¿Qué llevaba el hombre en su alma antes del pecado?
En el principio el hombre tenía un estado de inocencia y justicia originarias. “…antes del pecado, el hombre llevaba en su alma el fruto de la elección eterna en Cristo, Hijo eterno del Padre. Mediante la gracia de esta elección, el hombre, varón y mujer, era "santo e inmaculado" ante Dios. Esa primordial (u originaria) santidad y pureza se expresaba también en el hecho de que, aunque los dos estuviesen "desnudos... no se avergonzaban de ello" (Gén 2, 25)”.