25. "No cometerás adulterio"

Este curso tiene el objetivo de difundir la catequesis del amor humano, también conocida como Teología del Cuerpo.

En esta segunda parte se toca el adulterio, la concupiscencia, la donación mutua del hombre y a mujer en el matrimonio, la dignidad del cuerpo y del sexo, lo «ético» y lo «erótico» en el amor humano y el respeto al cuerpo.

Fechas:
Este curso consta 40 sesiones que se impartirán todos los martes y sábados a partir del 27 de agosto de 2013 , la última será el 3 enero de 2014

Moderadores: pilar calva, Catholic.net, Margarita Gonzalez, Moderadores Animadores

25. "No cometerás adulterio"

Notapor pilar calva » Lun Ago 26, 2013 11:53 am

25. "No cometerás adulterio"

(23-IV-80/27-IV-80)

1. Recordemos las palabras del sermón de la montaña, a las que hicimos referencia en el presente ciclo de nuestras reflexiones del miércoles: “Habéis oído -dice el Señor- que fue dicho: No adulterarás. Pero yo Os digo que todo el que mira a una mujer deseándola, ya adulteró con ella en su corazón” (Mt 5, 27-28).

El hombre, al que se refiere Jesús aquí, es precisamente el hombre “histórico”, ése cuyo “principio” y “prehistoria teológica” hemos hallado en la precedente serie de análisis. Directamente, se trata del que escucha con sus propios oídos el sermón de la montaña. Pero se trata también de todo otro hombre, situado frente a ese momento de la historia, tanto en el inmenso espacio del pasado, como en el igual amplio del futuro. A este “futuro”, con relación al sermón de la montaña, pertenece también nuestro presente, nuestra contemporaneidad. Este hombre es, en cierto sentido, “cada” hombre, “cada uno” de nosotros.

Lo mismo el hombre del pasado, que el hombre del futuro puede ser el que conoce el mandamiento positivo “no adulterarás” como “contenido de la ley” (cf. Rom 2, 22-23), pero puede ser igualmente el que, según la Carta a los Romanos, tiene este mandamiento solamente “escrito en (su) corazón” (Rom 2, 15) (1). A la luz de las reflexiones desarrolladas precedentemente, se trata del hombre que desde su “principio” ha adquirido un sentido preciso del significado del cuerpo, ya antes de atravesar “los umbrales” de sus experiencias históricas, en el misterio mismo de la creación, dado que emerge de él “como varón y mujer” (Gén 1, 27). Se trata del hombre histórico, que al “principio” de su aventura terrena se encontró “dentro” el conocimiento del bien y del mal, al romper la Alianza con su Creador. Se trata del hombre varón que “conoció (a la mujer) su mujer” y la “conoció” varias veces, y ella “concibió y parió” (cf. Gén 4, 1-2), en conformidad con el designio del Creador, que se remontaba al estado de inocencia originaria (cf. Gén 1, 28; 2, 24).

En su sermón de la montaña, Cristo se dirige, especialmente con las palabras de Mt 5, 27-28, precisamente a ese hombre. Se dirige al hombre de un determinado momento de la historia y, a la vez, a todos los hombres que pertenecen a la misma historia humana. Se dirige, como ya hemos comprobado, al hombre “interior”. Las palabras de Cristo tienen un explícito contenido antropológico; tocan esos significados perennes, por medio de los cuales se constituye la antropología “adecuada”.

Estas palabras, mediante su contenido ético, constituyen simultáneamente esta antropología, y exigen, por decirlo así, que el hombre entre en su plena imagen. El hombre que es “carne”, y que como varón está en relación, a través de su cuerpo y sexo, con la mujer (efectivamente, esto indica también la expresión “no adulterarás”), debe, a la luz de estas palabras de Cristo, encontrarse en su interior, en su “corazón” (2). El “corazón” es esta dimensión de la humanidad, con la que está vinculado directamente el sentido del significado del cuerpo humano, y el orden de este sentido. Se trata aquí, tanto de ese significado que en los análisis precedentes hemos llamado “esponsalicio”, como del que hemos denominado “generador”. Y ¿de orden se trata?

