinarnos en querer pintar el cuarto, (lo que está bien), pero un día húmedo de lluvia, cuando todos nos dicen (apoyados en el sentido común y la experiencia) que la humedad impedirá que la pintura se seque y retrasará el trabajo durante días complicando a todos los de la casa.


En relación a La Perseverancia


1. ¿Qué es la virtud de la perseverancia?
La perseverancia es “una virtud que inclina a persistir en el ejercicio del bien a pesar de la molestia que su prolongación nos ocasione” (1)

Dicho en otras palabras, es la firmeza y constancia en los propósitos y en las resoluciones de ánimo. La perseverancia es la firmeza que nos hace resistir y continuar en nuestras metas, nuestros objetivos o nuestros trabajos, que generalmente estarán plagados de obstáculos en el camino de nuestras vidas y de nuestra salvación. “Se distingue de la longanimidad (que es la grandeza y constancia de ánimo en las adversidades) en que ésta se refiere más bien al comienzo de una obra virtuosa que no se consumará del todo hasta pasado largo tiempo; mientras que la perseverancia se refiere a la continuación del camino ya emprendido, a pesar de los obstáculos y molestias que vayan surgiendo en él. Lanzarse a una empresa virtuosa de larga y difícil ejecución es propio de la longanimidad; permanecer inquebrantablemente en el camino emprendido un día y otro día, sin desfallecer jamás, es propio de la perseverancia. Todas las virtudes necesitan de la ayuda y complemento de la perseverancia, sin la cual ninguna podría ser perfecta ni siquiera mantenerse mucho tiempo.” (2) Porque toda virtud, para ser incorporada a una vida virtuosa, necesita de la perseverancia. Es por eso que la Iglesia siempre enseñó el catecismo de la perseverancia.
2. ¿Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia?
La diferencia entre la "perseverancia" y la "constancia", cabría situarla en que
la primera hace relación a que se continúe y se persista en la práctica del bien,
mientras que la segunda acentúa las dificultades ante los obstáculos exteriores
con que se tropieza.

3. ¿Cuáles son las características de una persona que vive esta virtud?
La persona perseverante a elegido un camino bueno se ha decidido a alcanzar una meta que primero ha visto y analizado como buena. La abrazará, enfrentara los obstáculos y no mermará su esfuerzo por alcanzarla. Volverá a empezar a pesar de la contrariedad. Su meta es el logro del objetivo a alcanzar. “Persevera y triunfarás” dice el sabio refrán popular. Y la persona perseverante mira siempre su objetivo con luces largas, no con las cortas.
4. ¿Qué es lo que forja esta virtud?
Para ser perseverantes como padres, deberemos insistir en educar hasta la fatiga en un clima totalmente adverso no sólo a la educación cristiana, sino a todo orden natural como personas. Imposible educar sin perseverancia. Como cónyuges deberemos ser perseverantes en llevar adelante nuestros matrimonios hasta que la muerte nos separe, como habremos jurado un día ante Dios a Quien sólo le habrá bastado nuestra palabra. Ser perseverantes en mantenernos fieles durante años aunque nuestro cónyuge no lo merezca o no nos lo inspire. Porque ser fiel es un acto de la voluntad, pero serlo durante años (con motivos en contra y con oportunidades de no serlo) requiere muchas veces de una dosis heroica de fortaleza y perseverancia en los principios. Hoy más que nunca ya que nada nos ayuda.

Para ser perseverantes como estudiantes, deberemos luchar contra la pereza, las diversiones que nos alejarán de los estudios, los pseudo amigos que nos llamarán por teléfono incitándonos a dejar de estudiar y sobre ponernos a nuestros fracasos en los exámenes.

Para ser perseverantes como pacientes tendremos que mantener un tratamiento médico o de rehabilitación cuando y durante todo el tiempo que el médico nos lo pida. Hay accidentados en sillas de ruedas que trabajan años para volver a caminar. Para terminar de pagar un crédito (para lo cual habremos de privarnos de otros placeres y gratificaciones tal vez durante años). Para cumplir con una meta espiritual, laboral, intelectual, deportiva o económica. Aún detrás de cualquier campeón en el mundo del deporte que nos lo presentan rodeado de gloria habrá horas de entrenamiento perseverante en soledad.


