Como vencer el mal?

Los diez mandamientos son resumen y proclaman la ley de Dios. Son un don de Dios a la humanidad, para que conozcamos su Santa Voluntad. La conciencia moral ordena a la persona, «en el momento oportuno, practicar el bien y evitar el mal. Juzga también las opciones concretas aprobando las que son buenas y denunciando las que son malas, es decir, la posibilidad de ver nuestros propios actos en relación con los planes de Dios. Estos foros son un espacio para discutir, aclarar, consultar y aprender a vivir de acuerdo con la voluntad de Dios, guiados por su gracia y para promover una buena formación de la conciencia

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Como vencer el mal?

Notapor juanjose40 » Mar Ene 19, 2016 11:29 am

Anteriormente comente que soy Catolico, aunque un tiempo no fui un practicante asiduo, es decir, iba a misa solamente en las fiestas, rezaba muy poco o casi nada, aunque llevaba una vida normal, es decir, tratando de hacerlo como Dios quiere de nosotros. En un momento algo me llamo (por decirlo de alguna forma) a volver a la Iglesia, entonces comencé a ir a Misa todos los domingos, rezar el Rosario a diario, leer la Biblia, y tratar, aunque sea un poco de hacer caridad, antes de hacer todo esto llevaba una vida tranquila sin tropiezos, un trabajo normal, salud, vida familiar unida etc, cuando rezaba agradecia a Dios todo lo que me daba y trataba de hacer cosas buenas de mi vida, pero al tiempo de llevar esta vida (que creía yo, humildemente tratando de agradar a Dios) comenzaron los problemas, problemas familiares de discusiones, problemas de salud, perdida de trabajo, etc, y sentía que cuanto mas rezaba peor me iba y mas dificultades tenia, llego un tiempo que me daba miedo rezar. Quisiera saber que puedo hacer, gracias.
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Re: Como vencer el mal?

Notapor eduarod » Mar Ene 19, 2016 5:37 pm

Estimado en Cristo juanjose40:

1. Antes que nada debes tratar de analizar si la correlación que estás estableciendo (rezar = problemas en tu vida) es justa o si tal vez algunos elementos son más bien coincidencias (p.ej. MUCHÍSIMA gente está perdiendo el trabajo en este tiempo dada la compleja situación económica mundial).
2. En segundo lugar, sería bueno considerar que el asunto podría ser al revés: no es que rezar te esté causando los problemas; sino que llamarte a una vida más cercana a Él puede haber sido un medio que Dios te dio sabiendo que venían tiempos difíciles en tu vida en los que ibas a necesitar mucha más ayuda para poder manejar las cosas apropiadamente.
3. Ahora bien, invitándote primero a revisar con seriedad y objetividad los dos puntos anteriores; por otra parte es verdad que hay ocasiones en que es casi evidente el esfuerzo que hace el demonio y el mundo por alejar a alguien que se comienza a acercar a Dios o que trata de fortalecer más su unión con Él. Respecto a eso, sería bueno que leyeras esta homilía del Papa Francisco:
http://w2.vatican.va/content/francesco/es/cotidie/2014/documents/papa-francesco_20140530_tristeza-alegria.html
4. E igualmente creo que sería recomendable para ti leer el libro de "Moradas del Castillo Interior" de Santa Teresa de Jesús, aquí te pongo el enlace: http://hjg.com.ar/teresa_moradas/

Que Dios te bendiga.
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Re: Como vencer el mal?