3. Esta parte de nuestras consideraciones debe dar una respuesta precisamente a ésta pregunta, una respuesta que llega no sólo a las razones éticas, sino también a las antropológicas; efectivamente, están en relación recíproca. Por ahora, preliminarmente, es preciso establecer el significado del texto de Mt 5, 27-28, el significado de las expresiones usadas en él y su relación recíproca. El adulterio, al que se refiere directamente el citado mandamiento, significa la infracción de la unidad, mediante la cual el hombre y la mujer, solamente como esposos, pueden unirse tan estrechamente, que vengan a ser “una sola carne” (Gén 2, 24). El hombre comete adulterio, si se une de ese modo con una mujer que no es su esposa. También comete adulterio la mujer, si se une de ese modo con un hombre que no es su marido. Es necesario deducir de esto que “el adulterio en el corazón”, cometido por el hombre cuando “mira a una mujer deseándola”, significa un acto interior bien definido. Se trata de un deseo, en este caso, que el hombre dirige hacia una mujer que no es su esposa, para unirse con ella como si lo fuese, esto es -utilizando una vez más las palabras del Gén 2, 24-, de tal manera que “los dos sean una sola carne” Este deseo, como acto interior, se expresa por medio del sentido de la vista, es decir, con la mirada, como en el caso de David y Betsabé, para servirnos de un ejemplo tomado de la Biblia (cf. 2 Sam 11, 2) (3). La relación del deseo con el sentido de la vista ha sido puesto particularmente de relieve en las palabras de Cristo.

4. Estas palabras no dicen claramente si la mujer -objeto del deseo- es la esposa de otro, o sencillamente la mujer del hombre que la mira de ese modo. Puede ser esposa de otro, o también no casada. Más bien, es necesario intuirlo, basándonos sobre todo en la expresión que define precisamente adulterio lo que el hombre cometió “en su corazón” con la mirada. Es preciso deducir correctamente de esto que una tal mirada de deseo dirigida a la propia esposa no es adulterio “en el corazón”, precisamente porque el correspondiente acto interior del hombre se refiere a la mujer que es su esposa, con la que no puede cometerse el adulterio. Si el acto conyugal como acto exterior, en el que “los dos se unen de modo que vienen a ser una sola carne”, es lícito en la relación del hombre en cuestión con la mujer que es su esposa, análogamente está conforme con la ética también él acto interior en la misma relación.

5. No obstante, ese deseo que indica la expresión acerca de “todo el que mira a una mujer, deseándola”, tiene una propia dimensión bíblica y teológica, que aquí no podemos menos de aclarar. Aun cuando esta dimensión no se manifiesta directamente en esta única expresión concreta de Mt 5, 27-28, sin embargo, está profundamente arraigada en el contexto global, que se refiere a la revelación del cuerpo. Debemos remontarnos a este contexto, a fin de que la apelación de Cristo “al corazón”, al hombre interior, resuene en toda la plenitud de su verdad. La citada enunciación del sermón de la montaña (cf. Mt 5, 27-28) tiene fundamentalmente un carácter indicativo. El que Cristo se dirija directamente al hombre como a aquel que “mira a una mujer, deseándola”, no quiere decir que estas palabras, en su sentido ético, no se refieran también a la mujer. Cristo se expresa así para ilustrar con un ejemplo concreto cómo es preciso comprender “el cumplimiento de la ley”, según el significado que le ha dado Dios-Legislador, y además cómo conviene entender esa “sobreabundancia de la justicia” en el hombre, que observa el sexto mandamiento del Decálogo. Al hablar de este modo, Cristo quiere que no nos detengamos en el ejemplo en sí mismo, sino que penetremos también en el pleno sentido ético y antropológico del enunciado. Si éste tiene un carácter indicativo, significa que, siguiendo sus huellas, podemos llegar a comprender la verdad general sobre el hombre “histórico”, válida también para la teología del cuerpo. Las ulteriores etapas de nuestras reflexiones tendrán la finalidad de acercarnos a comprender esta verdad.

(1) De este modo el contenido de nuestras reflexiones quedaría ubicado en cierto sentido en el terreno de la “ley natural”. Las palabras de la Carta a los Romanos (2, 15) citadas, han sido consideradas siempre, en la Revelación, como fuente de confirmación para la existencia de la ley natural. Así, el concepto de la ley natural adquiere también un significado teológico.

