por Sergio Forero » Mié Ene 04, 2012 7:39 pm
Les comparto un canto a la Virgen de la Soledad, el cual se canta el Viernes Santo en el pésame a nuestra Señora de la Soledad. En Durango, Mexico.
Ayudemos, almas,
en tanto penar
a la Virgen pura
de la Soledad.
Al pie de la cruz
la vemos que está
la madre sin hijo,
porque ha muerto ya.
Se aumenta su pena
de ver a Jesús,
que no hay quien lo baje
de la santa Cruz.
Crece su dolor,
pues no hay un sudario
para recibir
el cuerpo sagrado.
Tres necesidades
tiene esta Señora,
pero Dios envía
quien se las socorra.
José y Nicodemos
de Arimatea
bajan a Jesús
y a María lo entregan.
En sus dulces brazos
tierna lo entreabraza,
con amargo llanto
sus llagas besaba.
“¡Ay, hijo de mi alma!,
decía adolorida,
cómo está tu cuerpo
todo echo una herida.
“Por culpas ajenas
estás de esta suerte,
por librar al hombre
de la eterna muerte”.
Sepulcro a Jesús
vieron5 a la madre,
de pena y dolor
el pecho se le abre.
Con san Juan se va,
porque es el amado
a quien Jesucristo
le había encomendado.
Triste y afligida
entra a la ciudad,
llena de dolor,
llena de pesar.
Allí vio la calle
donde lo prendieron,
en donde de muerte
sentencia le dieron.
Entra en la ciudad,
se desata en llanto,
no hay quien la consuele
en tanto quebranto.
“¿Dónde está mi amado?,
decía adolorida,
¿dónde está mi bien?,
¿dónde está mi vida?”
Herido tu pecho
con siete puñales,
tus ojos, Señora,
en llanto desares.
Salve, dolorosa
y afligida Madre,
salve tus dolores
a todos nos salve.
Tanta es tu pobreza:
¡que no haya un sepulcro
para sepultar
su cuerpo difunto!
En sábanas blancas
envolvió su cuerpo
para sepultarlo
en sepulcro abierto.
Hombre, fuiste causa
de esta soledad,
llora tu pecado,
llora tu maldad.
Adiós, Madre mía,
adiós, mi consuelo,
adiós, mi esperanza
adiós, mi remedio.
Salve, dolorosa,
afligida Madre,
salven tus dolores
y a todos nos salven.