5. La tenacidad nada tiene que ver con: “me gusta, encantaría, me muero de ganas”. Es una cosa muy distinta. A la hora de analizar el éxito de los grandes hombres, en la mayoría de los casos, se debió a la persistencia y a la concentración de esfuerzo, a la exactitud de propósitos. “A quien pone estos medios Dios le concede llegar al éxito”.
¿Eres perseverante? Si aunque cueste esfuerzos, me lo he propuesto, así logre terminar mi carrera después de adulta, poniendo sacrificio, y esfuerzo, y he logrado muchas cosas que me he propuesto
¿Cuáles son los medios que más te ayudan? En primer lugar sentir que necesito alcanzar o lograr las cosas, planificarme en función del tiempo, ir realizando las cosas poco a poca, con decisión.
¿Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar? Asumir una actitud negativa, el desinterés, dejar de hacer las cosas, la flojera.
6. ¿Algún comentario o sugerencia? Debemos proponernos lograr las metas, planificar nuestro tiempo, ir haciendo poco a poco, asumir una actitud de seguridad que lo lograremos, comenzar cuanto antes, antes debemos observar qué es lo necesitamos hacer para lograr las cosas, de no ser asi perderemos tiempo y nos frustraremos.
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor Romero1488 » Sab Ene 29, 2011 11:22 pm

Buenas noches

CONSTANCIA

1- La constancia es una virtud que fortalece nuestra voluntad para continuar en una meta que nos hemos propuesto y nos ayuda a vencernos a nosotros mismos para no flaquear en lo cotidiano. Se apoya de la fortaleza que es la disposición para realizar el bien a costa de cualquier sacrificio y venciendo todas las dificultados. También de la perseverancia que nos inclina a persistir en el ejércicio del bien.

2- Con la constancia podremos llevar a cabo las metas que nos hemos propuesto pese a las dificultades internas o externas y venciéndonos a nosotros mismos.

3- Se robustece contra los impedimentos y dificultades menores por lo tanto vivir en el clima de perseverancia hará vivir esa virtud.

4- Los vicios contrarios a la Constancia son la inconstancia (inconsistencia) y la terquedad.

5- Es vital para un ser humano ser constante para persistir en la Fe y en nuestra misión de derribar todo lo malo.

PERSEVERANCIA

1- La perseverancia es una virtud que inclina a persistir en el ejercicio del bien a pesar de las molestías que su prolongación nos ocasione.

2- La constancia mantiene el ritmo y la costumbre de hacer el bien; la perseverancia es nuestra insistencia para hacerlo.

3- La persona que se ha decidido por ser perseverante, está decidido a cumplir una meta que primero ha visto y analizado como buena y enfrentará obstaculos y no mermará su esfuerzo por alcanzarla.

4- Lo que forja esta virtud es la tenacidad.

5- Me considero perseverante a medias pues tengo la actitud y la mentalidad pero me falla la voluntad provocada principalmente por la pereza. Espero de ahora en adelante corregir esa actitud.

6- Ser perseverante es algo que se recomienda en especial, para lograr lo bueno. Seamos perseverantes para que en la vida nos vaya de maravilla.

Saludos cordiales.
[i]Pro Aris et Focis. III Año Triunfal[/i]
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor Gabriela Corona » Dom Ene 30, 2011 1:10 pm

SALUDOS A TODOS MIS HERMANOS EN CRISTO

En relación a la CONSTANCIA
1.- ¿Qué es la virtud de la constancia? ¿De qué virtudes se ayuda?
Es la virtud que fortalece nuestra voluntad para continuar en una meta que nos hemos propuesto ayudándonos a no flaquear, nos hará realizar todo lo que debemos hacer aunque nos resulte pequeño e insignificante el no hacerlo
Se ayuda de la fortaleza y la perseverancia

2.- ¿Cuáles son los frutos de la vivencia de esta virtud?
Buenos hábitos: en la escuela, en las cosas personales (casa, ropa, aseo ,etc.), con las personas para agradecer cada vez que recibimos algo de ellas, no interrumpir un tratamiento médico, para practicar un deporte y ser continuos, levantarse siempre temprano para no llegar tarde. Es decir cumplir con las pequeñas cosas para poder cumplir con las grandes.
La satisfacción y el orgullo que brinda el deber cumplido.

