Estimado en Cristo Fausto1880:
Fausto1880 escribió:...
Cuando Dios ve que matan a un hombre no sólo ve el asesinato de un hijo, ve la muerte de todos sus descendientes que ya no verán la luz del día. Es un dolor que nosotros no podemos concebir, afortunadamente ya que no podríamos resistirlo.
...
¿Lo ves?
Esa es la consecuencia práctica de entender la Omnisciencia de Dios como si se tratara de un observador más o menos pasivo, aunque capaz de intervenir, que conociera meramente los futuros posibles. Que dentro de esos "futuros posibles" estarían estos "posibles" descendientes de los que hablas.
Pero el recto sentido de la Predestinación antecedente es que TODOS los que hemos sido llamados a la vida lo hemos sido precisamente porque fuimos nosotros, y no otros, los
ELEGIDOS para existir. Y que esto Dios lo decidió, desde nuestra perspectiva temporal, desde ANTES de la Creación del Mundo (o sea, mucho antes que cualquiera hubiera tenido oportunidad de existir para tener descendientes o de actuar para quitar a otro la vida).
Nos enseña el Concilio Vaticano II en la Constitución Dogmática Lumen Gentium:
El Padre Eterno, por una disposición libérrima y arcana de su sabiduría y bondad, creó todo el universo, decretó elevar a los hombres a participar de la vida divina, y como ellos hubieran pecado en Adán, no los abandonó, antes bien les dispensó siempre los auxilios para la salvación, en atención a Cristo Redentor, «que es la imagen de Dios invisible, primogénito de toda criatura» (Col 1,15). A todos los elegidos, el Padre, antes de todos los siglos, «los conoció de antemano y los predestinó a ser conformes con la imagen de su Hijo, para que éste sea el primogénito entre muchos hermanos» (Rm 8,29). Y estableció convocar a quienes creen en Cristo en la santa Iglesia, que ya fue prefigurada desde el origen del mundo, preparada admirablemente en la historia del pueblo de Israel y en la Antigua Alianza [1], constituida en los tiempos definitivos, manifestada por la efusión del Espíritu y que se consumará gloriosamente al final de los tiempos. Entonces, como se lee en los Santos Padres, todos los justos desde Adán, «desde el justo Abel hasta el último elegido» [2], serán congregados en una Iglesia universal en la casa del Padre.
CONSTITUCIÓN DOGMÁTICA SOBRE LA IGLESIA*
LUMEN GENTIUM
Concilio Vaticano II
Una cosa es que Dios pueda conocer esos "qué hubiera pasado si..." y otra cosa es que Dios pueda ser de algún modo determinado por ello.
Y digo "determinado por ello" porque si Dios "lamentara" la no-existencia de seres que ni siquiera tendrían la posibilidad de existir en la realidad, esto querría decir que Él los habría elegido si hubiesen podido existir. Pero entonces la Elección de Dios ya no habría sido libérrima, sino condicionada.
Y es que es útil recordar en este sentido que Dios es el Único Dueño y Señor de la vida, sólo Él la da, y sólo el puede quitarla o permitir que sea quitada. Recordemos la Enseñanza del Santo Evangelio:
¿Acaso no se vende un par de pájaros por unas monedas? Sin embargo, ni uno solo de ellos cae en tierra, sin el consentimiento del Padre que está en el cielo.
Ustedes tienen contados todos sus cabellos.
No teman entonces, porque valen más que muchos pájaros.
San Mateo 10, 29-31
Si se requiere el consentimiento del Padre para que caiga en tierra un pájaro que se vende en pares por unas monedas, con cuanta mayor razón se requiere el consentimiento del Padre para que un hombre pueda morir, lo expresa Cristo diciendo "tienen contados todos sus cabellos".
De ahí que, si Dios quisiera elegir para la existencia la "posible descendencia" de un ser humano. Entonces, en su Libérrima Elección, Dios de entrada NO permitiría que la vida le fuese quitada a esa persona de tal suerte que esos que Él habría Elegido para la existencia pudieran entonces existir.
Pero si Dios permite la muerte de esa persona, eso es tan solo porque su misión en este mundo está cumplida, notoriamente en lo que se refiere a la existencia de la descendencia Elegida por Dios para existir.
Si Dios estuviese condicionado por la naturaleza o por el comportamiento y las libres elecciones de sus creaturas, tendría muchísimo más que lamentar: por ejemplo, incluso en cada concepción exitosa habría que lamentar los literalmente millones de personas alternas que podrían haber existido en esa misma ocasión, y que no existieron porque las células que les habrían dado origen biológico no lograron llegar antes que la célula que logró llegar primero. ¿Sería meramente que si hubiese llegado otra célula habría existido la misma persona, pero con otras características? ¡No! Porque no habría sido realmente la misma persona, ya que la persona humana NO ES un ser puramente espiritual, sino es la unión íntima del alma espiritual y el cuerpo material, de ahí que, historias fantásticas aparte, NO se pueda hablar en la realidad de "la misma persona pero con otro cuerpo". Para visualizarlo claramente, pensemos simplemente qué ocurriría si la céula que fecundó contuviera cromosomas XY, pero la siguiente que podría llegar si esa no llegase tuviera XX. Estaríamos hablando de un hombre o de una mujer, y el espíritu creado por Dios para un hombre NO ES una entidad asexuada, es el espíritu de un hombre; lo mismo el de una mujer. Ahí es más que evidente que NO ES IRRELEVANTE esta célula o aquella, y que, dependiendo de esta célula o de aquella, se concibe una persona "posible" u otra. En la realidad, se concibe aquella que Dios Eligió en Cristo para la existencia desde antes de la Creación del mundo.
Que Dios te bendiga.