83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginidad

En esta tercera y cuarta partes se toca la teología del cuerpo, la
resurrección de los cuerpos, la virginidad, el celibato,la abstinencia en el
matrimonio, la doctrina paulina sobre virginidad y matrimonio .

Esta parte consta 23 lecciones que se enviarán todos los martes y viernes a
partir del 14 de enero de 2014 , la última será el 1 de abril del 2014
.Estas son la tercera y cuarta partes de seis partes que se darán de manera
consecutiva e ininterrumpida. El curso completo se dará a lo largo de un año
y consta de:

Parte I: Principios del amor humano (23 lecciones)

Parte II: La purificación del corazón (40 lecciones)

Parte III: La resurrección de la carne (9 lecciones)

Parte IV: La virginidad cristiana (14 lecciones)

Parte V: El sacramento del matrimonio (27 lecciones)

Parte VI: Amor y fecundidad (16 lecciones)

Este curso tiene el objetivo de difundir la catequesis del amor humano,
también conocida como Teología del Cuerpo.

Moderadores: raulalonso, tito, Catholic.net, gache, Moderadores Animadores

83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginidad

Notapor pilar calva » Jue Ene 16, 2014 7:03 pm

83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginidad

San Pablo, explicando en el capítulo VII de su primera Carta a los Corintios la cuestión del matrimonio y la virginidad (es decir, la continencia por el reino de Dios), trata de motivar la causa por la que quien elige el matrimonio hace «bien» y qu

1. San Pablo, explicando en el capítulo VII de su primera Carta a los Corintios la cuestión del matrimonio y la virginidad (es decir, la continencia por el reino de Dios), trata de motivar la causa por la que quien elige el matrimonio hace "bien" y quien decide, en cambio una vida de continencia, o sea la virginidad, hace "mejor". Así escribe: "Dígoos, pues, hermanos que el tiempo es corto. Sólo queda que los que tienen mujer vivan como si no la tuvieran..."; y también "los que compran, como si no poseyesen, y los que disfrutan del mundo, como si no disfrutasen, porque pasa la apariencia de este mundo. Yo os querría libres de cuidados..." (1Cor 7, 29. 30-32).

2. La últimas palabras del texto citado demuestran que en la argumentación Pablo se refiere a su propia experiencia, y de este modo la argumentación se hace más personal. No sólo formula el principio y trata de motivarlo en cuanto tal, sino que lo enlaza con reflexiones y convicciones personales nacidas de la práctica del consejo evangélico del celibato. Cada una de las expresiones y alocuciones son prueba de su fuerza de persuasión. El Apóstol no sólo escribe a sus Corintios: "Quisiera que todos los hombres fuesen como yo" (1Cor 7, 28). Por lo demás, esta convicción personal la había expresado ya en las primeras palabras del capítulo VII de dicha Carta, refiriendo, si bien para modificarla, esta opinión de los Corintios: "Comenzando a tratar de lo que me habéis escrito, bueno es al hombre no tocar mujer..." (1Cor 7, 1).

3. Nos podemos preguntar: ¿Qué "tribulaciones de la carne" tenía Pablo en el pensamiento? Cristo hablaba sólo de los sufrimientos (o "aflicciones") que padece la mujer cuando ha de dar "a luz al hijo", subrayando a la vez la alegría (cf. Jn 16, 21) con que se regocija en compensación de estos sufrimientos, después del nacimiento del hijo: la alegría de la maternidad. En cambio, Pablo escribe sobre las "tribulaciones del cuerpo" que esperan a los casados. ¿Acaso será ésta la expresión de una aversión personal del Apóstol hacia el matrimonio? En esta observación realista hay que ver una advertencia justificada a quienes -como a veces los jóvenes- piensan que la unión y convivencia conyugal han de proporcionarles sólo felicidad y gozo. La experiencia de la vida demuestra que no rara vez los cónyuges quedan desilusionados respecto de lo que principalmente se esperaban. El gozo de la unión lleva consigo también las "tribulaciones de la carne", sobre las que escribe el Apóstol en la Carta a los Corintios. Con frecuencia son "tribulaciones" de naturaleza moral. Si él quiere decir con esto que el verdadero amor conyugal -aquel precisamente por el que "el hombre... se adherirá a su mujer y vendrán a ser los dos una sola carne" (Gén 2, 24)- es al mismo tiempo un amor difícil, ciertamente se mantiene dentro del terreno de la verdad evangélica y no hay razón alguna para descubrir que caracterizaría más tarde al maniqueísmo.

