Dios les bendiga, amados.
Me gustaria compartir con ustedes este capitulo de mi sexto libro titulado: "En el Taller del Maestro" sobre el tema del pecado original. Su evaluacion de lo que he escrito sera de mucha utilidad para mi y espero que mi aportacion pueda arrojarnos un poco de luz sobre el tema, en lo que Dios me ha concedido comprender acerca de el.
8. El pecado: ¿hederitario o imputado?
Definición de imputado: Adjudicado. Ejemplo: El presidente de un Banco lo representa. Si él toma una decision, se puede decir que el Banco la tomó y todo el Banco se verá afectado. Según esta interpretación; Adán representa a la humanidad entera; y su pecado como si fuera de una forma legal, le es imputado a toda la humanidad. De la misma manera, a la persona que acepta a Cristo como su representante ante Dios, le es imputada o adjudicada la justicia de Cristo.
En la experiencia diaria, así como en el rol de Cristo como mediador, sabemos que hay mucho de cierto en esto de la imputación. Pero parece que hay algo más en lo que al pecado se refiere. ¿Envejecemos o morimos sólo porque Adán nos representó? ¿Dios decidió castigar al representante del acusado también? Cuando van a dictar sentencia en la Corte, y el juez dice: “Que el acusado se ponga de pie”; el acusado y su abogado se ponen de pie, porque el abogado lo representa. Pero el abogado no va a la cárcel con el acusado.
Entonces otros dicen: Es que el pecado se hereda. Y esto suena igualmente injusto o peor aún. Si en ninguno de los dos casos tuvimos la culpa, menos la tiene un bebé que nace enfermo y se muere sin haber cometido ninguna falta.
¿Qué explicación le podemos dar a esto? No es que Dios se desquite con los inocentes ni que al bebé lo condenen por ser descendiente de Adán. La mejor explicación es que:
1- Adán es un molde. Si voy a hacer un bizcocho y el molde se rompió, todos los bizcochos que salgan de ese molde van a salir imperfectos, defectuosos. Lo que se hereda de Adán no es el pecado sino la imperfección que incluye una tendencia o inclinación a pecar. Lo imperfecto se queda corto de alcanzar el cielo porque dicho lugar es uno de perfección por definición. Esa misma imperfección en nuestro cuerpo produce envejecimiento y muerte, no porque Dios sea el verdugo que se desquita con nosotros del pecado de nuestros primeros padres, sino porque venimos del mismo molde que se tornó mortal.
2- Ante este hecho, el repostero tiene dos opciones: El pudo haber desechado el molde en cuanto se rompió, en lugar de haber permitido que bizcochos defectuosos salieran de él. El problema con esta alternativa es: ¿Qué le garantiza a Dios que el próximo Adán no va a hacer lo mismo, que no va a fallar igual que el primero? ¿Cuántos moldes tendrá que hacer Dios? Dios opta por concebir un plan en el que tanto el que falló al comienzo de todo como sus descendientes puedan ser perfeccionados.
3- A los recién nacidos y a todo el que acepta a Cristo le es imputada la justicia de Cristo pero seguimos cargando con la imperfección producto de haber salido del molde original de Adán hasta que recibamos la redención de nuestros cuerpos.