Cf., entre otros, D. Composta, Teología del diritto naturale, status quaestionis, Brescia 1972 (Ed. Civilità), págs. 7-22, 41-43; J. Fuchs, s.j., Lex naturae. Zur Theologie des Naturrechts. Düsseldorf 1955, págs. 22-30; E. Hamel, s.j., Loi naturelle et loi du Christ, Brujas-París 1964 (Desclée de Brouwer), pág. 18; A. Sacchi, “La legge naturale nella Bibbia”, en: La legge naturale. Le relazioni del Convegno dei teologi moralisti dell’ Italia settentrionale (11-13 septiembre 1969), Bolonia 1970 (Ed. Dehoniana), pág. 53; F Böckle, “La ley natural y la ley cristiana”, ib, págs. 214-215; A. Feuillet, “Le fondement de la morale ancienne et chrétienne d’après l’Epitre aux Romains”, Revue Thomiste 78 (1970), págs. 357-356; Th. Herr, Naturrecht aus der kritischen Sicht des Neuen Testaments, Munich 1976 (Schöningh), págs. 155-164.

(2) “The typically Hebraic usage reflected in the New Testament implies an understanding of man as unity of thought, will and feeling. (...) It depicts man as a whole, viewed from his intenionality; the heart as the center of man is thought of as source of will, emotion, thoughts and affections.
This traditional Judaic conception was related by Paul to Hellenistic categories, such as “mind”, “attitude”, “thoughts” and “desires”. Such a coordination between the Judaic and Hellenistic categories is found in Ph 1, 7; 4, 7; Rom 1, 21, 24, where “heart” is thought of as center from which these things flow (R. Jewett. Paul’s Anthoprological Terms. A Study of their Use in Conflict Settings. Leiden 1971 [Brill], pág. 448).
“Das Herz... ist die verborgene, inwendige Mitte und Wurzel des Menschen und damit seiner Welt..., der unergründiche Grund and die lebendige Kraft aller Daseinserfahrung und entscheidung” (H. Schiler, Das Menschenherz nach dem Apostel Paulus, en Lebendiges Zeugnis, 1965, pág. 123).
Cf. también F. Baumgärtel - J. Behm, “Kardia”, en: Theologisches Wörterbuch zum Neuen Testament, II, Stuttgart 1933 (Kohlhammer), págs. 609-616.

(3) Este es quizá el más conocido; pero en la Biblia se pueden encontrar otros ejemplos parecidos (cf. Gén 34, 2; Jue 14, 1; 16, 1).

Pregunta:
¿Qué quiere decir que la afirmación que hace Cristo sobre el adulterio pone de relieve no sólo razones éticas, sino antropológicas?
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor patricio » Lun Sep 02, 2013 10:48 pm

¿Qué quiere decir que la afirmación que hace Cristo sobre el adulterio pone de relieve no sólo razones éticas, sino antropológicas?
Cristo, se dirige al hombre de un determinado momento de la historia y, a la vez, a todos los hombres que pertenecen a la misma historia humana. Se dirige, como ya hemos comprobado, al hombre "interior". Las palabras de Cristo tienen un explícito contenido antropológico; tocan esos significados perennes, por medio de los cuales se constituye la antropología "adecuada".
Estas palabras, mediante su contenido ético, constituyen simultáneamente esta antropología, y exigen, por decirlo así, que el hombre entre en su plena imagen. El hombre que es "carne", y que como varón está en relación, a través de su cuerpo y sexo, con la mujer (efectivamente, esto indica también la expresión "no adulterarás"), debe, a la luz de estas palabras de Cristo, encontrarse en su interior, en su "corazón" (2). El "corazón" es esta dimensión de la humanidad, con la que está vinculado directamente el sentido del significado del cuerpo humano, y el orden de este sentido.
El adulterio, al que se refiere directamente el citado mandamiento, significa la infracción de la unidad, mediante la cual el hombre y la mujer, solamente como esposos, pueden unirse tan estrechamente, que vengan a ser "una sola carne" (Gén 2, 24).
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor Hugo Roberto Rosas » Mar Sep 03, 2013 8:18 am

lo ético y lo antropológico.
Ético, la acción correcta de actuar ante las de mas personas.
Antropología,Ciencia que estudia al hombre en su comportamiento social.
Al unir la dos nos da a entender la pureza que Dios quiere de nosotros; Actuar y comportarnos como Dios nos creo,( la semejanza de El.).
Si tu conoces bien a tu pareja,comprender sus errores y defectos para luego corregirlos;(forma de unirse y ser uno).
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor mari_pily » Mar Sep 03, 2013 9:56 am

