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¿Explica la lesión que resulta de la concupiscencia a la intersubjetividad para el significado esponsal del cuerpo entre el hombre y la mujer?.
¿Qué entendemos por esponsal? Es la capacidad de expresar la donación al otro. Esto en un primer momento no significa conyugalidad. En el Génesis el significado esponsalicio del cuerpo es en un primer momento ante todo virginal, es decir, el cuerpo manifiesta externamente la apertura al otro y esto no está necesariamente vinculado a la unión «en una sola carne». Se descubre la inocencia originaria que tenían varón y mujer en el paraíso. En aquel estado el cuerpo del otro no era para cada uno «objeto» sino expresión de su persona.

Con la concupiscencia se puede observar que el hombre y la mujer se poseen el uno al otro, se pierde esa libertad de amarse, además puede disponer de la mujer como un objeto, se pierde esa relación hombre-mujer que se ha adquirido de manera originaria, y se pierde el carácter esponsal del cuerpo por cuanto se restringen las libertades.

¿Explica con tus palabras los términos mío y mía antes y después de la entrada de la concupiscencia en la persona humana?.

"Mio, Mia" antes: Una donación reciproca, se entregaba el uno al otro, el amor era fundamental en la relación, había paz, libertad felicidad, todo era bello.
Después: goce y disfrute cuando lo deseen, se ve como un objeto, se poseen, existe una apropiación, se deja de un lado el amor.





DIOS LES BENDIGA!!!

Cuando Dios creo al hombre y le dio ala mujer como su compañera,el hombre por ese amor donado por Dios, recibe a la mujer
como su compañera; dando así el vinculo esponsalicio.
de hay ellos se deben el uno para el otro,en una sola carne."respeto y temor de Dios La moral."

La lesión que resulta de la concupiscencia a la intersubjetividad para el significado esponsal del cuerpo entre el hombre y la mujer, se ve en Gn 3, 16 "Buscarás con ardor a tu marido, que te dominará", de ser antes de la concupiscencia una relación en el amor, de don recíproco, cambia a una relación de apropiación mutua. Antes era una relación de comunión, de una sola carne y desaparaece esta comunión.
Mío y mía antes de la concupiscencia, es el lenguaje de amor humano, de comunión, existe equilibrio, se indentifican en su masulinidad y feminidad; después el significado cambia por una deformación en la relación después de la concupiscencia, ahora se ven como objetos, que pueden utilizarse mutuamente, se ven como algo que gozar, el ser mio o mía, es de pertenencia, apropiación, niegan el sentido nupcial del cuerpo, de ser una sola carne, porque existe egoísmo, hay daño en el espíritu, constantemente el corazón es amenazado, y por lo mismo no pueden ver toda la dimensión de amarse, valorarse, sino que se ven con el deseo, que lastima la masculinidad y feminidad.

Explica la lesión que resulta de la concupiscencia a la intersubjetividad para el significado esponsal del cuerpo entre el hombre y la mujer. Explica con tus palabras los términos mío y mía antes y después de la entrada de la concupiscencia en la persona humana.

Esta lesión resulta de la afirmación dada en el génesis 3, 16 "Buscarás con ardor a tu marido, que te dominará", ya que se pasa de una relación y de una comunión en la que hay una donación recíproca a una relación basada en la concupiscencia y la apropiación mutua en la que prevalecen el aspecto carnal y sexual de este tipo de relación.

Los términos mío y mía están relacionados directamente con el acto de la concupiscencia, ya que antes de la misma, hacían referencia al amor mismo y su expresión en lenguaje humano encontrándose allí un equilibrio en el don de sí mismos y en el que se identificaban plenamente los aspectos femeninos y masculinos. Sin embargo estos conceptos cambian luego de la concupiscencia, y ahora tanto el hombre como la mujer se ven a sí mismo y a su compañero, como simples objetos que se pueden poseer o utilizarse con el único fin del goce y el placer.

R: La lesión a la intersubjetividad en el significado esponsal que tenían hombre y mujer antes de la caída, es la correspondiente a la inocencia originaria, ya que ellos se veían uno al otro sin concupiscencia. La triple concupiscencia y, en especial, la de la carne, quita a la recíproca pertenencia del hombre y de la mujer la dimensión que es propia de la analogía personal, en la que los términos “mío... mía” conservan su significado esencial, el cual está fuera de la “ley de la propiedad” y del significado del “objeto de posesión”.