4. Cristo en sus palabras sobre la continencia por el reino de Dios, de ningún modo se propone encauzar a los oyentes hacia el celibato o la virginidad cuando les señala las "tribulaciones" del matrimonio. Más bien se advierte que procura poner de relieve algunos aspectos humanamente penosos de la opción por la continencia: tanto razones sociales como razones de naturaleza subjetiva inducen a Cristo a decir que se hace "eunuco" el hombre que toma tal decisión, es decir, el hombre que abraza voluntariamente la continencia. Pero precisamente gracias a esto resalta con suma claridad todo el significado subjetivo, la grandeza y exepcionalidad de una tal decisión: el significado de una respuesta madura a un don especial del Espíritu.

5. No entiende de otro modo el consejo de la continencia San Pablo en la Carta a los Corintios, pero lo expresa de modo diferente. Escribe así: "Dígoos, pues, hermanos, que el tiempo es corto..." (1Cor 7, 29), y un poco más adelante: "Pasa la apariencia de este mundo..." (7, 31). Esta constatación sobre la caducidad de la existencia humana y el carácter accidental de cuanto ha sido creado, deben llevar a que "los que tienen mujer vivan como si no la tuvieren" (1Cor 7, 29; cf. 7, 31), y a preparar el terreno al mismo tiempo a la enseñanza sobre la continencia. Pues en el centro de su razonamiento pone Pablo la frase-clave que puede relacionarse con lo enunciado por Cristo, que es único en su género, sobre el tema de la continencia por el reino de Dios (cf. Mt 19, 12).

6. Mientras Cristo pone de relieve la magnitud de la renuncia inseparable de tal decisión, Pablo muestra sobre todo cómo hay que entender el "reino de Dios" en la vida de un hombre que ha renunciado al matrimonio por el reino. Y mientras el triple paralelismo de lo enunciado por Cristo alcanza su punto culminante en el verbo que indica la grandeza de la renuncia asumida voluntariamente ("hay eunucos que a sí mismos se han hecho tales por amor del reino de los cielos", Mt 19, 12), Pablo define la situación con una sola palabra: "no casado" (ágamos); en cambio, más adelante incluye "reino de los cielos" en una síntesis espléndida cuando dice: "El célibe se cuida de las cosas del Señor, de cómo agradar al Señor" (1Cor 7, 32).

Cada palabra de este párrafo merece un análisis especial.

7. En el Evangelio de Lucas, discípulo de Pablo, el contexto del verbo "preocuparse de" o "buscar" indica que de verdad es menester buscar sólo el reino de Dios (cf. Lc 10, 41). Y el mismo Pablo habla directamente de su "preocupación por todas las Iglesias" (2Cor 11, 28), de la búsqueda de Cristo mediante la solicitud por los problemas de los hermanos, por los miembros del Cuerpo de Cristo (cf. Flp 2, 20-21; 1Cor 12, 25). De este contexto emerge todo el amplio campo de la "preocupación" a la que el hombre no casado puede dedicar enteramente su pensamiento, fatigas y corazón. Ya que el hombre puede "preocuparse" sólo de aquello que lleva en el corazón.

8. En la enunciación de Pablo, quien no está casado se preocupa de las cosas del Señor (ta tou kyriou). Con esta expresión concisa Pablo abarca la realidad objetiva completa del reino de Dios. "Del Señor es la tierra y cuanto la llena", dirá él mismo un poco más adelante en esta Carta (1Cor 10, 26; cf. Sal 23 [24], 1).
¡El objeto del interés del cristiano es el mundo entero! Pero Pablo con el nombre "Señor" califica en primer lugar a Jesucristo (cf., por ejemplo, Flp 2, 11) y, por tanto, "cosas del Señor" quiere decir ante todo el reino de Cristo, su Cuerpo que es la Iglesia (cf. Col 1, 18) y cuanto contribuye al crecimiento de ésta. De todo ello se preocupa el hombre no casado y, por ello, siendo Pablo "Apóstol de Jesucristo" (1Cor 1, 1) y ministro del Evangelio (cf. Col 1, 23), escribe a los Corintios: "Quisiera yo que todos los hombres fueran como yo" (1Cor 7, 7).

9. Sin embargo, el celo apostólico y la actividad más eficaz, tampoco agotan el contenido de la motivación paulina de la continencia. Incluso podría decirse que su raíz y fuente se encuentran en la segunda parte del párrafo que muestra la realidad subjetiva del reino de Dios. "El que no está casado se preocupa... de agradar al Señor". Esta constatación abarca todo el campo de la relación personal del hombre con Dios. "Agradar a Dios" -esta expresión se encuentra en libros antiguos de la Biblia (cf., por ejemplo, Dt 13, 19)- es sinónimo de vida en gracia de Dios, o sea, de quien se comporta según su voluntad para serle agradable. En uno de los últimos libros de la Sagrada Escritura, esta expresión llega a ser una síntesis teológica de la santidad. San Juan sólo una vez la aplica a Cristo: "Yo hago siempre lo que es de su agrado [del Padre]" (Jn 8, 29). San Pablo hace notar en la Carta a los Romanos que Cristo "no buscó agradarse a Sí mismo" (Rom 15, 3).
En estas dos constataciones está encerrado todo el contenido de "agradar a Dios", entendido en el Nuevo Testamento como seguir las huellas de Cristo.