Notapor juanjose40 » Jue Ene 21, 2016 9:34 am

Analice el punto uno que mencionas y por parte del trabajo no eran tiempos difíciles en mis país para cuestiones laborales, aunque eso no quiere decir que el despido (que fue sin causa, es mas, lamentaban tener que hacerlo) marque esta tendencia que menciono de cosas malas, lo que me llama mucho la atención es la seguidilla de hechos, a lo del trabajo se le suman problemas de salud que no tienen que ver uno con otros, y los problemas familiares. Todo comenzó poco tiempo antes que yo volviera a la Iglesia, y cuando me pasaba algo lo tomaba como una prueba y rezaba mas y con mas esperanza, pero venían mas problemas.
Lo que me decis en el punto dos es lo que pensé también, a esto no se que decir.
Lo que mencionas en el punto tres sin duda es lo que me da vueltas en la cabeza, pero pienso porque el demonio se empecinaría asi con una persona común que no hace una gran diferencia en el mundo? pero en definitiva si es asi no tengo oportunidad sin el auxilio de Dios, el demonio es mas astuto y fuerte que yo, sin dudas me quebrantara con el tiempo, hace tres años que estoy en un espiral de "caída" y no se como pelear.
Lei la imilia que me traes del Papa Francisco, sin dudas entiende lo que habla, y siento sus palabras me reconfortan.
También me tomara el tiempo de leer el libro de Santa Teresa de Jesús.
Cualquier recomendación de tu parte es vienvenida
juanjose40
 
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Re: Como vencer el mal?

Notapor eduarod » Jue Ene 21, 2016 2:47 pm

Estimado en Cristo juanjose40:

De verdad no deseches el punto 2, porque aunque Dios Quiere nuestro bien y no determina las tragedias y cosas malas en nuestra vida, por lo general NO nos Ayuda a afrontarlas evitando que ocurran con Su Ominpotencia, sino Accompañándonos y Dándonos fuerza para afrontarlas.
A veces puede parecer misterioso el porqué Dios, Amándonos profundamente como Él nos Ama, y teniendo el Poder para hacerlo, no evita de raíz esos males que nos pueden aquejar. Existen razones teológicas que en un momento comentaremos; pero, mucho más convincente y profundo que un razonamiento teológico es el darnos cuenta de que si Él Mismo Se Entregó al suplicio en una Cruz para remediar nuestros problemas, en vez de simplemente remediarlos "por decreto"; entonces eso quiere decir que hay algo importante en dejar que las cosas ocurran según el orden natural del Universo al punto de que eso implicó que Él Mismo Estuviera Dispuesto a afrontar no solo con nosotros, sino incluso por nosotros y en lugar de nosotros, las peores consecuencias del mal. De heccho, Él ya afrontó por nosotros y en nuestro lugar la parte más difícil de las consecuencias de nuestro pecado. Por poner una comparación sencilla, es como cuando a un niño le compran una bolsa de palomitas (rosetas) de maíz y por un descuido las tira todas al piso; y entonces su mamá comienza a recogerlas todas, pero, para que se dé cuenta del traajo que implica hacerlo y aprenda a tener más cuidado, la mamá le pide al niño que las recoja con ella, sabiendo que el niño si acaso recogerá unas cuantas que a ella no le costaría mucho más trabajo recoger. Obviamente no es que la mamá realmente necesite la ayuda del niño, sino lo importante es que el niño haga parte del esfuerzo y entonces por un lado aprecie el esfuerzo mucho mayor que se ha hecho para ayudarle, y por otro lado aprenda a tener más cuidado en el futuro. Nuestros problemas a veces nos parecen verdaderamente agobiantes y, desde nuestra limitada naturaleza, muchas veces en verdad lo son para nosotros. Pero consideremos que al niño pequeño igual le parece agobiante recoger el pequeño puñado de palomitas que le toca recoger; y que el trabajo real que se ha hecho para remediar el mal ha sido mucho mayor. Consideremos entonces la Pasión de Cristo y démonos cuenta del trabajo real que ha costado nuestra Redención, NO SOLO en su aspecto físico y psicológico (los golpes, los insultos, los latigazos, las burlas, las espinas, etc.); sino, SOBRE TODO, en su aspecto espiritual: la incapacidad que conlleva el pecado de percibir el Amor de Dios, que lleva a un sentimiento de abandono total, por eso Cristo Dijo en la Cruz:
Hacia las tres de la tarde, Jesús exclamó en alta voz: «Elí, Elí, lemá sabactani», que significa: «Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?».
San Mateo 27, 46