¿Qué quiere decir que la afirmación que hace Cristo sobre el adulterio pone en relieve no sólo razones éticas, sino antropológicas?
Quiere decir que el hombre es uno, en cuerpo y corazón y los actos de adulterio cometidos a través de nuestro cuerpo y pensamiento son pecados que dejan impuro nuestro cuerpo y así mismo nuestro corazón ante los ojos de Dios.
Considero que ética y antropológicamente somos uno por fuera y por dentro.
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor lindoro50 » Mar Sep 03, 2013 10:52 am

En el sermón de la montaña, Cristo se dirige al hombre de un determinado momento de la historia y, a la vez, a todos los hombres que pertenecen a la misma historia humana. Se dirige, al hombre "interior" por ello abarca a los de todos los tiempos. Las palabras de Cristo tienen un claro contenido antropológico (análisis físico-social del hombre); tocan esos significados perennes, por medio de los cuales se constituye la antropología "adecuada". Estas palabras, mediante su contenido ético, constituyen simultáneamente esta antropología, y exigen, por decirlo así, que el hombre entre en su plena imagen. El hombre que es "carne", y que como varón está en relación, a través de su cuerpo y sexo, con la mujer (esto indica también la expresión "no adulterarás"), debe, a la luz de estas palabras de Cristo, encontrarse en su interior, en su "corazón". El "corazón" es esta dimensión de la humanidad, con la que está vinculado directamente el sentido del significado del cuerpo humano, y el orden de este sentido.
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor jcuengar » Mar Sep 03, 2013 11:09 am

¿Qué quiere decir que la afirmación que hace Cristo sobre el adulterio pone en relieve no sólo razones éticas, sino antropológicas?
Los dos serán una sola carne.
Éticamente:
1. Por temor de Dios
2. Por designio divino
3. Por cumplimiento de la ley
4. Por el sacramento
5. Por decisión libre
Antropológicamente
1. Por ser creatura
2. Por naturaleza humana
3. Por vocación
4. Por pertenencia a la comunidad
5. Por correspondencia al tú.
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor CasJor » Mar Sep 03, 2013 11:28 am

¿Qué quiere decir que la afirmación que hace Cristo sobre el adulterio pone de relieve no sólo razones éticas, sino antropológicas?

Para poder dar respuesta a la pregunta anterior, debemos en primera instancia hacer un análisis exhaustivo de la ética cristiana del matrimonio, que consecuentemente nos llevará al asunto en cuestión.

La ética cristiana del matrimonio, asume fundamentalmente tres valores básicos en toda relación de pareja. A saber (Proles – descendencia, fides – fidelidad – lealtad, sacramentum – sacramento), los que deben asumirse en su totalidad. Se establece entonces un vínculo fundamental entre el matrimonio como institución (natural – antropológica) y el matrimonio como sacramento (que dirige a los cónyuges a vivir su vocación cristiana y a cumplir la santificación del estado conyugal).

En ese contexto y recordando lo escrito en el Génesis 2, 24, intuimos que la única forma de separación en el establecimiento de una relación de pareja entre hombre y mujer, es el de la propia familia de origen. El carácter sexual del matrimonio, no es el de una simple relación de amistad o una relación ocasional, sino algo más íntimo y de mutuo y profundo conocimiento, un formar “una sola carne” que distingue esencialmente al matrimonio cristiano.

De ahí la importancia de que los esposos realicen de forma plena y humana el verdadero significado de la sexualidad, el empeño en favorecer la realización en la unidad de pareja, reciprocidad de la fidelidad (con la consecuente exclusión del adulterio). La reflexión teológica del matrimonio se manifiesta como el acontecer de un progresivo desvelar las potencialidades implícitas en el modelo original y primario de la unión conyugal en las perspectivas éticas, teológicas y antropológicas del concepto original en la creación.
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor Jeanette Palacios » Mar Sep 03, 2013 11:34 am

¿Qué quiere decir que la afirmación que hace Cristo sobre el adulterio pone de relieve no sólo razones éticas, sino antropológicas?