3.- ¿Cuáles son los ambientes o actitudes que refuerzan la virtud de la constancia?
Un clima de orden, trabajo y esfuerzo.
Padres que den ejemplo con lo mismo que se le pide y enseña a los hijos desde pequeños.
La formación y educación diaria de los más jóvenes (hijos y alumnos)

4.- ¿Cuáles son los vicios contrarios a esta virtud?
La inconsistencia (por defecto): pereza, mediocridad, desaliento y ausencia de metas claras.
La terquedad (por exceso): obstinación en no ceder o cambiar de decisión cuando lo correcto en hacerlo


En relación a la PERSEVERANCIA
1.- ¿Qué es la virtud de la perseverancia?
Es la firmeza y constancia en los propósitos y en las resoluciones de ánimo, nos hace resistir y continuar en nuestras metas que están plagadas de obstáculos.

2.- ¿Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia?
Las diferentes dificultades y el tiempo que conlleva el tratar de superar a cada una, la perseverancia es firme y se prolonga, la constancia robustece el alma contra los impedimentos y dificultades menores que nos lleguen del exterior.

3.- ¿Cuáles son las características de una persona que vive esta virtud?
Sabe centrar sus fuerzas en mantener su objetivo, no voltea hacia atrás
No se cansa y cumple.

4.- ¿Qué es lo que forja esta virtud?
Esta virtud forja a todas las demás virtudes ya que sin la perseverancia ninguna podría ser perfecta, ni siquiera mantenerse mucho tiempo, se vacilaría, se dudaría y se sentiría cansancio muy pronto

5.- ¿Eres perseverante? ¿Cuáles son los medios que más te ayudan? ¿Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar?
Soy perseverante, lo que me propongo lo voy logrando poco a poco, tengo buenos hábitos personales (levantarme temprano, ordenar mis cosas en la noche anterior, ordenar mi trabajo, no dejar para el otro día lo que puedo hacer en el momento, anoto mis pendientes para no olvidarlos, cumplo con trabajo y tareas en tiempo y forma)
Todo esto lo ha logrado gracias a mi mamá que nos enseño mucho buenos hábitos (tal vez a la fuerza ya que ella no los veía como virtudes sino como obligaciones, pero se lo agradezco)
Ahora yo se los enseño a mis hijos de manera de formación y ellos (adolescentes) los tienen y dan fruto, tanto en casa como en la escuela.

Los medios que más me ayudan son:
El cumplimiento de mi trabajo, de mis clases por internet estar al pendiente y pasar mi tarea y aunque termine uno, estoy siguiendo con otro (también será ejemplo para mis hijos y alumnos),
Tengo la conciencia de que soy ejemplo de los demás.

Dificultades; no soy perseverante en mis hábitos alimenticios ni en el deporte.

6.- Comentarios
Gracias a este curso, estoy conociéndome más a mi misma y por lo pronto voy a hacer lo que debí hacer antes. Ya visité a una nutrióloga para cuidar mi peso y empiezo con mucho entusiasmo y prometo vivir la virtud de la “perseverancia” por mi propio bien.

QUE DIOS LOS BENDITA A TODOS.
Gabriela
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor grimaldo » Dom Ene 30, 2011 8:56 pm

:D En relación a La Constancia


1. ¿Qué es la virtud de la constancia? ¿De qué virtudes se ayuda?
Es la hija de la fortaleza, es lo que fortalece nuestra voluntad para continuar en una meta que nos hemos propuesto y nos ayuda a vencernos a nosotros mismos para no flaquear en lo cotidiano. Así como la tolerancia y la paciencia están dirigidas hacia las personas, la constancia está dirigida hacia un objetivo bueno, una meta o tarea a lograr.

2. ¿Cuáles son los frutos de la vivencia de esta virtud?
Hacernos mas responsables de nuestras cosas, así como también de dejar todo en su lugar, si lo hacemos con constancia sera un habito que después no nos costara mucho esfuerzo seguirlo haciendo

3. ¿Cuáles son los “ambientes” o “actitudes” que refuerzan la virtud de la constancia?
Generar desde la infancia un clima de orden, de trabajo, y de esfuerzo. Donde cada uno sea responsable de sus cosas y ejercitar la voluntad con pequeños hechos.

