por marina » Mar Feb 22, 2011 11:50 pm
Es una materia espiritualizada.
tenemos la posibilidad de comunicación con el mundo espiritual El conocimiento, la inteligencia, la razón, la intuición, están al servicio del amor, nos muestran el bien, y la voluntad se adhiere libremente al bien pero podría no hacerlo.
En nosotros la materia puede amar a su Creador. Somos como la boca de la materia y por eso en nosotros la materia canta si alabamos y amamos al Señor; en nosotros la materia lo ama. Somos como un apéndice viviente, la punta del dedo de las estrellas, que señala hacia Dios.
sufrimiento de toda la creación es como el de los dolores de parto . El universo está esperando nuestra manifestación de hijos de Dios, nuestro nacimiento como hijos, como la madre espera ver al hijo que lleva en sus entrañas. Por eso, la Sagrada Escritura durará mientras duren los Cielos y la tierra, porque habla de nosotros. Durará mientras la humanidad exista en el tiempo. Tenemos en la Sagrada Escritura, como se dice en el teatro, el “libreto” de la Voluntad del Padre sobre Jesús, que es nuestra Cabeza, y sobre su Cuerpo, que somos nosotros.
Su inteligencia conoce el bien sin errores ni ignorancia. Su voluntad elige el bien sin malicia. Su apetito concupiscible es templado y usa de los bienes tanto cuanto y su apetito irascible le da fortaleza, le da esperanza de alcanzar el bien arduo, lo hace paciente ante lo adverso, lo hace constante para lograr el bien ausente.
Ese es el estado de inocencia del que suelen hablar los teólogos. Es un ser equilibrado, armónico, lo cual no quiere decir que no pueda pecar
Dios amasa a Adán con sus propias manos.
La capacidad de estar y percibir la presencia de Dios le viene a Adán de su alma.
Dios, Creador de cielo y tierra, era el Auxilio de Adán antes de que tuviera mujer e hijos. Pero el mismo Señor quiso que Adán no tuviera sólo el auxilio divino sino “un auxilio semejante a él frente a él”. Y se prepara aquí la creación de Eva, que se presenta como una iniciativa divina y un don de Dios. Eva no es posesión de Adán sino don de Dios para Adán.
Pero también nos dice el relato que, en la intención divina, Eva es para Adán y no Adán para Eva.
Según esta visión el varón, de acuerdo con el orden divino de su creación, primero es religioso y después social. Porque Adán, antes de poder relacionarse con Eva o con otro ser humano, ya se relacionaba con Dios. Pero tenía - como dijimos - una capacidad “ociosa” de comunicación espiritual humana. Y para eso Dios crea a la mujer. Dijo Dios: “Hagamos a la mujer”.
Eva viene después de Adán porque es para Adán. La mujer no es para sí misma. La mujer es para el otro. Tiene su sentido en aquél a quien está destinada por Dios para ayudar, para auxiliar, porque sin ella no puede vivir plenamente lo que está destinado a Dios.
Suele caer en la tentación de volverse sobre sí misma y de empezar a vivir para sí misma.
ella es feliz precisamente cuando vive inclinada y dirigida al cuidado del otro.
Dice que la construyó. De la costilla del varón armó una mujer, como un aparato mucho más complicado.
Porque la casa, la ciudad, el templo son habitaciones, son lugares habitables. La casa está hecha para que habiten las familias. La ciudad está hecha para que habiten los ciudadanos en amistad. El templo está hecho para que habite Dios. La mujer está hecha para ser un auxilio de Adán; es un ser acogedor.
Esta revelación de la mujer creada como un ser habitable, acogedor, tiene una profundidad muy grande porque tanto la casa como la ciudad y el templo son los lugares donde habita el amor. Ella está hecha para ser maestra en la amistad y acogedora. Mientras que el destino de Adán estaba en trabajar el Paraíso, era una destinación hacia fuera, la de Eva es una destinación hacia adentro. El
La destinación de Eva es una destinación espiritual para la ayuda del varón, mientras él tiene una destinación terrenal de cultivar el jardín. Diríamos que es la amiga del jardinero. Ella está destinada a la amistad por designio divino. Destinada a colmar la capacidad ociosa de comunicación espiritual del varón, que está insatisfecha y a cultivar la interioridad del varón que en su dirección hacia lo exterior debe ser fomentada y cultivada.
la ciudad, la sociedad nace del seno de Eva, para Adán. La esposa manifiesta su amor al esposo, dándole hijos.
