eduarod escribió:Estimado en Cristo Fausto1880:
Eso de que Dios conoce todos los futuros posibles es la doctrina del conocimiento medio o ciencia media de Dios que algún hermano mencionó al inicio del tema. Y en efecto, es un asunto controversial, aunque, en lo personal, me inclino a pensar que Dios ciertamente conoce "lo que hubiera pasado si..."...
... para que exista una sucesión de actos, debe estar el ente en cuestión en potencia de cambiar, de hacer algo que antes no hacía, ...
Pero en Dios estos movimientos NO existen (por eso Aristóteles le llamaba el Motor inmóvil), pues Él ES Acto Puro. No hay NADA que Dios no tenga, ni NADA que ninguna creatura pueda darle. Simplemente Dios NO está en potencia de nada, eso es esencialmente imposible. Por tanto, si Dios no pasa de la potencia al acto, si no hay sucesión de actos en Él, entonces está claro que hemos contemplado su Atemporalidad,...
Y así, entendiendo que Dios es Atemporal, que NO está sujeto Él a esta sucesión de actos que forma el devenir que llamamos tiempo, podemos con mayor facilidad entender que para Él el futuro "no existe", pero no porque para Él sea algo "indeterminado que no ocurre aún". Sino al revés: porque ante Él son siempre presentes TODAS nuestras acciones que nosotros percibimos en nuestro devenir de actos como pasadas, presentes y futuras.
... Él ha sabido SIEMPRE, por ejemplo, que nuestros padres se iban a conocer y que la oportunidad de concebirnos iba a existir. NO quiere decir que Él los haya forzado a enamorarse, casarse, etc. Eso lo decidieron libremente nuestros papás...
¿Qué es el INFINITO? El infinito no lo conocemos en la realidad. Nada que podamos observar es infinito. Nada de lo que hemos observado es infinito. Propiamente, el infinito sólo existe en matemáticas, como EXTRAPOLACIÓN de "muy grande". "Tan grande como lo quieras imaginar". Es la extrapolación del concepto "grandísimo", ni siquiera es un concepto que podamos aprehender. Usamos la palabra, sí, pero no cabe en nuestra cabeza.
Dices que Dios es Acto Puro. Y estoy de acuerdo... respecto a nosotros. Para nosotros Dios es infinito y es acto puro. ¿Y si saliéramos de la charca? ¿Si fuéramos capaces de hablar cara a cara con Dios? Ahí la cuestión deja de tener sentido. Cuando salgamos de la charca nos podremos plantear qué hay MÁS ALLÁ del infinito, del tiempo y del espacio. Mientras, la pregunta no tiene sentido, porque no concebimos las respuestas y nuestra ignorancia de lo que haya más allá de los límites es total.
Hablas de la NADA, pero el concepto NADA es tan difícil como el de infinito. Empieza siendo sencillo. En una habitación hay dos hombres, se matan entre sí. Ya no queda NINGUNO. La HUMANIDAD que existía en esa habitación ha desaparecido, no queda nada. ¿Nada? Quedan los cadáveres. Billones de células de las que la inmensa mayoría van a colapsar en unas horas. Millones de seres microscópicos con capacidad para seguir viviendo. No queda humanidad pero queda vida de un nivel inferior.
Pasa el tiempo y también esas células van muriendo. Algunas se mineralizan. Termina por no quedar vida. Pero sigue quedando algo.
Podemos calcinar los restos, descomponerlos en moléculas, átomos, energía... nos sigue quedando algo.
Un hombre empieza siendo una célula. Pero tampoco esa célula ha partido de la nada. Ha partido de una situación en la que el hombre no existía... pero existían los gametos.
Dices que no hay nada que Dios no tenga. Y estoy de acuerdo... respecto a nosotros. De cualquier cosa que podamos concebir, Dios representa la perfección. Pero es que la Realidad es muchísimo más grande que nosotros. Seguro que la mayor parte de ella ni la podemos concebir.
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Una vez, viendo Los Simpson con mi hijo, le pregunté: ¿te parece que son felices?
La respuesta a sus doce años fue brillante y contundente: ni lo son ni dejan de serlo, son muñequitos.
Tenía razón. Eran muñequitos, no tenían auténticos sentimientos, ni conciencia. Eran dibujitos en la pantalla.
Dime ¿qué somos nosotros? ¿Tenemos auténtica Vida? ¿Somos realmente capaces de Amar? ¿Sabemos lo que es el Amor de Dios? ¿Podemos siquiera concebirlo?
Podremos. No somos muñequitos sino hijos de Dios, hechos a su imagen y semejanza y por tanto tenemos dentro de nosotros a Dios mismo. Eso es lo que nos hace valiosos y nos da la esperanza de despertar a la verdadera Vida. Pero aún así... somos tan pequeños.
¿Qué son los pensamientos de Dios? ¿Qué fuerza tienen? Un hombre piensa "esto es mío" y ya está cambiando la realidad. ¿Qué puede llegar a suceder cuando Dios "piensa"? Acaso la creación simultánea de lo pensado.
Que duermas bien.