por el rockero » Mar Dic 06, 2011 10:58 pm
Saludos...
El día de ayer, mi corazón fue destruído de una forma bastante cruel:
Conocí a una mujer desde la preparatoria, y desde entonces me traía loco... hasta ayer.
Resulta que, primero, tiene novio y ya se va a casar (según), bueno, me dije "está bien", le confesé mis sentimientos (que por bastante tiempo había callado por no meterla en problemas y por no arriesgar lo poco que había ganado) y le ofrecí mi amistad, la cual aceptó, pues me dijo que podía ver en ella a una amiga en quien confiar y que podía contar con ella y bla bla bla... todo lo anterior fue MENTIRA.
Antes de seguir aclaro: NUNCA TUVE LA INTENCIÓN DE ACABAR CON ESA RELACIÓN. Yo se jugar limpio y apegado a las reglas y me gusta jugar así... aunque termine en el último lugar, no le hace.
Ayer cometí el delito federal de... irla a buscar a su trabajo. Al parecer le dió gusto verme, pero sólo fue una ilusión, pues como a la hora me mandó un mensaje diciéndome que no la volviera a buscar ni a su trabajo ni a su casa, y que le llamara al celular ni al teléfono de su casa, y que no le interesaba tener contacto conmigo, que iba a hacer su vida y que dejara las cosas así... ¡Ah! y que no quería ser grosera conmigo (sí, cómo no).
Bueno, yo le contesté que estaba bien, que si ni siquiera quería mi amistad, pues que ni hablar, que si fui a buscarla es porque estaba preocupado por ella (como buen amigo), pues ya no habíamos tenido comunicación ni por Twitter por espacio de un mes, pensando que la traían ocupada en su trabajo o que tenía un problema fuerte... pero lo que pasó es que me estaba evitando.
¿Que qué le hice para que reaccionara así? Aparte de existir y quererla, quién sabe, pues siempre la traté bien, siempre fui gentil y caballeroso, jamás tuve malos deseos con ella (y lo sabe) pero me acomodó una patada en la parte posterior del cuerpo humano, y se los digo porque no es la primera que me hace.
Ayer me dí cuenta de la realidad: NO ME QUIERE, ME DESPRECIA, LE CAIGO GORDO Y NUNCA TUVO EL VALOR DE DECÍRMELO DE FRENTE. Y eso es lo que me molesta: su falta de sinceridad. Me dí cuenta que es como un sepulcro: hermosa por fuera, pero llena de podredumbre. Y miren que varias veces le pedí que si me estaba pasando de molesto, que me lo dijera, y siempre me salía con "No, no te preocupes". Le ofrecí una amistad sincera y me mandó a volar. En una ocasión me vió sentado en una escalera (esperándola, la verdad) y huyó de mí como si le fuera a contagiar lepra o como si la fuera a violar o no sé...
Estaba en mi lista de amigos de Facebook, y un buen día, desapareció: Yo, de ingenuo, pensando que le habían hackeado la cuenta... ¡PERO NOOO...! ¡¡ELLA ME SACÓ DE SU LISTA DE AMIGOS!!. Hace poco más de dos meses le mandé un correo pidiéndole perdón por no estar en contacto con ella, pues no quería meterla en problemas con su novio (por que antes me había dicho que si le llamaba al celular la metía en problemas con él)... pues sigo esperando respuesta de ese correo... ¿y saben qué? va a llegar cuando caiga nieve en Acapulco...
Me pasó lo que al lobo del poema, al que San Francisco de Asis convenció de que dejara de matar y de robar y que se volviera bueno, y cuando se volvió bueno y mancito ¿qué pasó? Todos lo agarraron a patadas...
En resumen, le pedí dos miligramos de cariño... y me dió dos toneladas de desprecio. La higuera que con tanto cariño había plantado, me dio al final higos, pero higos muy amargos. Pues fui por mi hacha y le dí crán...
¿Que si la odio? No. No la odio, pero tampoco la quiero. Ya destruyó el cariño que tenía por ella. ¿Rencor? Tampoco, no soy rencoroso. ¿Deseos de venganza? No. No diré "Me voy a vengar"; sino que voy a confiar en Dios y Él me resarcirá (Proverbios 20, 22). Lo que sí tengo, es una profunda desilusión, una gran decepción y bastante rabia contenida... y no sé que hacer.
Sé que lo que no mata, fortalece; y esto no me mató. Además ya he pasado por cosas peores (como estar cerca de morir) y esto no me va a acabar. Tal vez en alguna otra época de mi vida hubiera acabado llorando en un rincón y chupándome el pulgar en posición fetal... pero ya tengo 30 años, casi 31, ya soy más viejo y ya no me cuezo al primer hervor... pero aún así necesito un buen consejo, algo que, como dice la canción, me saque de adentro esto que me está matando.
Por otra parte, le doy gracias a Dios por haberme quitado la venda de los ojos y darme cuenta cómo es esta persona en realidad. Y si no es para mí, pues ya pondrá a alguien en mi camino.