por mamafeliz » Jue Oct 03, 2013 8:20 am
La afirmación de Cristo en el sermón de la montana: "Habéis oído que fue dicho: No adulterarás. Pero yo os digo que todo el que mira a una mujer deseándola, ya adulteró con Ella en su corazón", tiene un significado clave para la teología del cuerpo, igual que aquel en el que Cristo hizo referencia al "principio".
Jesucristo realiza una revisión fundamental del modo de comprender y cumplir la ley Moral de la antigual alianza. Esto se refiere al quinto mandamiento "no matarás", al sexto "no adulteraras", el "libelo de repudio" y el octavo mandamiento "no perjurarás, antes cumpliras al senor tus juramentos". Ademas del mandamiento "no adulterarás", el Decalogo dice tambien "No desearás la mujer del prójimo". En la enunciación del sermón de la montana, Cristo une, en cierto sentido, el uno con el otro: "El que mira a una mujer deseandola, ya adulteró con Ella en su corazón." Asi Jesucristo se refiere no solo al acto del cuerpo sino el acto del hombre interior.
Y Jesus dice: No penseis que he venido a abrogar la ley o los profetas: No he venido a abrogarla, sino a consumarla. También dice " El que...predicare y ensenare (estos mandamientos), este será tenido por grande en el reino de los cielos".