una de las consecuencias del pecado original es que el varón deje de apreciar esta ayuda; que en vez de alegrarse con la amistad de la mujer y con la comunicación espiritual con ella, se aburra; hunda la cabeza en el diario o se enfrasque en la tele. ¡Eso le pasa por el pecado original! Porque en el Paraíso, donde no había ni televisión ni diario ni nada (y aunque los hubiera habido) ¿cómo pasaba sus ratos agradables Adán? En compañía de Eva. Supongo que Eva cantaría, no sé. Pero el espectáculo del Paraíso para Adán era Eva, escucharla y comunicarse. Y era la maestra de la amistad para Adán.
la caída en el pecado original precisamente es lo que hace que el varón tienda a hacerse polígamo. En cambio, la mujer, que mantiene su deseo de ser amada y ser la única, es monógama. Y ella es la que tiene que enseñar al varón cultivando la amistad y hacerse única. Pero esto no pertenece al plano de la sexualidad sino al plano de la amistad. ¡Qué importante esta visión!
Notemos, todavía, cómo Adán es creado del barro y Eva es creada de carne humana. Es decir que la materia de que están hechos ya es distinta. Adán de materia, Eva de materia ya humanizada. El cuerpo de Eva, rasgo diferencial, no fue tomado del barro sino del cuerpo de Adán. Hasta en su misma materia es más espiritual. La Escritura la llama “ishá”, varona, porque del varón, “ish”, fue tomada. Por eso Eva, que es creada de materia más digna y construida sofisticadamente, es puesta al servicio de Adán. Como los Ángeles son puestos al servicio del Hombre. Y como el Hijo de Dios se pone al servicio de los Hombres y viene a lavarnos los pies.
encontró allí y la reconoció como propia, Adán tiende a reclamarla desde el comienzo, a necesitarla y reconocerla como parte suya sin la cual se sentiría incompleto, por lo que tiende a atraerla hacia sí. Y ella se reencuentra en él como en su origen, como en el todo al cual ella pertenece y sin el cual no tiene un sentido autónomo. Cada uno reclama al otro como la parte al todo y el todo a la parte. Y ninguno de los dos está completo sin el otro. ¡Qué Sabiduría la de este relato!
42) Podríamos decir que Dios es el divino Suegro de Adán porque le da la esposa. Y por lo tanto ya el primer matrimonio es una realidad sacra, una realidad santa en la que Dios está en el medio, creando y uniendo. “Lo que Dios ha unido, el hombre no lo separe”. Ahí ya aparece esa frase. La obra es de Dios. El amor humano es una obra divina. Hay una revelación de la santidad del amor que va a culminar en la revelación en el Nuevo Testamento de la sacralidad del amor.
¿Qué diferencia hay entre la creación de Adán y la creación de Eva?
Dios amasa a Adán con sus propias manos.
de eva Dice que la construyó. De la costilla del varón armó una mujer, como un aparato mucho más complicado.
Esta revelación de la mujer creada como un ser habitable, acogedor, tiene una profundidad muy grande porque tanto la casa como la ciudad y el templo son los lugares donde habita el amor.
Adán es creado del barro y Eva es creada de carne humana. Es decir que la materia de que están hechos ya es distinta. Adán de materia, Eva de materia ya humanizada. El cuerpo de Eva, rasgo diferencial, no fue tomado del barro sino del cuerpo de Adán. Hasta en su misma materia es más espiritual. La Escritura la llama “ishá”, varona, porque del varón, “ish”, fue tomada. Por eso Eva, que es creada de materia más digna y construida sofisticadamente, es puesta al servicio de Adán. Como los Ángeles son puestos al servicio del Hombre. Y como el Hijo de Dios se pone al servicio de los Hombres y viene a lavarnos los pies.
encontró allí y la reconoció como propia, Adán tiende a reclamarla desde el comienzo, a necesitarla y reconocerla como parte suya sin la cual se sentiría incompleto, por lo que tiende a atraerla hacia sí. Y ella se reencuentra en él como en su origen, como en el todo al cual ella pertenece y sin el cual no tiene un sentido autónomo. Cada uno reclama al otro como la parte al todo y el todo a la parte. Y ninguno de los dos está completo sin el otro. ¡Qué Sabiduría la de este relato!
¡Santa alegría!
El que llegue primero es un feto(Los espermatozoides)
Glorioso Patriarca San José, ruega por nosotros, cuida de la Iglesia con la amorosa solicitud con que cuidaste de Jesús