De la posesión se pasa al “goce”: el objeto adquiere para el hombre un cierto significado en cuanto que dispone y se sirve de él, lo usa. La analogía personal de la pertenencia se contrapone decididamente a ese significado. Y esta oposición es un signo de que lo que en la relación recíproca del hombre y de la mujer “viene del Padre” conserva su persistencia y continuidad en contraste con lo que viene “del mundo”.

La concupiscencia hace que el cuerpo se convierta algo así como en “terreno” de apropiación de la otra persona. Como es fácil comprender, esto lleva consigo la pérdida del significado nupcial del cuerpo. Y junto con esto adquiere otro significado también la recíproca “pertenencia” de las personas, que uniéndose hasta ser “una sola carne”, son a la vez llamadas a pertenecer una a la otra. la concupiscencia muestra sobre todo el estado del espíritu humano. También la concupiscencia de la carne atestigua en primer lugar el estado del espíritu humano.

Con la aparición de la concupiscencia se lesiona el significado esponsal del cuerpo entre el hombre y la mujer para el cual fueron creados. Con el pecado original cambia la visión de entrega total y donación mutua a una de recíproca apropiación. Ya no esxistirá esa entrega del don o comunión que lleva a la plenitud. La relación se transforma; hay un desequilibrio. Con la concupiscencia, el cuerpo del otro se convierte en un "objeto de propiedad": dispongo de él, me sirvo de él, lo uso. Implica el deseo, el uso y el goce de ese "objeto". De un goce, entrega y disfrute mutuo del cuerpo, pasa a ser un goce egoista. Le dará el sentido de que dispondrá uno del otro más como respuesta al "deseo del cuerpo" antes que al "deseo de la mente".

Mío y mía, antes del pecado original, se refería al sentido de que ambos se complementaban, se unían en un sólo cuerpo y se volvían una sóla carne. Representaba ese ser especial que te llevaba a lograr la plenitud. Luego del pecadao original, con la aparición de la concupiscencia, mío y mía se transforman tomando un sentido de propiedad, de ser un objeto. Y como objeto, puedo desear tenerlo, usarlo, y cuando esté satisfecho, prescindir de él. El cuerpo pierde de esta manera su significado nupcial.

Explica la lesión que resulta de la concupiscencia a la intersubjetividad para el significado esponsal del cuerpo entre el hombre y la mujer.
El modo en que la relación de don recíproco, que existía entre ellos en el estado original de inocencia, se cambió, tras el pecado original, en una relación de recíproca apropiación.

Explica con tus palabras los términos mío y mía antes y después de la entrada de la concupiscencia en la persona humana.
El significado de los términos “mío y mía” antes de la entrada de la concupiscencia:
• Reciprocidad de la donación.
• Expresan el equilibrio del don, es decir, ese equilibrio del don en que se instaura la recíproca communio personarum.
• Se conserva en ella también él significado nupcial del cuerpo.
• Radical negación de pertenencia en el sentido en que un objeto-cosa material pertenece al sujeto-persona.
El significado de los términos “mío y mía” después de la entrada de la concupiscencia, en especial la concupiscencia de carne es:
• Empuja al hombre hacia la posesión del otro como objeto.
• Lo empuja hacia el "goce".
• Negación del significado nupcial del cuerpo.
• El don desinteresado queda excluido del "goce" egoísta.

Explica la lesión que resulta de la concupiscencia a la intersubjetividad para el significado esponsal del cuerpo entre el hombre y la mujer. Explica con tus palabras los términos mío y mía antes y después de la entrada de la concupiscencia en la persona humana.

La lesión resultante de la concupiscencia es que ya no se busca la unión de los cuerpos como la entrega de sí mismo al otro, sino que se busca al otro para satisfacerse uno mismo, busca el goce en vez del amor.
En vez de ser una persona CON el otro, pasa a ser una persona PARA el otro. Se hacen objeto uno del otro.

Los términos mío y mía antes de la concupiscencia expresan una equilibrada donación, una entrega total de uno hacia el otro.

Mío y mía después de la concupiscencia expresan el apropiamiento del otro como un objeto para mí y viceversa.

Saludos

Mónica Guzmán D.

En la concupiscencia el hombre se relaciona con la mujer hasta el punto de considerarla sólo como un obeto y no como don y viceversa.
En la apropiación unilateral (que indirectamente es bilateral) desaparece la estructura de la comunión entre las personas; ambos seres humanos se hacen casi incapaces de alcanzar la medida interior del corazón, orientada hacia la libertad del don y al significado nupcial del cuerpo.
Los terminos mio y mia antes de la concpiscencia significan la reciprocidad de la donación, expresan el equilibrio del don y la comunión reciproca y asi se conserva el significado nupcial del cuerpo.
Los terminos mio y mia después de la concupiscencia sinifican pertenencia. El hombre y la mujer son objetos el uno para el otro. Y del poseer se va al gozar, disponer, servirse del objeto y usarlo.

