por LEANIZ » Jue Ene 05, 2012 4:43 am
Estimado Padre Ignacio: le escribo desde Madrid España desde la Fundación Cari Filii, institución católica formada por seglares españoles que despues de la experiencia personal de peregrinar a Tierra Santa y santuarios marianos, vivir intensamente la JMJ y preocupados por el porvenir de nuestro país y de nuestra vieja Europa, hemos visto la necesidad urgente de profundizar en nuestra fe católica haciendo una geografía de la fe y de la piedad mariana, promover unos premios anuales sobre las Virtudes y grandes valores del ser humano, y difundir el conocimiento y la devoción a la Santísima Virgen María, como modelo de Virtudes para contemplar e imitar (cf. LG cap VIII, III). Es por eso que estoy participando de este curso que Catholic.net nos ha invitado sobre los santuarios marianos. Y me gustaría compartir con usted y todos los participantes una frase de San Luis María Grignon de Monfort, que he leído en el libro de Antonio Royo Marín, Teología de la perfección cristiana, editoria Biblioteca de Autores Cristianos:
" Una de las razones por que tan pocas almas llegan a la plenitud de la edad en Jesucristo es porque María, no está lo bastante formada en sus corazones (...) Quien desea tener el fruto de la vida, Jesucristo, debe tener el árbol de la vida, que es María (...) Cuanto más miréis a María en vuestras oraciones, sufrimientos, acciones, más perfectamente encontraréis a Jesucristo"
(c.f. La Verdadera devoción a la Santísima Virgen)
"Estas palabras nos dan ocasión para examinar el papel importantísimo de la Virgen María en la santificación de las almas. No se trata de una devoción más sino de algo básico y fuandamental en nuestra vida cristiana" (c.f Teología de la perfección cristiana, Pte 1ª, Cap IV, La Virgen y nuestra santificación, Antonio Royo Marín)
Muchas gracias, Gabriela García de Leániz Caprile, Fundación CARI FILII, MADRID ESPAÑA