Aquí el enlace donde escuché lo del noviazgo católico, hay además otros audios de interés
http://www.aciprensa.com/podcast/archiv ... 1&pod_id=4
Luego para seguir comentando otra parte del libro de La Casa sobre Roca
Estoy leyendo un libro que se llama "Mujeres que aman demasiado" y ha instalado el tema de las mujeres sedientas de amor que no saben esperar un hombre y que salen a conquistar uno, al que quieren convertir en enamorado a toda costa, aún cuando él no lo es ni jamás llegará a serlo. En realidad, no son mujeres que aman demasiado, sino mujeres que desean demasiado ser amadas. Ellas se meten en la máquina de picar carne de su propio deseo de merecer el amor del que no la ama. Se autoconvencen de que lo conquistarán a fuerza de complacerlo. Y ¡oh inconsecuencia! si aparece en el horizonte uno no esperado, llega como por el ángulo del ojo, les cuesta verlo, y aunque realmente viene atado de pies y manos, no saben qué hacer con él. No sienten hacia él nada de lo que están sintiendo hacia la presa que tienen en la mira: "no siento nada por él dicen", cuando en realidad deberían caer en la cuenta de que "no sienten lo mismo que por sus presas". Y dejan pasar al que las ama, porque no saben recibir el amor, sino que están empeñadas en conquistarlo.
Creo que la liberación del corazón femenino para encontrarse, con aquél que el Padre les destina - o mejor dicho, para darse por encontradas y descubiertas por él -, está en renunciar a ‘cazar’ uno, e incluso en el aceptar la posibilidad de que la voluntad del Padre no sea para ella el que se case y sea madre. En esa renuncia del propio querer en las manos del Padre, está la libertad, la sanación, la regeneración que la hace hija, obediente, renunciante a su propio querer para que “se haga en mí según tu palabra”. De la obediencia filial que acepta la muerte saca el Padre para realizar sus designios con su hija.
"Renunciar a cazar al varón"
P.D. Gracias corazón de águila por tu comentario