El Evangelio de Lucas indíca que de verdad es menester buscar sólo el reino de Dios. De este contexto emerge todo el amplio campo de la "preocupación" a la que el hombre no casado puede dedicar enteramente su pensamiento, fatigas y corazón. Ya que el hombre puede "preocuparse" solo de aquello que lleva en su corazón.
San Pablo se refiere a las "Cosas del Senor" que es todo el reino de Cristo y su cuerpo que es la Iglesia y cuanto contribuye al crecmiento de ésta. Y por es eso dice: "Quisiera yo que todos los hombres fueran como yo" y "El que no está casado se preocupa... de agradar al Senor".