10. Podría parecer que se sobreponen las dos partes de la expresión paulina pues, en efecto, preocuparse de lo "que toca al Señor", de las "cosas del Señor", debe "agradar al Señor". Por otra parte, quien complace a Dios no puede encerrarse en sí mismo, sino abrirse al mundo, a cuanto hay que llevar de nuevo a Cristo. Evidentemente éstos son dos aspectos de la misma realidad de Dios y de su reino. Pero Pablo tenía que distinguirlos para hacer ver más clara la naturaleza y posibilidad de la continencia "por el reino de los cielos".
Habremos de volver de nuevo sobre el tema.

Pregunta:
¿Podrías explicar con tus propias palabras el parangón que pone el texto sobre lo que Jesús dice del celibato y lo que dice Pablo? ¿Cuáles son los diferentes enfoques del celibato?
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor patricio » Mar Abr 01, 2014 8:42 am

Pregunta:
¿Qué indica en el Evangelio de Lucas, discípulo de Pablo, el contexto del verbo "preocuparse de" o "buscar"?
En el Evangelio de Lucas, el contexto del verbo "preocuparse de" o "buscar" indica que de verdad es menester buscar sólo el reino de Dios. Y el mismo Pablo habla directamente de su "preocupación por todas las Iglesias", de la búsqueda de Cristo mediante la solicitud por los problemas de los hermanos, por los miembros del Cuerpo de Cristo. De este contexto emerge todo el amplio campo de la "preocupación" a la que el hombre no casado puede dedicar enteramente su pensamiento, fatigas y corazón. Ya que el hombre puede "preocuparse" sólo de aquello que lleva en el corazón.
En la enunciación de Pablo, quien no está casado se preocupa de las cosas del Señor. Con esta expresión concisa Pablo abarca la realidad objetiva completa del reino de Dios. "Del Señor es la tierra y cuanto la llena", dirá él mismo un poco más adelante en esta Carta (1Cor 10, 26; cf. Sal 23 [24], 1).
El objeto del interés del cristiano es el mundo entero. Pero Pablo con el nombre "Señor" califica en primer lugar a Jesucristo y, por tanto, "cosas del Señor" quiere decir ante todo el reino de Cristo, su Cuerpo que es la Iglesia y cuanto contribuye al crecimiento de ésta. De todo ello se preocupa el hombre no casado y, por ello, siendo Pablo "Apóstol de Jesucristo" y ministro del Evangelio, escribe a los Corintios: "Quisiera yo que todos los hombres fueran como yo" (1Cor 7, 7).
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor virginia castro » Mar Abr 01, 2014 9:28 am

Virginia Castro #83

Que indica en el Evangelio de Lucas, discipulo de Pablo el context del verbo "preocuparse de o buscar"?

Pablo nos habla que de verdad es necesario buscar solo el reino de Dios y Pablo habla de la "preocupacion por las Iglesias", el buscar a Cristo mediante los problemas de los hermanos y asi sale la preocupacion que el hombre casado no puede dedicar con su pensamiento, fatigas y Corazon,
Hay que preocuparse de las cosas que agradan al Senor y por otra parte, quien complace a Dios no puede encerrarse en si mismo sino abrirse al mundo y llevar el mensaje de Cristo.
En el Evangelio Marta siempre estaba muy ocupada y active y Maria era contemplative, en la Iglesia, hay diversas vocaciones, pero accion y contemplacion Deben estra presents en tda vida Cristiana.
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor lindoro50 » Mar Abr 01, 2014 11:05 am

Indica que es importante procurar sólo el reino de Dios (Lc 10, 41). Y el mismo Pablo habla directamente de su "preocupación por todas las Iglesias" (2Cor 11, 28), de la búsqueda de Cristo mediante el interés por los problemas de los hermanos, por los miembros del Cuerpo de Cristo (cf. Flp 2, 20-21; 1Cor 12, 25). De estos comentarios surge todo el campo de la "preocupación" a la que el hombre no casado puede dedicar enteramente su pensamiento, fatigas y corazón. Ya que el hombre puede "preocuparse" sólo de aquello que lleva en el corazón. ¡El objeto del interés del cristiano es el mundo entero! y, por tanto, "las cosas del Señor" quiere decir ante todo el reino de Cristo, su Cuerpo que es la Iglesia (cf. Col 1, 18) y cuanto contribuye al crecimiento de ésta.
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor Maria 2 » Mar Abr 01, 2014 12:59 pm

¿Qué indica en el Evangelio de Lucas, discípulo de Pablo, el contexto del verbo "preocuparse de" o "buscar"?