4. ¿Cuáles son los vicios contrarios a esta virtud?
Los vicios opuestos a la constancia son: la inconstancia (por defecto), El otro es la terquedad (por exceso) que se obstina en no ceder o cambiar la decisión cuando lo razonable es hacerlo.

5. ¿Algún comentario o sugerencia?
Quisiera saber como voy con el curso.... gracias.

;) En relación a La Perseverancia


1. ¿Qué es la virtud de la perseverancia?
Es la firmeza que nos hace resistir y continuar en nuestras metas, nuestros objetivos o nuestros trabajos, que generalmente estarán plagados de obstáculos en el camino de nuestras vidas y de nuestra salvación.

2. ¿Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia?
En que la constancia, se refiere al comienzo de una obra virtuosa que no se consumará del todo hasta pasado largo tiempo; mientras que la perseverancia se refiere a la continuación del camino ya emprendido, a pesar de los obstáculos y molestias que vayan surgiendo en él

3. ¿Cuáles son las características de una persona que vive esta virtud?
La principal característica de esta virtud es que las personas que viven con ella, pelean contra su propia naturaleza.

4. ¿Qué es lo que forja esta virtud?
La disciplina, la constancia practicada como estilo de vida, la perseverancia, el optimismo, la esperanza, pero en dosis superiores a lo normal y prolongadas en el tiempo. La tenacidad florece sobre todas estas virtudes.

5. La tenacidad nada tiene que ver con: “me gusta, encantaría, me muero de ganas”. Es una cosa muy distinta. A la hora de analizar el éxito de los grandes hombres, en la mayoría de los casos, se debió a la persistencia y a la concentración de esfuerzo, a la exactitud de propósitos. “A quien pone estos medios Dios le concede llegar al éxito”. ¿Eres perseverante? ¿Cuáles son los medios que más te ayudan? ¿Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar?
Creo que si tengo un poco de tenacidad, el principal medio que tengo para lograrlo es encomendarme a dios y hacer la parte que me toca, con la oración y la constancia de realizar las cosas,las dificultades con las que me enfrento son la depresión soy una persona que me deprimo muy fácil pero me he enseñado a ser fuerte.

6. ¿Algún comentario o sugerencia?
Bendiciones.....gracias.
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor grimaldo » Dom Ene 30, 2011 8:56 pm

:D En relación a La Constancia


1. ¿Qué es la virtud de la constancia? ¿De qué virtudes se ayuda?
Es la hija de la fortaleza, es lo que fortalece nuestra voluntad para continuar en una meta que nos hemos propuesto y nos ayuda a vencernos a nosotros mismos para no flaquear en lo cotidiano. Así como la tolerancia y la paciencia están dirigidas hacia las personas, la constancia está dirigida hacia un objetivo bueno, una meta o tarea a lograr.

2. ¿Cuáles son los frutos de la vivencia de esta virtud?
Hacernos mas responsables de nuestras cosas, así como también de dejar todo en su lugar, si lo hacemos con constancia sera un habito que después no nos costara mucho esfuerzo seguirlo haciendo

3. ¿Cuáles son los “ambientes” o “actitudes” que refuerzan la virtud de la constancia?
Generar desde la infancia un clima de orden, de trabajo, y de esfuerzo. Donde cada uno sea responsable de sus cosas y ejercitar la voluntad con pequeños hechos.

4. ¿Cuáles son los vicios contrarios a esta virtud?
Los vicios opuestos a la constancia son: la inconstancia (por defecto), El otro es la terquedad (por exceso) que se obstina en no ceder o cambiar la decisión cuando lo razonable es hacerlo.

5. ¿Algún comentario o sugerencia?
Quisiera saber como voy con el curso.... gracias.

;) En relación a La Perseverancia


1. ¿Qué es la virtud de la perseverancia?
Es la firmeza que nos hace resistir y continuar en nuestras metas, nuestros objetivos o nuestros trabajos, que generalmente estarán plagados de obstáculos en el camino de nuestras vidas y de nuestra salvación.