La afirmacion que hace Cristo sobre el adulterio Si pone de relive ala razon etica y a la antropologia. Por esta razon quiero explicar el significado de las palabras: Razon Etica, Etica, y Antropologia.
La Razon etica : se refiere a la vida moral misma nuestra propia experiencia, valores morales hante determinada circunstancia.
Etica : Se define como la ciencia que se refiere al estudio filosofico de la accion y la conducta humana, considerada en su conformidad o disconformidad con la recta razon ( Razon que se dirige ala verdad).
Antropologia: Es la ciencia que se encarga de estudiar la realidad del ser humano, y analiza como se comporta.
En el Sermon de la Montaña Cristo se refiere ala etica al acto perfecto en cuanto conviene al hombre. La verdad ilumina la inteligencia y el hombre se santifica obedeciendo a la verdad.
Cristo apela al hombre interior lo hace muchas veces y en diversas circunstancias y aparece explicito y elocuente no solo la razon etica si no tambien la antropologica. la que nos aconseja y que se encuentra bien explicita en el texto de MT 5:3,28 que contienen las palabras que Cristo pronuncio en el sermon de la Montaña.
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor elba seminario » Mar Sep 03, 2013 11:53 am

Que quiere decir que la afirmación que hace Cristo sobre el adulterio, pone en relieve no solo las razones éticas sino antropológicas del hombre?

Particularmente recíproca e intrínsecamente las razones están conectadas, por un lado observar las leyes y de otro lado su proceder son resultado de un mismo "ser íntegro", cuerpo y espíritu, material e inmaterial. A través del tiempo el hombre histórico: ese cuyo "principio" y "prehistoria teológica" hemos hallado, el que escucha con sus propios oídos el Sermón de la Montaña y el del presente. A todos los hombres que pertenecen a ésta misma historia, y en él a la dimensión del corazón humano que está vinculado el sentido del significado del cuerpo humano y el orden de éste sentido.
Cristo quiere que profundicemos para poder llegar a comprender la verdad general sobre el hombre histórico.
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor migdaliae » Mar Sep 03, 2013 12:07 pm

La antropología estudia al ser humano, en los distintos aspectos de desarrollo durante los distintos ciclos de vida, desde que nace, crece, se reproduce y muere, combinando en una sola disciplina los enfoques de las ciencias naturales, sociales y humanas. La ética, por su parte, estudia la moral y las obligaciones humanas, es decir, la conducta del hombre ante las normas de comportamemiento consideradas justas.

Desde el principio y a través de la historia, el hombre recibe como parte de la Ley el mandato de "No adulterarás", conforme a lo que su Creador establece. El adulterio significaba faltar al mandato de que hombre y mujer se unieran como esposos, tan estrechamente que se convierten en una sola carne. Es decir, significaba lograr esa unión con otra persona que no fuera su esposo(a).

Con la afirmación de Cristo sobre el adulterio, se unen ambos aspectos: el ético y el antropológico. No sólo se establece el cumplimiento del mandato "No cometerás adulterio" , sino que Jesús amplía la visión de todo lo que envuelve el faltar a él. Además del acto físico, se apela al "hombre interior", a la moral, ya que como él expresa, también con el pensamiento y el deseo (adulterio del corazón) somos capaces de faltar a este mandamiento. Su mensaje está dirigido al hombre (y la mujer) de esa época que lo escuchaba y siguiendo vigente para el hombre de nuestra época.
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor Titica » Mar Sep 03, 2013 12:29 pm

Cristo se dirige en Mt. 5,27-28 al hombre de un determinado momento de la historia y tambien a todos los hombres que pertenecen a la misma historia humana.
Esas palabras de Cristo tienen un explicito contenido antropologico., pero tambien tiene su contenido etico., asi simultaneamente constituyen la antropologia, para que el hombre entre en su plena imagen.
El hombre que es "carne" y como varon esta en relacion por medio de su cuerpo y sexo con la mujer. Por eso, Cristo usa la expresion "no adulteraras". Lo que Cristo quiere hacer llegar al hombre es encuentro en su interior. No solo adultera fisicamente el que comete un acto que no le es licito por el hecho de que se debe a una sola mujer o viceversa a un hombre, sino el que desea a una mujer o a un hombre o mira con deseo carnal en su corazon tambien falta y adultera.
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor MA SOCORRO A REYES L » Mar Sep 03, 2013 1:06 pm

