por claudia corchado » Lun Dic 16, 2013 2:57 pm
Pregunta:
Explica la relación que tiene los llamamientos que hacen los profetas en el Antiguo Testamento al pueblo de Israel, para mejor comprender el alcance de lo que son las palabras de Cristo en el Sermón de la Montaña con respecto a la sexualidad humana cuando habla de no cometer adulterio.
La historia del Antiguo Testamento hace ver que tanto la vida del pueblo, unido a Dios-Jahvé por una especial alianza, como la vida de cada uno de los hombres, se aparta frecuentemente de ese mandamiento, de ese alianza.
Cuando Cristo, en el sermón de la montaña, dice: “Habéis oído que fue dicho: no adulterarás” (Mt 5, 27), ve la necesidad de dar el sentido ético esencial del mandamiento “no cometer adulterio”. En el sermón de la montaña, Cristo desvela nuevamente ese sentido, superando sus restricciones tradicionales y legales. Jesús quiere reconstruir en la conciencia de sus oyentes el significado ético propio de este mandamiento
Además de la interpretación procedente de la tradición, el Antiguo Testamento ofrece todavía otra tradición para comprender el mandamiento “no cometer adulterio”. Y es la tradición de los Profetas. Estos, refiriéndose al “adulterio”, querían recordar “a Israel y a Judá” que su pecado más grande era el abandono del único y verdadero Dios en favor del culto a los diversos ídolos, que el pueblo elegido, en contacto con los otros pueblos, había hecho propios fácilmente y de modo exagerado.
Es característica propia del lenguaje de los Profetas más bien la analogía con el adulterio que el adulterio mismo; sin embargo, tal analogía sirve para comprender también el mandamiento “no cometer adulterio” y la correspondiente interpretación, cuya carencia se advierte en los documentos legislativos. En los oráculos de los Profetas, y especialmente de Isaías, Oseas y Ezequiel, el Dios de la Alianza-Jahvé es representado frecuentemente como Esposo, y el amor con que se ha unido a Israel puede y debe identificarse con el amor esponsal de los cónyuges. Y he aquí que Israel, a causa de su idolatría y del abandono del Dios-Esposo, comete para con El una traición que se puede comparar con la de la mujer respecto al marido: comete, precisamente, “adulterio”.
Saludos a todos y que DIOS nos ayude a permanecer en el curso.