Si nosotros nos llegasemos a sentir tan absolutamente desamparados, simplemente no nos podríamos recuperar nunca, porque no podemos amar por nosotros mismos, sino tan solo como respuesta al Amor de Dios.
Pero, justamente, a diferencia de Jesús, nosotros no nos sentiremos así en este mundo precisamente porque SIEMPRE tendremos el consuelo de que Jesús Está con nosotros y nos ha Amado hasta el punto de Entregarse a ese Suplicio por nosotros. Por eso podemos vivir en alegría y Esperanza pese a las dificultades, como lo expresa el Papa Francisco en la homilía que leiste.
Pero, regresando al punto, lo importante es darnos cuenta de que si el Padre NO Libró a Jesús de ese Suplicio a pesar de que Jesús se lo pidió, esto es precisamente porque NO ERA POSIBLE librarlo. Así lo decía Jesús Mismo en Su Oración:
Y adelantándose un poco, cayó con el rostro en tierra, orando así: «Padre mío, si es posible, que pase lejos de mí este cáliz, pero no se haga mi voluntad, sino la tuya».
San Mateo 26, 39

Jesús NO fue ignorado, sino ESCUCHADO, y San Pablo da testimonio de ello:
El dirigió durante su vida terreno súplicas y plegarias, con fuertes gritos y lágrimas, a aquel que podía salvarlo de la muerte, y fue escuchado por su humilde sumisión.
Hebreos 5, 7

Jesús FUE ESCUCHADO y NO ignorado, y, sin embargo, NO fue librado de la muerte. Pues continua San Pablo:
Y, aunque era Hijo de Dios, aprendió por medio de sus propios sufrimientos qué significa obedecer.
Hebereos 5, 8

Y evidentemente NO se refiere a que el Padre fuese un tirano que oprimiera al Hijo hasta lograr su sumisión y obediencia. Por el contrario, el propio San Pablo testifica que fue Su Humile Sumisión la causa por la que fue Esuchado. Y Cristo Mismo, en Su Propia Súplica que hemos citado del Evangelio de San Mateo, PIDE al Padre que sea librado de la muerte SOLO si esto es posible, pero que, de lo contrario, ACEPTA el Cáliz de la Pasión que el Padre le Está Pidiendo afrontar.
Y, obviamente, si NO FUE POSIBLE librarlo, esto NO ES porque el Padre no pudiera vencer a los enemigos de Cristo que lo estaban acusando y condenando; sino que NO fue posible POR NOSOTROS. Porque PARA NOSOTROS era importantísimo que Jesucristo Sufriera esa Pasión. Precisamente porque a causa de ello es que en nuestra vida nos podemos sentir acompañados por Él cada vez que sufrimos alguna forma de pesar o dificultad.