2. ¿Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia?
En que la constancia, se refiere al comienzo de una obra virtuosa que no se consumará del todo hasta pasado largo tiempo; mientras que la perseverancia se refiere a la continuación del camino ya emprendido, a pesar de los obstáculos y molestias que vayan surgiendo en él

3. ¿Cuáles son las características de una persona que vive esta virtud?
La principal característica de esta virtud es que las personas que viven con ella, pelean contra su propia naturaleza.

4. ¿Qué es lo que forja esta virtud?
La disciplina, la constancia practicada como estilo de vida, la perseverancia, el optimismo, la esperanza, pero en dosis superiores a lo normal y prolongadas en el tiempo. La tenacidad florece sobre todas estas virtudes.

5. La tenacidad nada tiene que ver con: “me gusta, encantaría, me muero de ganas”. Es una cosa muy distinta. A la hora de analizar el éxito de los grandes hombres, en la mayoría de los casos, se debió a la persistencia y a la concentración de esfuerzo, a la exactitud de propósitos. “A quien pone estos medios Dios le concede llegar al éxito”. ¿Eres perseverante? ¿Cuáles son los medios que más te ayudan? ¿Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar?
Creo que si tengo un poco de tenacidad, el principal medio que tengo para lograrlo es encomendarme a dios y hacer la parte que me toca, con la oración y la constancia de realizar las cosas,las dificultades con las que me enfrento son la depresión soy una persona que me deprimo muy fácil pero me he enseñado a ser fuerte.

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Bendiciones.....gracias.
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor marisolita29 » Lun Ene 31, 2011 9:49 am

En relación a La Constancia


1. ¿Qué es la virtud de la constancia? ¿De qué virtudes se ayuda?
R. La constancia es lo que fortalece nuestra voluntad para continuar en una meta que nos hemos propuesto y nos ayuda a vencernos a nosotros mismos para mantenernos firmes en alcanzar la meta u objetivo. Está íntimamente relacionada con la Perseverancia que se prolonga en el tiempo.

2. ¿Cuáles son los frutos de la vivencia de esta virtud?
R. El premio será alcanzar la meta u objetivo propuesto, la satisfacción y el orgullo que brinda el deber cumplido, aún en las pequeñas cosas.

3. ¿Cuáles son los “ambientes” o “actitudes” que refuerzan la virtud de la constancia?
R. Desde el hogar se debe crear un ambiente de orden, de trabajo y de esfuerzo, fomentar la responsabilidad, educar en la fe en Dios, sembrar valores y preceptos morales que ayuden a adiestrar el carácter y el espíritu de los individuos, de tal manera que se manifieste “la buena y adecuada actitud” en todos los ámbitos de la vida y se ponga en práctica cada vez que se trace una meta o se persiga un objetivo.

4. ¿Cuáles son los vicios contrarios a esta virtud?
R. Por defecto, la Inconstancia que puede conllevar a la pereza, a la mediocridad, al desaliento y a la ausencia de metas claras; por exceso La Terquedad que inclina al intelecto a no ceder o cambiar la decisión cuando lo razonable es hacerlo.

En relación a La Perseverancia

1. ¿Qué es la virtud de la perseverancia?
R. La perseverancia es la firmeza que nos hace resistir y continuar en nuestras metas, nuestros objetivos o nuestros trabajos, que generalmente estarán plagados de obstáculos en el camino de nuestras vidas y de nuestra salvación.

2. ¿Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia?
R. La Constancia es la firmeza en los propósitos y en las resoluciones de ánimo, está dirigida hacia un objetivo bueno, una meta o tarea a lograr. La Constancia robustece al alma contra los impedimentos y dificultades menores y que diariamente nos llegan del exterior o del medio en que nos movemos Necesitaremos ser constantes para lograr cualquier meta o hábito bueno que nos permitirá adelantar en la virtud, por medio de ella realizaremos todo lo que debemos hacer aunque nos resulte pequeño e insignificante el no hacerlo.
La perseverancia es más firme y se prolonga a través del tiempo