"El célibe se cuida de las cosas del Señor, de cómo agradar al Señor" (1Cor 7, 32).

En el Evangelio de Lucas, discípulo de Pablo, el contexto del verbo "preocuparse de" o "buscar" indica que de verdad es menester buscar sólo el reino de Dios (cf. Lc 10, 41). Y el mismo Pablo habla directamente de su "preocupación por todas las Iglesias" (2Cor 11, 28), de la búsqueda de Cristo mediante la solicitud por los problemas de los hermanos, por los miembros del Cuerpo de Cristo (cf. Flp 2, 20-21; 1Cor 12, 25). De este contexto emerge todo el amplio campo de la "preocupación" a la que el hombre no casado puede dedicar enteramente su pensamiento, fatigas y corazón. Ya que el hombre puede "preocuparse" sólo de aquello que lleva en el corazón.

"El que no está casado se preocupa... de agradar al Señor". Esta constatación abarca todo el campo de la relación personal del hombre con Dios. "Agradar a Dios" -esta expresión se encuentra en libros antiguos de la Biblia (cf., por ejemplo, Dt 13, 19)- es sinónimo de vida en gracia de Dios, o sea, de quien se comporta según su voluntad para serle agradable.
San Juan sólo una vez la aplica a Cristo: "Yo hago siempre lo que es de su agrado [del Padre]" (Jn 8, 29).

COMENTARIO: Dice la lectura anterior que quien complace a Dios no puede encerrarse en sí mismo, sino abrirse al mundo, a cuanto hay que llevar de nuevo a Cristo. San Pablo hace notar en la Carta a los Romanos que Cristo "no buscó agradarse a Sí mismo" (Rom 15, 3).En estas dos constataciones está encerrado todo el contenido de "agradar a Dios", entendido en el Nuevo Testamento como seguir las huellas de Cristo.

Un abrazo y hasta pronto.-
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor antonio_7 » Mar Abr 01, 2014 1:23 pm

Podrias responder con tus propias palabras el paragon que pone el texto sobre lo que Jesus dise de el celibato y lo que dise Pablo? Cuales son los diferentes enfoques del celibato?
El texto nos relata las diferensias muy claras de los enfoques que uno y otro nos dan haserca del celibato, y la continensia por el reyno de los cielos; Primero la forma como nuestro Senor nos pone de relieve la inportansia que tiene el matrimonio, y nos describe como triple paraalelismo de la continencia y el selivato por el reyno de los cielos, El no insita a los presentes a que tomen ese curso o esa obsion a la continensia, si no mas bien el abla de algunos aspectos penosos humanamente hay en desidir ser selibes, como un enuco se hase, nase, y otros se desiden, y de talmanera, es una decision libre y sin nigun inpocision, pero lo mas inportante es que es un don del Espiritu Santo.

Y por parte de Pablo la forma con que el lo enfoca, es que es un menester, buscar ser selibe, o buscar la continencia y pone de ejemplo su misma persona, demanera que el enfoque paulista es deque es extraordinario buscar el reino de los cielos con la abstinensia y el celibato, pues el dise que Cristo mismo ejemplifico perfectamente el celibato y la continensia, por lo tantanto, el sentido paulista es de sugiere, como una forma de vida, que se basa en solo la importansia de preocuparse de agradar a DIOS, con el ejemplo de Cristo por alcazar el reino de los cielos.
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor maguie » Mar Abr 01, 2014 1:37 pm

El texto pone de relieve la comparación que hacen Cristo y Pablo sobre el celibato. Ellos hablan desde diferentes enfoques, Cristo resalta la magnitud y la grandeza de la renuncia que conlleva elegir la continencia por el Reino, pero no deja de pronunciar las palabra 'se hacen eunucos por el Reino' que parecen poner un énfasis en ciertas tribulaciones que acompañan esta elección, razones sociales y de naturaleza subjetiva pero que también engrandecen el significado de una respuesta madura a un don especial de Dios.
Pablo habla de los que se entregan al servicio de Dios por medio del celibato, que están disponibles para dedicarse por entero a las cosas del Señor, pues el casado debe 'preocuparse de contentar a su mujer' y esta ocupación lo distrae. También resalta que la preocupación del hombre célibe es el mundo entero, la Iglesia toda y habla con mucho énfasis de las'tribulaciones de la carne' que afectan al hombre casado, que parece referirse a las preocupaciones morales. En todo caso él dice que quien no se casa, 'hace mejor' que quien sí lo hace, poniendo mucho énfasis en el celibato por el Reino.
Así pues, los dos resaltan la belleza y grandeza del celibato por el Reino, cada uno desde su propio enfoque.
maguie
 