Habiendo entonces contamplado en la Pasión del Señor que hay algo importantísimo por lo cual el Padre ha Considerado que es mucho mejor Enviar a Su Propio Hijo Eterno y Unigénito a Padecer por nosotros, en vez de simplemente "Redimirnos "por decreto", podemos entonces pasar a considerar un poco más en detalle las razones teológicas y entender en ello el porqué nosotros no podemos ser tampoco librados del todo de los males que nos aquejan.
El punto fundamental es ese del aprendizaje: nosotros estamos en este mundo para APRENDER a Amar, lo que, entre otras cosas, implica usar LIBREMENTE nuestra voluntad para elegir CONSISTENTEMENTE en favor del Bien. Simplemente NO SE PUEDE amar "por obligación". Eso NO ES amar, es ser un autómata bien portado. Amar implica entonces necesariamente comportarse bien PORQUE UNO QUIERE y NO porque algo o alguien lo obligue a uno de cualquier manera.
Y si uno tiene que aprender a NO ELEGIR MAL, a NO usar su libertad para algo divertido, cómodo, conveniente o que produzca cualquier beneficio a uno mismo, pero a costa de causar problemas o dañar a otros; entonces la manera de lograr eso NO ES resolviendo en automático los problemas que uno pueda causar al comportarse mal, es decir, al elegir de manera equivocada.
Si te fijas, en realidad se vuelve a parecer al ejemplo de las palomitas. Pues si la mamá recoge todas siempre, el niño JAMÁS aprenderá a tener cuidado, pues "sabe" que la mamá SIEMPRE resolverá el problema, por lo que resulta indistinto si él tiene cuidado o no. Y, en su egoismo, el niño bien puede pensar que si su mamá siempre resuelve el problema, en realidad es porque a ella no le cuesta mucho trabajo hacerlo. El problema principal de ello no es que siempre habrá palomitas regadas en el piso, la mamá se podría conseguir una buena aspiradora y en verdad resolverlo consistentemente de manera razonablemente sencilla. No se hable de lo que podría hacer Dios con su Omnipotencia para resolver todas nuestras tonterías. Pero no, insisto, el problema real NO está realmente ahí. Sino el problema real está en el niño, ESTÁ EN NOSOTROS: por ese camino el niño (o nosotros, para el caso) JAMÁS aprenderá a preocuparse por los demás; sino se converitrá en un ser egoista insaciable que tan solo querrá llamar la atención, ser atendido y tratar de vivir cuanto placer o comodidad le aparezca en su camino. Y subrayo una vez más que lo grave de eso no necesariamente es el daño que pueda estar continuamente causando una persona así, pues la aspiradora puede recoger las palomitas y Dios Tiene Poder de sobra para corregir cuanta tontería nosotros pudieramos hacer o inventar. Sino el verdadero problema está en la propia persona, en que eso la encierra en el aislamiento del propio egoismo y le imposibilita del todo vivir la FELICIDAD de AMAR.