3. ¿Cuáles son las características de una persona que vive esta virtud?
R. La persona perseverante es asertiva, racional, ecuánime y está clara en las metas trazadas y en lo que quiere obtener en la vida, asimismo, tiene orden y disciplina en su forma de vivir, pensar y actuar; dirige su mirada hacia un objetivo y se propone alcanzarlo, no sin antes haber analizado los medios con los que cuenta para llegar a hasta el y habrá vislumbrado los posible obstáculos que pudieran presentarse en el camino, pero estos, no disminuirán ni su esfuerzo ni su entusiasmo para continuar en la ruta de su objetivo. Volverá a empezar a pesar de la contrariedad, porque su meta es el logro del objetivo a alcanzar.

4. ¿Qué es lo que forja esta virtud?
R. La constancia que se ha mantenido en la vida, sumado al entusiasmo que nos genera emprender una meta y la satisfacción que nos produzcan los logros alcanzados.

5. La tenacidad nada tiene que ver con: “me gusta, encantaría, me muero de ganas”. Es una cosa muy distinta. A la hora de analizar el éxito de los grandes hombres, en la mayoría de los casos, se debió a la persistencia y a la concentración de esfuerzo, a la exactitud de propósitos. “A quien pone estos medios Dios le concede llegar al éxito”. ¿Eres perseverante? ¿Cuáles son los medios que más te ayudan? ¿Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar?
R. Si soy perseverante cuando me trazo una meta.
Entre los medios de los cuales me valgo, está el entusiasmo y/o empuje que produce llegar a un objetivo determinado, el ánimo y el esfuerzo que me contagian las personas y que juntas compartimos el mismo objetivo, a veces de los recursos materiales (dinero, vehículo, etc.) que Dios me regala para poder alcanzar el fin.
Dos de las dificultades con las cuales me he conseguido en el camino para el logro de mis objetivos, es dinero y el tiempo que debo dedicarle a ello, ya que implica el cumplimiento de horarios establecidos, y a veces no dispongo del tiempo ni de los recursos económicos para realizarlos.
marisolita29
 
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor misioneracolombiana » Lun Ene 31, 2011 1:49 pm

En relación a La Constancia

1. ¿Qué es la virtud de la constancia? ¿De qué virtudes se ayuda?
La constancia, hija de la fortaleza, es la virtud que “nos conduce a llevar a cabo lo necesario para alcanzar las metas que nos hemos propuesto, pese a las dificultades internas o externas o a la disminución de la motivación personal por el tiempo transcurrido, sustentando el trabajo a fuerza de voluntad sólida que nos lleva a un esfuerzo continuado, venciendo las dificultades y venciéndonos a nosotros mismos”. Es una virtud íntimamente relacionada con la perseverancia

2. ¿Cuáles son los frutos de la vivencia de esta virtud?
la constancia robustece al alma contra los impedimentos y dificultades menores y de todos los días que nos llegan del exterior, del medio en que nos movemos Necesitaremos ser constantes para lograr cualquier meta o hábito bueno que nos permitirá adelantar en la virtud. La constancia nos hará realizar todo lo que debemos hacer aunque nos resulte pequeño e insignificante el no hacerlo.

3. ¿Cuáles son los “ambientes” o “actitudes” que refuerzan la virtud de la constancia?
Desde hacer todos los días los deberes y tareas ni bien llegamos del colegio, (y descansamos un rato mientras tomamos algo), guardar nuestros libros y cuadernos después de hacer los deberes en la mochila o continuar con el buen hábito de coser los botones que hacen falta cada vez que planchamos y vemos que se han caído. Si lo hacemos así, con constancia, un poco todos los días, poco tendremos que estudiar para los exámenes porque será un fuerte repaso. Nos lucirá el haber sido constantes durante el año y podremos disfrutar de las vacaciones.

4. ¿Cuáles son los vicios contrarios a esta virtud?
Los vicios opuestos a la constancia son: la inconstancia (por defecto), que Santo Tomás llama molicie o blandura, debido a la pereza, a la mediocridad, al desaliento y a la ausencia de metas claras. El otro es la terquedad (por exceso) que se obstina en no ceder o cambiar la decisión cuando lo razonable es hacerlo. Empecinarnos en querer pintar el cuarto, (lo que está bien), pero un día húmedo de lluvia, cuando todos nos dicen (apoyados en el sentido común y la experiencia) que la humedad impedirá que la pintura se seque y retrasará el trabajo durante días complicando a todos los de la casa.