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor Jeanette Palacios » Mar Abr 01, 2014 3:11 pm

¿Podrías explicar con tus propias palabras el parangón que pone el texto sobre lo que Jesús dice del celibato y lo que dice Pablo? ¿Cuáles son los diferentes enfoques del celibato?

Para el Apostol Pablo siempre fue importante el celibato porque todas nuestra atraccion seria solo para agradar a Dios y Pablo no solo trata de motivarlo, sino que lo enlaza con reflexiones y convicciones personales nacidas de la práctica del consejo evangélico del celibato. Cada una de las expresiones y alocuciones son prueba de su fuerza de persuasión.
El dice que Quisiera que todos los hombres fuesen como el. Esto es porque el nunca se caso y dedico su vida a evangelizar y a amar a Dios.
Por el contrario Cristo hablaba sólo de los sufrimientos que padece la mujer cuando ha de dar "a luz al hijo", subrayando a la vez la alegría con que se regocija en compensación de estos sufrimientos, después del nacimiento del hijo En cambio, Pablo escribe sobre las "tribulaciones del cuerpo" que esperan a los casados. En esta observación realista hay que ver una advertencia justificada a quienes -como a veces los jóvenes- piensan que la unión y convivencia conyugal han de proporcionarles sólo felicidad y gozo. La experiencia de la vida demuestra que no rara vez los cónyuges quedan desilusionados respecto de lo que principalmente se esperaban. El gozo de la unión lleva consigo también las "tribulaciones de la carne", sobre las que escribe el Apóstol en la Carta a los Corintios. Con frecuencia son "tribulaciones" de naturaleza moral.
Cristo en sus palabras sobre la continencia por el reino de Dios, de ningún modo se propone encauzar a los oyentes hacia el celibato o la virginidad cuando les señala las "tribulaciones" del matrimonio. Más bien se advierte que procura poner de relieve algunos aspectos humanamente penosos de la opción por la continencia: tanto razones sociales como razones de naturaleza subjetiva inducen a Cristo a decir que se hace "eunuco" el hombre que toma tal decisión, es decir, el hombre que abraza voluntariamente la continencia. Pero precisamente gracias a esto resalta con suma claridad todo el significado subjetivo, la grandeza y exepcionalidad de una tal decisión: el significado de una respuesta madura a un don especial del Espíritu.
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor Silviamaria » Mar Abr 01, 2014 4:30 pm

¿Qué indica en el evangelio de Lucas, discípulo de Pablo, el contexto del verbo “preocuparse de” o “buscar”?
Lo que indica “preocuparse de” o “buscar” es que debemos preocuparnos por buscar el Reino de Dios. Luego el hombre no casado y entregado a Dios puede destinar todo su tiempo con pensamiento y corazón al Señor. En primer lugar está Dios sobre todas las cosas del mundo.

¿Podrías explicar con tus propias palabras el parangón que pone el texto sobre lo que Jesús dice del celibato y lo que dice Pablo? ¿Cuáles son los diferentes enfoques del celibato?

Hay diferencias muy claras: Jesús da importancia al matrimonio y deja en libertad de escoger la forma de cómo llegar al Reino de los cielos.
Pablo señala que hay que ser célibe, buscar la abstinencia y pone a Cristo de ejemplo. Con su forma de vida de Pablo recomienda la importancia de agradar a Dios ya que el casado debe preocuparse de las cosas de su mujer y eso lo distrae.
Los diferentes enfoques del celibato permiten llegar al Reino de Dios.
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor yaluz » Mar Abr 01, 2014 8:23 pm

Pregunta:
¿Qué indica en el Evangelio de Lucas, discípulo de Pablo, el contexto del verbo "preocuparse de" o "buscar"?