Cristo se dirige en Mt. 5,27-28 al hombre de un determinado momento de la historia y tambien a todos los hombres que pertenecen a la misma historia humana en su contenido antropológico y ético. El hombre que desde su “principio” ha adquirido un sentido preciso del significado del cuerpo, ya antes de atravesar “los umbrales” de sus experiencias históricas, en el misterio mismo de la creación, dado que emerge de él “como varón y mujer” (Gén 1, 27). En su sermón de la montaña, Cristo se dirige, especialmente con las palabras de Mt 5, 27-28, precisamente a ese hombre. Se dirige al hombre de un determinado momento de la historia y, a la vez, a todos los hombres que pertenecen a la misma historia humana. Se dirige, al hombre “interior”, las palabras de Cristo tienen un explícito contenido antropológico; tocan esos significados perennes, por medio de los cuales se constituye la antropología “adecuada”. El “corazón” es esta dimensión de la humanidad, con la que está vinculado directamente el sentido del significado del cuerpo humano, y el orden de este sentido. El hombre o mujer cometen adulterio, si se unen de ese modo con un hombre o mujer que no es su esposo (a). La relación del deseo con el sentido de la vista ha sido puesto particularmente de relieve en las palabras de Cristo, en la expresión que define precisamente adulterio lo que el hombre cometió “en su corazón” con la mirada, la revelación del cuerpo, la apelación de Cristo “al corazón”, al hombre interior.
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor Maria 2 » Mar Sep 03, 2013 3:33 pm

¿Qué quiere decir que la afirmación que hace Cristo sobre el adulterio pone de relieve no sólo razones éticas, sino antropológicas?

Cristo, se dirige al hombre de ayer y al hombre de ahora, se dirige concretamente al hombre "interior". Los dos serán una sola carne; éticamente: Por temor de Dios, por designio divino, por cumplimiento de la ley, por el sacramento y por decisión libre, y antropológicamente: por ser creatura, por naturaleza humana, por vocación, por pertenencia a la comunidad y por correspondencia al tú.

COMENTARIO: Quiere decir que el hombre es uno, en cuerpo y corazón y los actos de adulterio cometidos en cuerpo y/o pensamiento son pecados que nos dejan impuros ante los ojos de Dios. Considero que ética y antropológicamente somos uno por fuera y por dentro.

Un abrazo y hasta pronto.
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor virginia castro » Mar Sep 03, 2013 4:28 pm

Virginia Castro # 25

Que quiere decir que la afirmacion que hace Cristo sobre el adulterio pone de relieve no solo razones eticas, sino antropologicas?

En el Sermon de la Montana, Cristo se dirige especialmente con la palabras de Mateo 5, 27-28 a el hombre, de un determinado momento de historia pero tambien a todos los hombres de todos los tiempos en la historia de la humanidad; y sus palabras contenidas eticamente constituyen la antropologia del hombre en su imagen "carnal" con los deseos de su cuerpo y sexo con la mujer y en esto va el mensaje de "no adulteraras", tanto para el hombre como para la mujer tambien.
Como nos dice que debemos ser una sola carne; ya que si nuestro ojo ve y desea a la mujer o hombre, aun estando casados, se comete pecado de adulterio, pues del ojo pasa al Corazon y luego este a la accion que aunque no sea en persona, en su Corazon esta el deseo y se llevo a cabo mentalmente y muchas veces se lleva a cabo tambien como en el caso de el Rey David y Betsabe 2Sam 11,2. Es la ley natural del ser humano, cuidado con nuestros propios deseos carnales pues si no se controlan nos haran caer en pecado
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor irmag77 » Mar Sep 03, 2013 5:20 pm

Pregunta:
¿Qué quiere decir que la afirmación que hace Cristo sobre el adulterio pone de relieve no sólo razones éticas, sino antropológicas?

Porque el Adulterio, debe verse como un acto que Dios no desea en el hombre, pero no solo en la parte ética, en la que puede mencionarse su deseo interior (como hombre específico) que puede o no desencadenar un acto físico (puesto que puede quedarse solo como un deseo o intención), si no que también desea que lo veamos como un acto reprochable dentro de la sociedad (en todos los hombres). Definitivamente esto se ha ido perdiendo de vista en nuestros tiempos, donde no solo el divorcio es visto como normal e incluso necesario en la mayoría de las separaciones, sino que se espera que concluido el divorcio, se busque una nueva relación, la sociedad incluso lo promueve.