Por el contrario, en un mundo en el que se permite que el mal PRODUZCA sus CONSECUENCIAS naturales, pues en ese mundo es muchísimo más fácil que la persona perciba el daño que su egoismo le causa a otros y a si misma. Pero, para que eso suceda, el "juego" tiene que "ser real". Es decir, los actos de los hombres, salvo si acaso excepciones contadas, DEBEN producir sus consecuencias (incluyendo daños y sufrimientos) naturales. Las leyes del Universo, salvo si acaso excepciones contadas, DEBEN producir sus consecuencias (incluyendo daños y sufrimientos) naturales. Solo así el hombre puede lograr apreciar la necesidad de ELEGIR bien, tanto al decidir sobre sus propias acciones, como al administrar las cosas que le han sido encomendadas (la naturaleza). Y entonces, ahí si, el homre PUEDE aprender "qué significa obedecer". Es decir, el homre puede aprender que sus BUENAS ELECCIONES producen consecuencias buenas y que, por lo mismo, vale la pena hacer el ESFUERZO de ELEGIR BIEN.
Desde luego que esto va mucho más allá de la famosa "ley del Karma", pues necesariamente nos introduce en el problema del sufrimiento del inocente: NO SOLO se trata de que si YO elijo mal, entonces YO voy a tener problemas. Sino que, si "el juego es real", si las leyes del Universo siguen su curso natural, entonces MIS actos y omisiones pueden producir sufirmiento en OTROS y los actos y omisiones de otros PUEDEN producir SUFRIMIENTO EN MI. De modo que ahí el mal y el pecado revelan toda la fuerza de su poder maligno: pueden hacer que sufra incluso aquel que HA ELEGIDO BIEN.
Y, por supuesto, el ejemplo por excelencia del Sufrimiento del Inocente es la propia Pasión de Cristo. Donde el que NO cometió pecado alguno, tuvo que pagar por los pecados DE TODOS.
Pero precisamente en la propia Pasión de Cristo se Revela la Grandeza de la Respuesta de Dios a esta madre de todas las injusticias: el Poder Salvífico del Sufrimiento. El inocente que sufre a causa del mal efectuado por otros no necesariamente lo tiene que hacer de manera resignada, estéril e inútil; sino que, en unión con Cristo, lo puede hacer POR AMOR, lo puede hacer para contribuir en la Redención de los otros. Pensemos un segundo, por ejemplo, en los sufrimientos de la Beata (y, Dios mediante, proximamente santa) Teresa de Calcuta. ¿No nos reconforta saber que en nuestro mundo moderno hubo quien se tomó muy en serio el mensaje de Cristo y entegó su vida a remediar el sufrimiento de muchos otros aceptando para ello sufrir ella también? Nos hace sentir que el Mensaje de Cristo no es un mero ideal abstracto apropiado quizá para su tiempo, pero impracticable ante la complejidad de la vida moderna, ni que es un ideal que es posible vivir tan solo al Hijo de Dios, pero que es completamente inalcanzable a los simples mortales como nosotros. Nos hace sentir que Cristo nos puede acompañar por medio de personas como ella aquí y ahora, nos hace sentir menos solos en nuestras dificultades propias de la vida moderna. Y así, junto con Cristo, el sufrimiento de la Madre Teresa se ha convertido de algún modo en fuente de redención para nosotros.
Y, si nosotros nos beneficiamos así de ello, por supuesto que ella también, porque si decimos que el Amor es solo accesible a aquellos que eligen bien por voluntad propia. Y si decimos que ese Amor es la ÚNICA fuente de la AUTÉNTICA FELICIDAD humana. Pues es evidente entonces que, a través de esas elecciones buenas en medio y a pesar del sufrimiento que injustamente se padece por no haber sido causado por uno mismo, la perfección en ese aprendizaje del amor y, por consecuencia, la felicidad auténtica que de ello se derive, serán MUCHO MAYORES para la persona que así se una a la Pasión del Señor. Por eso es que San Pablo también nos dice:
Por eso soporto estas pruebas por amor a los elegidos, a fin de que ellos también alcancen la salvación que está en Cristo Jesús y participen de la gloria eterna.
Esta doctrina es digna de fe:
Si hemos muerto con él, viviremos con él.
Si somos constantes, reinaremos con él.
II Timoteo 2, 10-12

La unión con Cristo que alcanza aquel que aprende a sufrir con Él NO se limita ni se agota en ese sufrimiento, sino se extiende también a la UNIÓN CON ÉL en Su Gloria y Felicidad ETERNAS.

Y bueno, ya para terminar entonces sobre este punto, recuerda entonces que, si bien Dios NO causó los males que has tenido que afrontar, en Su Atemporalidad y Ominsapiencia, Él SABÍA lo que vendría en tu vida. Y que, estando cerca de Él, tendrías acceso a las verdaderas explicaciones de todos estos misterios, pudiendo entonces darles ese sentido salvífico que puede convertirse en fuente de felicidad y alegría para ti y para muchos otros; en vez de simplemente tener que sufrir esos males y contrariedades sin explicación, y entonces tan solo en una forzada resignación que no podría sino fomentar en tu interior el rencor, el egoismo y el aisalmiento.

Que Dios te bendiga.
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Re: Como vencer el mal?

Notapor juanjose40 » Jue Ene 21, 2016 3:39 pm

Gracias por tan clara respuesta, me ha hecho meditar y entender muchas cosas con otra perspectiva, seguramente a muchos otros que lean esta líneas le servirán como a mi, te doy las gracias por el tiempo que invertiste en ayudarme.
Como lo planteas el punto dos tiene mucho sentido, y se clarifican también las palabras del Papa Francisco que me compartis.
juanjose40
 
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