5. ¿Algún comentario o sugerencia

En relación a La Perseverancia
1. ¿Qué es la virtud de la perseverancia?
La perseverancia es “una virtud que inclina a persistir en el ejercicio del bien a pesar de la molestia que su prolongación nos ocasione” Dicho en otras palabras, es la firmeza y constancia en los propósitos y en las resoluciones de ánimo.

2. ¿Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia?
Las distinguen las distintas dificultades y el tiempo que conlleva el tratar de superar a cada una. Así como la perseverancia es más firme y se prolonga a través del tiempo, la constancia robustece al alma contra los impedimentos y dificultades menores y de todos los días que nos llegan del exterior, del medio en que nos movemos Necesitaremos ser constantes para lograr cualquier meta o hábito bueno que nos permitirá adelantar en la virtud. La constancia nos hará realizar todo lo que debemos hacer aunque nos resulte pequeño e insignificante el no hacerlo.

3. ¿Cuáles son las características de una persona que vive esta virtud?
La persona perseverante a elegido un camino bueno se ha decidido a alcanzar una meta que primero ha visto y analizado como buena. La abrazará, enfrentara los obstáculos y no mermará su esfuerzo por alcanzarla. Volverá a empezar a pesar de la contrariedad. Su meta es el logro del objetivo a alcanzar. “Persevera y triunfarás” dice el sabio refrán popular. Y la persona perseverante mira siempre su objetivo con luces largas, no con las cortas.

4. ¿Qué es lo que forja esta virtud?
La tenacidad, la concentración de esfuerzo, la exactitud de propósitos. “A quien pone estos medios Dios le concede llegar al éxito”.

5-¿Eres perseverante? Casi siempre
¿Cuáles son los medios que más te ayudan? Mi fe, el amor al projimo
¿Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar?falta de tiempo


6. ¿Algún comentario o sugerencia?
misioneracolombiana
 
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Re: Lección 30 y 31 La Constancia y la Perseverancia

Notapor profehumberto1 » Lun Ene 31, 2011 4:24 pm

En relación a La Constancia
1. ¿Qué es la virtud de la constancia? ¿De qué virtudes se ayuda?
La constancia, hija de la fortaleza, es la virtud que “nos conduce a llevar a cabo lo necesario para alcanzar las metas que nos hemos propuesto, pese a las dificultades internas o externas o a la disminución de la motivación personal por el tiempo transcurrido, sustentando el trabajo a fuerza de voluntad sólida que nos lleva a un esfuerzo continuado, venciendo las dificultades y venciéndonos a nosotros mismos”.
Es una virtud íntimamente relacionada con la perseverancia.
2. ¿Cuáles son los frutos de la vivencia de esta virtud?Así como la perseverancia es más firme y se prolonga a través del tiempo, la constancia robustece al alma contra los impedimentos y dificultades menores y de todos los días que nos llegan del exterior, del medio en que nos movemos Necesitaremos ser constantes para lograr cualquier meta o hábito bueno que nos permitirá adelantar en la virtud. La constancia nos hará realizar todo lo que debemos hacer aunque nos resulte pequeño e insignificante el no hacerlo. Desde hacer todos los días los deberes y tareas ni bien llegamos del colegio, (y descansamos un rato mientras tomamos algo), guardar nuestros libros y cuadernos después de hacer los deberes en la mochila o continuar con el buen hábito de coser los botones que hacen falta cada vez que planchamos y vemos que se han caído. Si lo hacemos así, con constancia, un poco todos los días, poco tendremos que estudiar para los exámenes porque será un fuerte repaso. Nos lucirá el haber sido constantes durante el año y podremos disfrutar de las vacaciones. De la misma manera tendremos siempre la ropa con los botones al día.
3. ¿Cuáles son los “ambientes” o “actitudes” que refuerzan la virtud de la constancia?Para esto hace falta generar desde la infancia un clima de orden, de trabajo y de esfuerzo (tan erosionado hoy en día), donde cada uno sea responsable de sus cosas y ejercitar la voluntad con pequeños hechos.
4. ¿Cuáles son los vicios contrarios a esta virtud?Los vicios opuestos a la constancia son: la inconstancia (por defecto), que Santo Tomás llama molicie o blandura, debido a la pereza, a la mediocridad, al desaliento y a la ausencia de metas claras. El otro es la terquedad (por exceso) que se obstina en no ceder o cambiar la decisión cuando lo razonable es hacerlo. Empecinarnos en querer pintar el cuarto, (lo que está bien), pero un día húmedo de lluvia, cuando todos nos dicen (apoyados en el sentido común y la experiencia) que la humedad impedirá que la pintura se seque y retrasará el trabajo durante días complicando a todos los de la casa

