Estimado en Cristo juanchito:
Por demás, está "de moda" agarrar cualquier pretexto malo para establecer una relación mínima entre las costumbres cristianas y ritos y dioses paganos y decir que "es lo mismo".
Es algo así como si tú vives en una calle que se llama "Colón" y otra persona a la que un tercer quiere relacionar contigo vive en la calle "Rembrandt" y entonces ese tercerro te sale con que tú y la persona que vive en la calle Rembrandt "son lo mismo" o que tú "admiras y quieres ser esa otra persona" y la "prueba" es que escogiste para vivir una calle con el nombre de un personaje famoso.
¿Qué tiene que ver Colón con Rembrandt? Aparte de que los dos son personajes históricos importantes, no mucho más.
¿Qué tendrías que ver tú con alguien que vive en una calle cuyo nombre pudiera tener relación con el nombre de la calle en la que tú vives? Pues, a causa del nombre de las calles, nada, salvo que existe una remota relación en el nombre de las calles en la que viven.
Más o menos asi son las "relaciones" que a cierta gente le gusta encontrar para tratar de descalificar lo que no entiende ni conoce (ter aseguro que esa persona no sabe ni siquiera la que tú sabes respecto a la Iglesia Católica o respecto a la auténtica Babilonia histórica, y no digo que tú sepas mucho, como tú mismo lo has indicado, sino que si tú sabes poco y sabes más que esa persona, pueeeees...
).
O, peor aún, a veces las relaciones son del tipo: ¿tú vives en un calle y esa otra persona también? ¿no es así? ¿ves? ¡son igualitos los dos! Vamos, ¡cómo si fueran las dos únicas personas del universo que viven en una calle!
Tal es el caso, por ejemplo, del día de San Valentín y muchos otros similares. A lo que voy es que a nadie le es oculto que una preocupación humana, digamos, muy básica, es la de encontrar una pareja adecuada para amar y formar una familia. Podrán cambiar los criterios de en qué consiste esa "pareja adecuada" (a alguien que yo quiera mucho, alguien que me resulte atractiva, un hombre que me pueda mantener, alguien que mis padres aprueben, una mujer que pueda criar hijo, alguien de mi grupo étnico, alguien tan excéntrico como yo, alguien que tenga mis mismos valores, etc.) Pero la preocupación fundamental de encontrear la pareja "ideal" y que también lo acepte a uno pues es obvio que ha existido no por siglos, sino por milenios, y seguramente seguirá existiendo. En ese sentido es obvio que cualquier cultura o religión debe tener medios para dar cauce o respuesta a esta preocupación tan generalizada. Y bueno, si quiere uno forzar la relación entre dos culturas o religiones cualquiera diciendo que ambaas tienen alguna forma de ritual o celebración al respecto, pues no es distinto que quere relacionar a dos personas cualquiera por el simple hecho de que ambas habitan en casas o edificios que están en una calle.
Claro, para disfrazar la poca relación que existe entre las cosas que se quiere unir a la fuerza, se trata de "fortalecer" la relación forzando las cosas tanto como es posible: nos salen con cosas como ¿piensa usted que es casualidad que uno viva en la calle Colón y el otro en la calle Rembrndt, siendo que Colón murió en 1506 y Rembrandt nació en 1606 JUSTO 100 años después? Y el "JUSTO" ni es tan justo, porque uno es 20 de mayo y el otro es 15 de julio, pero eso es lo de menos porque de cualquier manera esos 100 años en nada relacionan a un personaje con el otro, ¡ni mucho menos relacionan a las personas que vivan en las calles que tienen sus nombres!
Por ejemplo, para relacionar a San Valentín con el Fauno Luperco de los lupercales romanos, nos salen con tonterías tales como: Luperco era valiente y Valentín viene de valiente, por tanto valentín era Luperco, ¡brillante, incontrovertible e incontestable relación que muestra fuera de toda duda que Valentín y Luperco son el mismo! ¿verdad? como nadie ni nada más ha sido valiente en toda la historia de la humanidad, pues seguritititito son el mismo.
Momento, momento -nos dirán- ¡es que las relaciones no acaban ahí!: los Lupercales se celebraban el 15 de febrero y San Valentín es el 14 de febrero. Si, claro, el único problema del 15 para ser igual que el 14, pues es no ser 14.
Para que te des una idea de lo "sólidas" que son estas "coincidencias" y "relaciones" hay quien también relaciona los Lupercales con San Antonio Abad, poniendo los Lupercales el 15 de enero en vez de febrero, por lo que lo relacionan con el 17 de enero, fiesta de San Antonio Abad y bajo el argumento adicional de que el Fauno Luperco era conocido como el "protector del lobo", y San Antonio Abad es conocido por ser protector de los animales.
¿En qué quedamos entonces? ¿15 de enero o de febrero? (15 que no logra ser ni 14, ni 17, por cierto) ¿valiente cazador entre los lobos o protector de animales?
Como puedes ver, si uno quiere encontra relaciones, las encuentra porque las encuentra.
Y claro que los Lupercales tambvién se relacionan con el origen de los carnavales, los cuales en realidad si podrían tener más que ver con ello que San Valentín o San Antonio Abad.
Y eso fue nada más para tratar de relacionar a San Valentín con la festividad romana, porque la relación de la festividad romana a Babilonia ¡es todavía MUCHO más imaginativa!
Que Dios te bendiga.