De ahí la importancia de retomar la enseñanza de Nuestro Señor pues los actos de adulterio vistos de forma ética, impactan directamente a toda la sociedad (antropológicamente).

Saludos y bendiciones :D
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor Rutilo De Los Santos » Mar Sep 03, 2013 6:51 pm

Cristo se expresa así para ilustrar con un ejemplo concreto como es preciso comprender el cumplimiento de la Ley, según el significado que le ha dado Dios Legislador, y además como conviene entender esa sobreabundancia de la Justicia en el hombre, que observa el sexto mandamiento del decálogo . Al hablar de este modo, Cristo quiere que no nos detengamos en el ejemplo en sí mismo, sino que penetremos también el pleno sentido ético y antropológico del enunciado . Si este tiene un carácter indicativo , significa que siguiendo sus huellas, podemos llegar a comprender la verdad general sobre el hombre histórico .
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor matrapaga » Mar Sep 03, 2013 7:10 pm

¿Qué quiere decir que la afirmación que hace Cristo sobre el adulterio pone en relieve no sólo razones éticas, sino antropológicas?
Quiere decir que Cristo en el sermón de la montaña,no solo da razones en cuanto a que el acto esté mal, sino tambien en cuanto a la naturaleza humana del hombre que fue creado a imagen y semejanza de Dios, y que Dios lo creó con un cuerpo y un alma y como "hombre" humanidad esto aplica para todos los hombres y mujeres de todos los tiempos, pues se refiere al hombre interior.
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor garu » Mar Sep 03, 2013 8:13 pm

Porque nos muestra al hombre en general (hombre y mujer), su verdad. Nos permite entrever, conocer, sus deseos e intenciones, formando parte de sí mismo, y no se limita al ejercicio físico de una acción.
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor NELSON » Mié Sep 04, 2013 8:27 am

¿Qué quiere decir que la afirmación que hace cristo sobre el adulterio pone de relieve no sólo razones éticas, sino antropológicas?
Las palabras de Cristo tienen un explícito contenido antropológico; tocan esos significados perennes, por medio de los cuales se constituye la antropología “adecuada”. Estas palabras, mediante su contenido ético, constituyen simultáneamente esta antropología, y exigen, por decirlo así, que el hombre entre en su plena imagen. El hombre que es “carne”, y que como varón está en relación, a través de su cuerpo y sexo, con la mujer (efectivamente, esto indica también la expresión “no adulterarás”), debe, a la luz de estas palabras de Cristo, encontrarse en su interior, en su “corazón” (2). El “corazón” es esta dimensión de la humanidad, con la que está vinculado directamente el sentido del significado del cuerpo humano, y el orden de este sentido.
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Re: 25. "No cometerás adulterio"

Notapor braugel » Mié Sep 04, 2013 8:58 pm

¿Qué quiere decir que la afirmación que hace Cristo sobre el adulterio pone en relieve no sólo razones éticas, sino antropológicas?

En su sermón de la montaña, Cristo se dirige, especialmente con las palabras de Mt 5, 27-28, precisamente a ese hombre. Se dirige al hombre de un determinado momento de la historia y, a la vez, a todos los hombres que pertenecen a la misma historia humana. Se dirige, como ya hemos comprobado, al hombre “interior”. Las palabras de Cristo tienen un explícito contenido antropológico; tocan esos significados perennes, por medio de los cuales se constituye la antropología “adecuada”. Estas palabras, mediante su contenido ético, constituyen simultáneamente esta antropología, y exigen, por decirlo así, que el hombre entre en su plena imagen. El hombre que es “carne”, y que como varón está en relación, a través de su cuerpo y sexo, con la mujer (efectivamente, esto indica también la expresión “no adulterarás”), debe, a la luz de estas palabras de Cristo, encontrarse en su interior, en su “corazón” (2). El ”corazón” es esta dimensión de la humanidad, con la que está vinculado directamente el sentido del significado del cuerpo humano, y el orden de este sentido. Se trata aquí, tanto de ese significado que en los análisis precedentes hemos llamado “esponsalicio”, como del que hemos denominado “generador”. Y ¿de orden se trata?
braugel
 
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