Hola buenas tardes, soy nueva en el foro, tengo 27 años, llevo 5 años viviendo fuera de mi país y me gustaría hacer una consulta que lleva tiempo en mi mente.
Desde que era pequeña, con 4 o 5 años hasta que cumplí 22, mis padres siempre me prometieron que nos pagarían todos los estudios, tanto a mí como a mis otras dos hermanas pequeñas. Yo siempre he sido buena estudiante y siempre dí por hecho que no tendría que trabajar para poder estudiar en la universidad, después de todo nuestros padres siempre nos dijeron que podríamos estudiar lo que quisiésemos, y siempre se dieron palmadas en la espalda orgullosos de ellos mismos por ser tan buenos padres.
Con 14 años años descubrí mi vocación y posteriormente se lo comenté a mis padres, es una carrera larga y cara pero siempre dijeron que no me preocupara por el aspecto económico, ellos se harían cargo de los gastos. Es una carrera muy específica y competitiva donde es difícil encontrar trabajo al principio, por eso decidí cuando tenía 17 años estudiar previamente otra carrera corta, de 3 años y en la universidad pública, para mejorar mi currículum, tener un plan alternativo, y posteriormente, empezar a estudiar mi carrera vocacional. Mis padres estuvieron de acuerdo, pensaron que era una opción sensata y me recordaron que no me preocupara por el coste, ellos ganaban mucho dinero, vivíamos en un gran chalet, varios coches... Pagar mi segunda carrera, la más cara, les supondría el sueldo de menos de 6 meses.
Cuando terminé la primera carrera en la universidad pública con 21 años y tenía que empezar a estudiar mi carrera vocacional (sólo puede ser estudiada de manera privada), la crisis económica española hizo que mis padres perdieran su trabajo y por tanto el gran sueldo que tenían. Poco después encontraron otro trabajo y ahora siguen ganando mucho dinero. De repente ya no podían pagarme la carrera, y por ello me ví forzada a emigrar al extranjero, trabajar muy duro para poder pagarme la carrera yo misma.
Llevo 5 años siendo emigrante en otro país, trabajando duro y estudiando al mismo tiempo, sacándome la carrera poco a poco pero con muy buenas notas. Por una lado me hace tremendamente feliz lo que estoy haciendo, fue muy duro irme a a vivir a otro país, aprender otro idioma, la nostalgia, echar de menos a mis hermanas, mi vida allí, pero ha sido una experiencia tremendamente enriquecedora que convirtió la vida cómoda y algo infeliz que tenia en casa de mis padres, en una vida de aventura, enorme esfuerzo, superación, fe y significado.
Que mis padres decidieran no pagarme la carrera ha significado en cierto modo una bendición porque soy mucho más feliz viviendo de forma independiente mi propia vida, habiendo aprendido el verdadero valor del esfuerzo y la belleza existente a nuestro alrededor. Todo gracias a haber emigrado y empezar a construir mi propia vida, aún así todavía me faltan un par de años para acabar la carrera porque tener que trabajar ralentiza mucho los exámenes y formación.
Por otro lado, en ocasiones siento resentimiento hacia mis padres. Desde muy pequeña me inculcaron que nos pagarían todos los estudios, pero cuando llegó el momento encontraron una razón para no hacerlo. Mi carrera les costaba su sueldo de 6 meses y siempre lo habían prometido y jurado, pero mientras ganaban mucho dinero prefirieron utilizarlo en comprar una casa demasiado grande, viajes, ropa, inversiones...mi madre siempre ha sido avariciosa para el dinero y le encantaba presumir.
Actualmente viven en una casa más modesta alquilada y mi madre sufre ataques de pánico en ocasiones, han visto que no podían seguir viviendo una vida de malgastar dinero donde presumir de casa y riqueza parecía ser lo más importante . A veces pienso que están causados por sus discusiones con mis abuelos por culpa del dinero o la envidia, y porque creo que sabe muy bien que me traicionó cuando era el momento.
El resultado es una hija expatriada en otro país a la que echan mucho de menos y que no saben si volverá algún día, aún así vuelvo a casa cada 2 o 3 meses de visita y son ellos quienes voluntariamente pagan los billetes de avión. Siento que moralmente me traicionaron por no cumplir con lo que nos prometieron desde que éramos pequeñas.
Agradeceré cualquier reflexión
Un saludo