En relación a La Perseverancia
1. ¿Qué es la virtud de la perseverancia?
La perseverancia es “una virtud que inclina a persistir en el ejercicio del bien a pesar de la molestia que su prolongación nos ocasione”
2. ¿Cuál es la diferencia entre la constancia y la perseverancia?La perseverancia es la firmeza que nos hace resistir y continuar en nuestras metas, nuestros objetivos o nuestros trabajos, que generalmente estarán plagados de obstáculos en el camino de nuestras vidas y de nuestra salvación. “Se distingue de la longanimidad (que es la grandeza y constancia de ánimo en las adversidades) en que ésta se refiere más bien al comienzo de una obra virtuosa que no se consumará del todo hasta pasado largo tiempo; mientras que la perseverancia se refiere a la continuación del camino ya emprendido, a pesar de los obstáculos y molestias que vayan surgiendo en él. Lanzarse a una empresa virtuosa de larga y difícil ejecución es propio de la longanimidad; permanecer inquebrantablemente en el camino emprendido un día y otro día, sin desfallecer jamás, es propio de la perseverancia. Todas las virtudes necesitan de la ayuda y complemento de la perseverancia, sin la cual ninguna podría ser perfecta ni siquiera mantenerse mucho tiempo.” (2) Porque toda virtud, para ser incorporada a una vida virtuosa, necesita de la perseverancia. Es por eso que la Iglesia siempre enseñó el catecismo de la perseverancia.
3. ¿Cuáles son las características de una persona que vive esta virtud?La persona perseverante a elegido un camino bueno se ha decidido a alcanzar una meta que primero ha visto y analizado como buena. La abrazará, enfrentara los obstáculos y no mermará su esfuerzo por alcanzarla. Volverá a empezar a pesar de la contrariedad. Su meta es el logro del objetivo a alcanzar. “Persevera y triunfarás” dice el sabio refrán popular. Y la persona perseverante mira siempre su objetivo con luces largas, no con las cortas.
4. ¿Qué es lo que forja esta virtud?La disciplina, la constancia practicada como estilo de vida, la perseverancia, el optimismo, la esperanza, pero en dosis superiores a lo normal y prolongadas en el tiempo. La tenacidad florece sobre todas estas virtudes. La tenacidad no es obstinación, porfía, terquedad, mantenerse enceguecido sin escuchar argumentos que nos persuaden de una postura que no es razonable. Esta no es una actitud cristiana, sino necia. La persona tenaz tiene ideales y objetivos elevados que la sostienen (naturales y sobrenaturales) pero ideales, metas buenas y positivas como dijimos anteriormente.
5. La tenacidad nada tiene que ver con: “me gusta, encantaría, me muero de ganas”. Es una cosa muy distinta. A la hora de analizar el éxito de los grandes hombres, en la mayoría de los casos, se debió a la persistencia y a la concentración de esfuerzo, a la exactitud de propósitos. “A quien pone estos medios Dios le concede llegar al éxito”. ¿Eres perseverante? ¿Cuáles son los medios que más te ayudan? ¿Cuáles son las dificultades que no te dejan avanzar?Trato de serlo. Claro que las cosas no se dan cuando yo quiero sino cuando en realidad las necesito. El medio que más me ayuda a no echarme para atrás en primer lugar es Dios por medio de mi esposa que me apoya en todas mis decisiones. Los medios que a veces me impiden salir adelante es el dinero.
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