Pregunta:
Explica la lesión que resulta de la concupiscencia a la intersubjetividad para el significado esponsal del cuerpo entre el hombre y la mujer.
La concupiscencia empuja al hombre hacia la posesión del otro como objeto, lo empuja hacia el “goce”, que lleva consigo la negación del significado nupcial del cuerpo. La concupiscencia de la carne impide la recíproca pertenencia del hombre y de la mujer, desaparece la estructura de la comunión entre las personas; hombre y mujer se hacen casi incapaces de alcanzar la medida interior del corazón, orientada hacia la libertad del don y al significado nupcial del cuerpo, que le es propio.

Explica con tus palabras los términos mío y mía antes y después de la entrada de la concupiscencia en la persona humana.
Antes: reciprocidad de las personas, donación, comunión.
Después: propiedad, posesión, objeto, uso, goce.


Saludos a todos y que DIOS nos ayude a permanecer en el curso.

Explica la lesión que resulta de la concupiscencia a la intersubjetividad para el significado esponsal del cuerpo entre el hombre y la mujer.

Por el pecado la concupiscencia que es del mundo establece una oposición entre el cuerpo y el espíritu. Busca el poseer y gozar, no une, hace uso como un objeto al hombre o la mujer sin una entrega recíproca con verdadero amor, se adueña en el plano material.

Explica con tus palabras los términos mío y mía antes y después de la entrada de la concupiscencia en la persona humana.

El mío y mía antes era el auténtico amor donde la masculinidad y feminidad se unían en "una sola carne" eran el uno para el otro, se pertenecían según el querer de DIOS, se reconocieron y aceptaron como personas, es la reciprocidad con equilibrio
El mío y mía después hace que el deseo del cuerpo se imponga al deseo de la mente. La masculinidad se apropia de la feminidad como objeto de placer que puede ser usado y cambiado si no le satisface en el matrimonio "dureza de corazón".

Por eso Cristo les habla al corazón porque ahí esta la donación sincera de si mismos y es el sitio de lucha entre la concupiscencia y el verdadero amor que perdura.

Explica la lesión que resulta de la concupiscencia a la intersubjetividad para el significado esponsal del cuerpo entre el hombre y la mujer.
Explica con tus palabras los términos mío y mía antes:
Estas palabras expresan el significado esencial. Tal significado está fuera del significado de la propiedad (No es mía o mío como objeto, goce, posesión)
Después de la entrada de la concupiscencia en la persona humana:
Está orientada hacia este último significado que es el de poseer como algo material, cosa u objeto.

Explica la lesión que resulta de la concupiscencia a la intersubjetividad para el significado esponsal del cuerpo entre el hombre y la mujer.
Con la concupiscencia la relación de donación mutua, recíproca, entre el hombre y la mujer fue cambiada, alterada a una relación recíproca de apropiación. Por tanto hace que el cuerpo se convierta algo así como en “terreno” de apropiación de la otra persona. Llevando esto consigo, la pérdida del significado nupcial del cuerpo y a la recíproca “pertenencia” de las personas. El hombre y la mujer empiezan a relacionarse hasta considerarse como meros objetos del cual apropiarse y no como don, incapaces de alcanzar la medida interior del corazón.


Explica con tus palabras los términos mío y mía antes y después de la entrada de la concupiscencia en la persona humana.
Antes reflejaban la relación de posesión recíproca entre el hombre y la mujer. En un principio esta relación de pertenencia, implicaba que existía una relación del sujeto con el objeto: una relación de posesión y de propiedad. Así, los términos: “mío” y “mía”, indicaban la reciprocidad de la donación de la masculinidad y de la feminidad, el equilibrio del don en el que se funda la recíproca communio personarum. Expresando así, el significado nupcial del cuerpo.
No obstante, con la concupiscencia estos términos ahora tienen una significación que niega la pertenencia. Es decir, expresa cómo la concupiscencia de la carne quita la recíproca pertenencia en la relación hombre y mujer. Estos términos están orientados hacia la posesión, está dentro de la “ley de propiedad” y del ser “objeto de posesión”. Y de allí se pasa hacia el “gozar”, el usar a la otra persona. Ese objeto que ahora poseo tiene significado en cuanto “dispongo” y me sirvo de él, en la medida en que lo uso. Niega, el significado esponsal del cuerpo.