R: Ciertamente, Lucas, como buen discípulo de San Pablo, indica que preocuparse por buscar el Reino de Dios, ¡es optar por lo mejor! Jesús en cambio dijo que el que se hace eunuco por el Reino de los Cielos, es una respuesta madura a un don especial del Espiritu Santo. Tanto San Lucas como San Pablo se esmeran por buscar el mayor numero de convertidos que trabajen por el Reino, si entre éstos, hay con dedicación total, más agrada al Señor, nuestro Dios!
Zulay R. de Álvarez (yaluz)
Venezuela
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor mariaines » Vie Abr 04, 2014 11:42 am

¿Qué indica en el Evangelio de Lucas, discípulo de Pablo, el contexto del verbo "preocuparse de" o "buscar"?
En el Evangelio de Lucas, discípulo de Pablo, el contexto del verbo "preocuparse de" o "buscar" indica que de verdad es menester buscar sólo el reino de Dios (cf. Lc 10, 41). Y el mismo Pablo habla directamente de su "preocupación por todas las Iglesias" (2Cor 11, 28), de la búsqueda de Cristo mediante la solicitud por los problemas de los hermanos, por los miembros del Cuerpo de Cristo (cf. Flp 2, 20-21; 1Cor 12, 25). De este contexto emerge todo el amplio campo de la "preocupación" a la que el hombre no casado puede dedicar enteramente su pensamiento, fatigas y corazón. Ya que el hombre puede "preocuparse" sólo de aquello que lleva en el corazón.
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor Mary Jo » Vie Abr 04, 2014 5:46 pm

Preguntas:
1. ¿Qué indica en el Evangelio de Lucas, discípulo de Pablo, el contexto del verbo "preocuparse de" o "buscar"?
En el Evangelio de Lucas, discípulo de Pablo, el contexto del verbo "preocuparse de" o "buscar" indica que de verdad es menester buscar sólo el reino de Dios. El hombre se "preocupa" sólo de aquello que lleva en el corazón.

2. ¿Podrías explicar con tus propias palabras el parangón que pone el texto sobre lo que Jesús dice del celibato y lo que dice Pablo?
Cristo en sus palabras sobre la continencia hace ver que ésta si es elegida debe ser por el reino de Dios. El significado es de una respuesta madura a un don especial del Espíritu.
San Pablo explica que quien elige el matrimonio hace "bien" y quien decide, en cambio una vida de continencia hace "mejor". Él dice esto como un consejo de la continencia.

3. ¿Cuáles son los diferentes enfoques del celibato?
Cristo habla sobre la continencia poniendo énfasis a la magnitud de la renuncia inseparable de tal decisión.
Pablo muestra sobre todo cómo hay que entender el "reino de Dios" en la vida de un hombre que ha renunciado al matrimonio por el reino. En este hay que entender dos aspectos:
1. Quien vive en la virginidad o en el celibato su corazón está preocupado sólo de agradar a Dios.
2. Quien complace a Dios no puede encerrarse en sí mismo, sino abrirse al mundo, a cuanto hay que llevar de nuevo a Cristo.
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor NELSON » Sab Abr 05, 2014 2:34 pm

Pregunta:
¿Qué indica en el Evangelio de Lucas, discípulo de Pablo, el contexto del verbo "preocuparse de" o "buscar"?
En el Evangelio de Lucas, discípulo de Pablo, el contexto del verbo "preocuparse de" o "buscar" indica que de verdad es menester buscar sólo el reino de Dios (cf. Lc 10, 41). Y el mismo Pablo habla directamente de su "preocupación por todas las Iglesias" (2Cor 11, 28), de la búsqueda de Cristo mediante la solicitud por los problemas de los hermanos, por los miembros del Cuerpo de Cristo (cf. Flp 2, 20-21; 1Cor 12, 25). De este contexto emerge todo el amplio campo de la "preocupación" a la que el hombre no casado puede dedicar enteramente su pensamiento, fatigas y corazón. Ya que el hombre puede "preocuparse" sólo de aquello que lleva en el corazón.
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor RoxanaGomez25 » Mar Abr 08, 2014 1:57 pm

Paragón que pone el texto sobre lo que Jesús dice del celibato y lo que dice Pablo: ¿Cuáles son los diferentes enfoques del celibato?
Pablo habla de lo que ha vivido personalmente, en base al mensaje de Jesús de decidir la continencia por el reino de los cielos, Pablo da su propio testimonio de vida, su propia experiencia. En Pablo escribe sobre las tribulaciones del cuerpo, que esperan a los casados, esta tribulación es en base al gozo del matrimonio.
Cristo menciona la continencia como una respuesta madura a un don especial del Espíritu.
Pablo solo lo expresa de manera diferente como "Pasa la apariencia de este mundo", lo hace en base a la caducidad de la existencia humana, lo expresa como los que tienen mujer vivan como si no la tuvieran, donde pone semejanza en lo anunciado por Cristo de la continencia por el reino de Dios.
Cristo pone de relieve la magnitud de la renuncia inseparable de tal decisión. Pablo muestra como entender el reino de Dios en la vida del hombre que ha renunciado al matrimonio por el reino, Pablo la define como "no casado" lo define como ese hombre que puede dedicar enteramente su pensamiento, fatigas y corazón, donde el hombre puede preocuparse solo de aquello que lleva su corazón, Pablo se preocupa por las cosas del Señor. COmo Agradar a Dios.
Cristo es el Hijo de Dios y Pablo quiere ser a semejanza de Cristo agradándole.
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor MA SOCORRO A REYES L » Mar Abr 08, 2014 2:36 pm

