por Pachelli 1991 » Sab Ene 07, 2012 6:05 pm
La gran fachada está construida con piedra de cantera con un muy peculiar tono natural amarillo-naranja, que hace que al ver al poniente y por las tardes soleadas, luzca esplendorosa frente a su amplio atrio, como soberbio rostro arquitectónico cincelado en piedra y oro.
Iconológicamente es un canto a la jerarquía eclesiástica, con la presencia en los nichos de esculturas de santos curas en el primer cuerpo, obispos en el segundo y lo pontificio en el tercero, con San Pedro, Tiara, Llaves de autoridad y Cruz Pontificia mostradas en los medallones de lo alto. El imafronte, por su parte, afecta el perfil de una mitra y remata en un San Rafael, símbolo de la salud divina.
Es digno de notarse en esta obra que los frentes de los pedestales inferiores están ocupados por sirenas y tritones, como alusión alegórica de que iglesia se impone a vicios y pecados.
Pero si la presencia de sirenas es muy frecuente en toda la geografía del arte colonial latinoamericano, no lo es tanto la de su versión masculina, los tritones. De aquí el interés de estos relieves de ascendencia mitológica.
Sabemos que el interior parroquial estuvo enriquecido por grandes retablos dorados, sobre todo en los cruceros y presbiterio, erigidos al mediar el siglo XVIII, por lo que sin duda debieron pertenecer a la modalidad del churrigueresco o barroco estípite, privilegiando la belleza y esplendor de esta parroquia como sucedía en tantas otras parroquias e iglesias de ciudades como Zacatecas, Guanajuato o Taxco; sin embargo, y lamentablemente, aquí todo se perdió.
Justamente por esto, un tlalpujahuence de nacimiento, artista de original sensibilidad y ecléctico temperamento, Joaquín Horta Menchaca, dolido por el despojo y desolación sufridos por el gran templo de su terruño, emprendió a principios ya de este siglo, con el apoyo del párroco de entonces y el entusiasmo del pueblo, la redecoración del templo, de una manera factible dentro de las limitaciones económicas y técnicas de su momento.
Así, hechó mano de la propia tierra y básicamente con barro moldeado cocido y policromado, en monumental ensayo de "gusto popular" ya que se extendió a otros templos y capillas menores de la región que lo solicitaron, en especial el Santuario Guadalupano de la misma Tlalpujahua.
Joaquín Horta Menchaca, este singular decorador, fecha su obra de intervención en 1905, en la clave del arco toral del sotocoro.
Con esto nos quedan, en este templo y otros que le rodean, interiores en que se refugian y hacen inmarcesibles flores de la región sin que dejen de reconocerse principalmente, mirasoles, margaritas, crisantemos, violetas y una variedad múltiple de humildes o hasta imaginadas a las que justamente se añaden toques y chispazos de oro, con su crédito, galanura y garantía de eternidad alegórica espiritual, metal preciado que bien ha sido aquí extraído de la tierra y sabido transmutar, por obra y gracia del arte, en floración minera de piedra y oro.
1600. Se inicia la construcción de algunas capillas como la de Nuestra Señora del Carmen y la de San Lorenzo. Se funda el templo y convento de San Francisco.
1750. Se inicia la construcción de la nueva iglesia parroquial.
1814. En el mes de diciembre es fusilado el vicario de la parroquia de Tlalpujahua, padre Juan Antonio Romero, quien se había incorporado al movimiento Insurgente
1937. Sucede la tragedia donde se destruyen las minas de Dos Estrellas, por la inundación de lodos de los jales de la mina y dejando sepultada la Capilla de Nuestra Señora del Carmen
La parroquia de San Pedro y San Pablo dedicada a la Virgen de El Carmen, monumento barroco del siglo XVIII se construyó en la cima de una pequeña colina y su fachada es de estilo barroco. Es una joya su interior, decorado por el maestro tlalpujaleño Joaquín Orta a principios del siglo XX.
Sabemos que el interior parroquial estuvo enriquecido por grandes retablos dorados, por lo que sin duda debieron pertenecer a la modalidad del churrigueresco o barroco estípite, privilegiando la belleza y esplendor de esta parroquia; sin embargo, y lamentablemente, aquí todo se perdió
Tlalpujahua, Michoacán.
Parroquia de Nuestra Señora del Carmen, Frente a la calle 2 de Abril s/n, Centro. C.P. 61060, Tlalpujahua, Mich.
(711) 158-00-35 y 158-00-28
P. Juan Zamora Molina
Tlalpujahua, Mich.
Rectoría de San Francisco
(711) 158-02-18
P. Francisco Yánez Cano
Tlapujahuilla, Mich.
Parroquia de Nuestra Señora de San Juan, Frente Plaza Principal s/n, C.P. 61062, Tlalpujahuilla, Mich. (Municipio de Tlalpujahua)
(715) 158-00-61
P. Federico Mercado Martínez