por luchodiuono » Mar Abr 16, 2013 4:06 pm
1. ¿Por qué es tan importante inculcar en los alumnos una adhesión al Sumo Pontífice?
Debemos promover entre los jóvenes la oración por el Vicario de Cristo, atención e interés por sus enseñanzas, la sumisión filial y reverente a sus disposiciones, el apoyo entusiasta y operante a sus iniciativas y el respeto y estima hacia su persona. Estas mismas actitudes han de tener hacia los demás Obispos, como sucesores de los apóstoles y testigos de la verdad divina y católica.
2. Menciona 5 puntos en los que la Iglesia es responsable de la educación de la fe
La educación en la fe es responsabilidad de toda la comunidad cristiana. La iniciación cristiana, en efecto, no deben procurarla solamente los catequistas, los padres, los sacerdotes o los movimientos, sino toda la comunidad de los fieles.
- La Iglesia tiene la misión de anunciar el Evangelio por todo el mundo, siguiendo el mandato de Jesús. Él mismo eligió a los Doce que vivieron con Él -comunión- y los envió a predicar el Reino de Dios -misión-. Desde entonces los cristianos, por pertenecer a la Iglesia, tienen conciencia de esta misma misión, que ni el tiempo ni el espacio pueden limitar, que es una y universal, sin límites ni fronteras; misterio de comunión y misión.
- La Iglesia tiene la misión, no sólo de transmitir la fe sino también, de educar a todos sus hijos en la fe, y esto sólo es posible si se vive la comunión en su seno. Comunión y misión son, pues, la clave de la tarea de formación que realiza la Iglesia en el mundo.
- Cada obispo, en su Iglesia particular, ejercita inmediatamente, en virtud del derecho divino, el deber de enseñar. Por tanto, él es en la diócesis la primera autoridad responsable de la catequesis y de la formación religiosa.
- Los presbíteros corresponde muy directamente la responsabilidad y la misión de la educación en la fe en los diversos ámbitos y niveles de la vida cristiana, pues "como cooperadores que son de los obispos, tienen por deber primero el de anunciar a todos el Evangelio de Dios". Este servicio ha de realizarlo en cualquier circunstancia. La educación cristiana de los fieles en la tarea evangelizadora, rica y compleja, están empeñadas distintas instancias y personas: padres, profesores, catequistas... y, ante todo, los propios educandos. El sacerdote, desde la especificidad de su ministerio, ha de saber impregnar esta acción educadora de un profundo sentido evangélico y eclesial, procurando coordinarla de modo que los diferentes canales educativos se integren y se fecunden mutuamente. En cada uno de los ámbitos de la educación de niños y jóvenes, además de ser instrumento para la formación de las personas que llevan más directamente la acción educativa, el sacerdote tiene unas funciones que le son más propias.
- Algunos cristianos se saben llamados a colaborar de forma muy específica en la tarea de educadores en la fe y consagran a este servicio sus cualidades, su tiempo, su propia vida. Ellos, al responder a esta vocación, fortalecen su vinculación a Jesucristo profeta y maestro y experimentan la alegría de ver cómo en otros se va desarrollando su fe incorporándose a la comunión eclesial. Los educadores cristianos laicos -padres, profesores y catequistas- aportan la originalidad de su carácter secular: por ser protagonistas de forma más inmediata en las actividades de la vida pública, su experiencia resulta iluminadora para los educandos que se preparan para ser transformadores, según el Evangelio, de estas realidades sociales, políticas y económicas.