por gache » Jue Oct 14, 2010 12:33 pm
SALUDO DEL PADRE ANTONIO RIVERO, L.C.
A LOS PARTICIPANTES DEL CURSO DE PROMOCIÓN VOCACIONAL
Muy estimados en Cristo, amigos y amigas:
Ya comenzó el curso on line sobre promoción vocacional y todavía no les había mandado mi saludo. Lo hago ahora con mucho gusto, para decirles que estoy rezando mucho por ustedes para que Dios Nuestro Señor les conceda la gracia de valorar cada día más lo que significa una vocación y hagan todo el esfuerzo necesario para ayudar a esos chicos y chicas a que descubran esa perla preciosa que Cristo ha escondido en el campo del mundo, como nos dice el evangelio (Cf. Mateo 13, 44-47).
Cada vocación es una perla preciosa que Dios regala al mundo, a la Iglesia, a cada congregación religiosa, para que refleje el brillo y la belleza de Cristo, y así muchos puedan acercarse a Cristo, el único que da la felicidad y la paz verdaderas.
Las vocaciones cuestan mucho –toda la sangre de Cristo-, pues no es nada fácil dejar todo, vender todo y seguir a Cristo. Pero hay que presentar a los vocacionados que no se trata sólo de perder, sino de perder para ganar más. Lo que el mundo ganará con esas vocaciones religiosas y sacerdotales es la salvación eterna, el regalo de la fe y la savia de los sacramentos para hacer crecer las virtudes.
Cualquier duda que tengan, ¡aquí me tienen! Encomendemos las vocaciones a la intercesión de la Virgen Santísima, la primera misionera y religiosa con corazón sacerdotal. Ella nos alentará en las dificultades que surgirán en la búsqueda, cultivo y concreción de las vocaciones.
Con mi oración y mi bendición ante el Señor y María Santísima, P. Antonio Rivero, L.C.