Cristo en sus palabras sobre la continencia por el reino de Dios, de ningún modo se propone encauzar a los oyentes hacia el celibato o la virginidad cuando les señala las "tribulaciones" del matrimonio. Más bien se advierte que procura poner de relieve algunos aspectos humanamente penosos de la opción por la continencia: tanto razones sociales como razones de naturaleza subjetiva inducen a Cristo a decir que se hace "eunuco" el hombre que toma tal decisión, es decir, el hombre que abraza voluntariamente la continencia. Pero precisamente gracias a esto resalta con suma claridad todo el significado subjetivo, la grandeza y exepcionalidad de una tal decisión: el significado de una respuesta madura a un don especial del Espíritu.
En el Evangelio de Lucas, discípulo de Pablo, el contexto del verbo "preocuparse de" o "buscar" indica que de verdad es menester buscar sólo el reino de Dios (cf. Lc 10, 41). En la enunciación de Pablo, quien no está casado se preocupa de las cosas del Señor (ta tou kyriou). Pablo con el nombre "Señor" califica en primer lugar a Jesucristo (cf., por ejemplo, Flp 2, 11) y, por tanto, "cosas del Señor" quiere decir ante todo el reino de Cristo, su Cuerpo que es la Iglesia (cf. Col 1, 18) y cuanto contribuye al crecimiento de ésta. De todo ello se preocupa el hombre no casado y, por ello, siendo Pablo "Apóstol de Jesucristo" (1Cor 1, 1) y ministro del Evangelio (cf. Col 1, 23), escribe a los Corintios: "Quisiera yo que todos los hombres fueran como yo" (1Cor 7, 7).
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor b. gabriel reyes reyes » Dom Abr 13, 2014 7:10 pm

[b]¿Qué indica en el Evangelio de Lucas, discípulo de Pablo, el contexto del verbo "preocuparse de" o "buscar"?[/b]
[i]En el Evangelio de Lucas, discípulo de Pablo, el contexto del verbo "preocuparse de" o "buscar" indica que de verdad es menester buscar sólo el reino de Dios buscar a Cristo mediante la solicitud por los problemas de los hermanos, miembros del Cuerpo de Cristo.[/i]

[b]¿Podrías explicar con tus propias palabras el parangón que pone el texto sobre lo que Jesús dice del celibato y lo que dice Pablo? [/b]
[i]Mientras que Jesucristo enfatiza la grandeza de la renuncia asumida voluntariamente: “por el reino de los cielos”, San Pablo señala cómo hay que entender el reino de los cielos, la realidad objetiva: Agradar al Señor, atendiendo sus cosas.[/i]

[b]¿Cuáles son los diferentes enfoques del celibato?[/b]
- [i]Respuesta madura a un don especial del Espíritu.
- Evitar las “tribulaciones” del matrimonio, enfoque que, mal encausado, conduce al maniqueísmo.[/i]
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor garu » Mar Abr 15, 2014 9:36 pm

Tanto Pablo como Jesús, hablan de la continencia por el reino de Dios, aunque con enfoques distintos. Pablo, por su parte, apela a la caducidad de todo lo terreno, aduciendo que no hay que perder tiempo para agradar a Dios, Se asume como ejemplo de vida célibe y apuesta a que el hombre que no se casa lo hace “mejor” que aquel que si lo hace. Basado en su propia experiencia de vida, Pablo llama al celibato por encima de todo.
Jesús, por otro lado, si bien habla de las tribulaciones del matrimonio, no pretende influenciar a los oyentes para la escogencia del celibato, al contrario, no deja de hacer notar la magnitud de la renuncia que implica tal decisión, así como otros aspectos penosos ligados a esa opción.
Sin embargo, pese a los enfoques distintos, ambos convergen en la renuncia voluntaria del Verbo y su propia escogencia del celibato (Jesús) y el no casarse (Pablo), por el” reino de los cielos”.
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor Alejandra S » Mar Abr 22, 2014 10:09 am

