Saludos. Veamos, no quiero juzgar tampoco a tus abuelos sin conocer las circunstancias de los hechos. Ten en cuenta que aunque no lo veas así, ellos tampoco querían hacerte ningún mal, al contrario, buscarían de corazón tu bien, aunque te parezca que su actitud no fue la correcta (y tal vez no lo fue completamente, pues ellos pretendían transmitirte unos valores que no llegaron a ti).
Con respecto a el tema de la formación y el aspecto intelectual. Respeto a aquellos que se manifiestan como ateos, aunque debo decir que muchas veces la formación del ateo tiene carencias. Yo sinceramente te animaría a profundizar en pensadores que no sean solo ateos, y no me refiero solo a San Agustín o Sto. Tomás. No consideres la filosofía y la razón como algo opuesto a la religión, pues no es así. Nietzsche puede resultar apasionante, pero su pensamiento contiene también errores y su visión del cristianismo es muy superficial y no penetra verdaderamente en las raíces y bases del pensamiento cristiano. Sus sentencias son muy controvertidas, pero normalmente son fáciles de desmontar. Hay filósofos muy interesantes y que desarrollan su pensamiento en consonancia con la fe cristiana: Maritain, Julián Marías, el P. Gratry... Son filósofos contemporáneos con inquietudes cristianas. Es fundamental una formación honesta en los planos intelectuales de la realidad, y no dejarse llevar por las modas intelectuales del momento. Si se quiere una perspectiva real del pensamiento también habrá que formarse en grandes de la filosofía como Platón o Aristóteles, Sto. Tomás, y también habrá que tener nociones del pensamiento de los filósofos no creyentes, pero todo esto desde una perspectiva de honestidad intelectual, no mirando solo las opiniones contrarias a la Iglesia y al pensamiento cristiano.
En el ámbito católico, la Iglesia ha definido que el hombre es capaz de descubrir a Dios mediante la razón y el entendimiento. Razón y fe no son incompatibles, más bien todo lo contrario. El Concilio Vaticano I afirma que Dios es cognoscible en su existencia por medio de la razón:
La misma Santa Madre Iglesia sostiene y enseña que Dios, principio y fin de todas las cosas, puede ser conocido con certeza a partir de las cosas creadas con la luz natural de la razón humana: «porque lo invisible de Dios, desde la creación del mundo, se deja ver a la inteligencia a través de lo creado»
El tema de la demostración racional de la existencia de Dios es apasionante, y argumentos tan antiguos como el argumento ontológico de San Anselmo o las cinco vías tomistas siguen siendo tema de debate. La metafísica no está abandonada, y el positivismo y el kantismo también cuentan con refutaciones que permiten seguir profundizando en la ontología y en la teología natural, que son cosas que nunca pasan de moda. Te animo a profundizar con espíritu abierto en el pensamiento cristiano, profundamente amplio y de profundidad absolutamente genial. Manteniendo el debate con cristianos formados en filosofía podrás ver que la creencia en Dios no es algo irracional. Te felicito también por tu interés por las cuestiones intelectuales. Es algo que no se destila demasiado en este mundo.
Un abrazo en Cristo.