ENRIQUE A. SIMMONDS B.(Estudiante Claretiano)Email:
easboys@hotmail.comMérida (Venezuela); 26 – Octubre – 2010.
Sesión 4 - Pasos de la pastoral vocacionalParticipación en el Foro1. ¿Cuáles son los 3 pasos de la estrategia vocacional?
2. ¿Cómo hacer más contactos vocacionales?
3. ¿Qué medios hay para cultivar esos contactos?
4. ¿Qué ayuda para concretar esos contactos a final del año?
Creo que dentro de las sesiones de este curso hemos llegado a una parte muy concreta en lo que concierne a esta pastoral como lo son los
pasos de la pastoral vocacional y en esta en específico se nos plantean tres (3) momentos bastante claros, a mi modo de ver, de la
estrategia vocacional y de los cuales no creo que estemos ajenos a ellos, ya que mínimamente o los hemos aplicado con jóvenes o nosotros mismos hemos pasado por ahí. Un primer momento de
contactar, o cómo se escucha hablar en algunos grupos de jóvenes de nuestras comunidades
momento de llamado o reclutamiento, es la etapa donde como animadores vamos echando las redes valiéndonos de los medios que estén a nuestro alcance.
Un segundo momento de
cultivar esa inquietud que ha quedado dentro de la persona a la cual se le hizo un primer llamado y aquí es cuando comienza un proceso de acompañamiento vocacional. En este punto quisiera hacer una acotación personal, la cual se nos ha venido recalcando a lo largo de estas sesiones y es que el trabajo de promoción vocacional
no se reduce a una persona o equipo de animación vocacional específico delegado sino que es responsabilidad y tarea de todos los que, en mi caso, formamos parte de una congregación religiosa y digo esto por lo siguiente, el equipo de animación vocacional de una congregación tiene su sede en un lugar específico y ellos dentro de su planificación tienen visitas a los jóvenes con inquietudes vocacionales por todo el territorio nacional las cuales son momentos puntuales del año,
¿qué ocurre con el joven el resto de ese año? Pues es aquí donde debemos entrar el resto de los que conformamos la congregación en ese país, en nosotros también está la responsabilidad de ser animadores vocacionales y complementar al equipo de animación delegado; es trabajar al ejemplo de una red donde cada hilo perfecciona la labor del resto.
Y un tercer momento de
concretar este proceso de acompañamiento que se ha venido teniendo con la persona a lo largo de un tiempo específico. El llegar a esta etapa no garantiza que la persona tome la decisión de ingresar a un seminario o casa de formación, con que hayamos colaborado a que la persona misma clarifique e identifique el llamado que le hace Dios, creo que podemos pensar que hemos logrado ayudar en gran medida.
Hablando ahora de los contactos vocacionales podemos valernos de las herramientas que tenemos a nuestro alcance, y decir una vez más que en esta pastoral hay que poner nuestra creatividad al máximo; estos contactos podemos hacerlos a través de retiros, catequesis, encuentros con las personas, visitas a familias, peregrinaciones, convivencias, encuentros, entre otros.
Una vez conseguido contactos viene esa segunda etapa, la de cultivar y hacerlo a través de retiros, actividades de misión servicios de apostolados, oración, lectura de la Palabra de Dios, entrevistas personales, etc., para luego ir concretando aquello que se ha venido cultivando [en un camino de acompañamiento y discernimiento vocacional] a lo largo de cierto tiempo.