“En el Evangelio de Lucas, discípulo de Pablo, el contexto del verbo "preocuparse de" o "buscar" indica que de verdad es menester buscar sólo el reino de Dios (cf. Lc 10, 41)”.
San Pablo habla de los llamados a la virginidad y el celibato por el reino de los cielos y con celo apostólico quisiera que muchos fueran llamados como él a dedicarse de ese modo a la vida en santidad. Dice San Pablo “El célibe se cuida de las cosas del Señor, de cómo agradar al Señor" (1Cor 7, 32).
Hay que tener en cuenta que “Cristo en sus palabras sobre la continencia por el reino de Dios, de ningún modo se propone encauzar a los oyentes hacia el celibato o la virginidad (…) resalta con suma claridad todo el significado subjetivo, la grandeza y excepcionalidad de una tal decisión: el significado de una respuesta madura a un don especial del Espíritu.
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor BlancaElena » Sab Abr 26, 2014 7:33 pm

¿Podrías explicar con tus propias palabras el parangón que pone el texto sobre lo que Jesús dice del celibato y lo que dice Pablo?

JESUS habla sobre los que se hacen eunucos por el Reino de los Cielos y Pablo amplia las palabras de JESUS según su propia experiencia y habla de los no casados. Es la motivación Paulina para vivir la continencia por aquellos que se sientan capaces y acepten voluntariamente el don de DIOS con verdadero amor.


¿Cuáles son los diferentes enfoques del celibato?

La vida pasa muy rápido no se debe apegar a nada, solo pensar en agradar a DIOS. El espíritu debe dominar los sentidos para vivir con coherencia el celibato. Preocuparse solo de lo que lleva en el corazón como misión evangelizadora iluminada y fortalecida por EL ESPIRITU SANTO a pesar de vivir momentos difíciles no apartarse de la gracia y elección voluntaria que persevere hasta el final con una exclusividad solo para DIOS
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Re: 83. Enseñanza paulina sobre la excelencia de la virginid

Notapor Carlos64 » Sab May 17, 2014 12:45 am

Pregunta: "¿Podrías explicar con tus propias palabras el parangón que pone el texto sobre lo que Jesús dice del celibato y lo que dice Pablo? ¿Cuáles son los diferentes enfoques del celibato?"

El Señor Jesús hace énfasis en la grandeza de la decisión de aquellos que optan por "hacerse eunucos" por el reino de los cielos, siendo esta grandeza un atributo que procede del carácter libre, consciente y trascendente de tal decisión, la cual viene a ser por ende una respuesta plena de madurez a un don o llamado muy particular del Espíritu de Dios. En suma, quien se hace libremente célibe por el reino de Dios está dando una respuesta pletórica de libertad y generosidad a un designio divino excepcional y personal.

San Pablo, por su parte, enfatiza otros aspectos de esta opción. En concreto, el Apóstol de los gentiles señala que la continencia ((el no casarse, en su forma de expresarlo) permite a quien por ello opta dedicarse de forma exclusiva (ocuparse) de las cosas del Señor y, lo que es más profundo si se quiere desde un punto de vista teológico, agradar a Dios. El célibe por el reino de Dios puede desde su consagración como tal dedicar su vida al celo misionero, apostólico, para difundir la buena nueva de Jesucristo por el orbe entero, dedicándose entonces en cuerpo y alma a la Iglesia como Cuerpo Místico de Cristo, y de esta forma, desde su celibato consagrado, libremente elegido más divinamente llamado, servir a la humanidad en lo que más perentorio le es a esa humanidad, que es el que conozcan a Cristo y por medio de Él lleguen al Padre. Como vemos, esta forma de plantearlo de san Pablo se corresponde muy congruentemente con su propia vida, la del primer gran misionero de la Iglesia.

San Pablo también señala que el no casado vive para agradar a Dios. Esto implica que el celibato viene a ser una forma privilegiada, aunque no exclusiva, de alcanzar una vida en gracia de Dios. O sea, una forma especial de llegar a la santidad. Ahora bien, no quiere con esto decir que sólo desde esa vocación se pueda llegar a ser santo, sino que en su propia experiencia como célibe al servicio de las cosas de Dios ha podido encontrar un camino claro para agradar al Señor, haciendo su divina voluntad del modo en que Cristo, como Hijo del Hombre, agradó al Padre. Y es que en esto reside quizás la esencia del consagrarse en virginidad al Señor: un estar plenamente a disposición, en cuerpo y alma, a la gracia santificadora de Dios y a su obra redentora en bien de la humanidad; es un abrirse al mundo desde la propia y muy particular consagración al Altísimo.

Dios la colme de bendiciones, Dra. Pilar.
Discípulo de Cristo por amor del Padre y unción del Espíritu. Miembro de la Iglesia por gracia divina. Amar a Jesús es mi mayor alegría.

Dios te salve, María, Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra.
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