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StFollower escribió:Algun documento o algo que pueda leer?
Gracias!
otsugua_raséc escribió:¿Como se le habla a la gente de las inexistentes energias positivas o negativas?
¡Bendiciones!
otsugua_raséc escribió:¿Como se le habla a la gente de las inexistentes energias positivas o negativas?
¡Bendiciones!
StFollower escribió:Hace poco estube hablando con alguien que cree que "Dios" es la Energia.
!
Amanda79 escribió:StFollower escribió:Hace poco estube hablando con alguien que cree que "Dios" es la Energia.
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Ya puestos preguntale por los miriclodianos.
StFollower escribió:Hace poco estube hablando con alguien que cree que "Dios" es la Energia.
Cual es la opinion de la Iglesia sobre esto y donde me documento para un mejor entendimiento.
Gracias!
eduarod escribió:Estimado en Cristo StFollower:
La energía es parte del mundo material, de hecho es intercambiable con la materia según la famosa relación:
E=m*c^2
En toda reacción nuclear ocurre un nivel de conversión entre masa y energía.
Decir que Dios es la energía, por tanto, es exactamente equivalente a decir que Dios es la materia. Lo que obviamente no es el caso.
Dios no es materia ni energía, Dios es Espíritu.
Que Dios te bendiga.
AntiAcuario escribió:Solo un dato curioso...TODA ENERGIA ES CREADA...o sea que ese dios energia es creado por algo...entonces no es dios...me explico?
Pero la hora se acerca, y ya ha llegado, en que los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad, porque esos son los adoradores que quiere el Padre.
Dios es espíritu, y los que lo adoran deben hacerlo en espíritu y en verdad».
San Juan 4, 23-24
eduarod escribió:Estimado en Cristo Andariego:
Aún dentro de la física no es fácil definir lo que es la energía. La definición más común es que se trata de la capacidad de realizar un trabajo.
Y en realidad, cuando usamos ese término fuera de su contexto propio, que es precisamente el de la física, lo usamos por analogía con las manifestaciones físicas que asociamos con la energía.
Por ejemplo, si decimos que en un grupo de gente se percibe "mucha energía", es porque podemos notar en ese grupo ciertas características que nos hacen pensar que esas personas están dispuestas y son capaces de realizar muchas cosas.
Igualmente en el caso de la escultura que mencionas, si bien es obvio que la escultura en sí misma no va a hacer nada, pues no es sino un pedazo inerte de material, de lo que hablamos NO ES del material mismo, sino de lo que representa, y representa a una persona determinada a hacer algo, tú mismo lo dices: Goliath está presente de forma implícita, está claro que la postura, la expresión, etc. representa a David determinado a combatir con él y en la postura de lanzar la piedra que le daría la victoria. En el fondo la analogía nos remite a lo mismo: a que David se muestra como plenamente capaz de realizar el trabajo que se ha propuesto.
Igualmente, en la naturaleza vemos manifestaciones impresionantes de energía que no necesariamente logramos asociar de manera directa e inmediata a un trabajo útil: erupciones volcánicas, tornados, huracanes, o, más comúnmente, los rayos que se producen en tormentas convencionales. Estas manifestaciones simplemente nos impresionan por su poder que se muestra mucho mayor a nosotros mismos. Para ser más claros: si bien no les logramos ver utilidad inmediata, nos queda MUY claro el trabajo que estas manifestaciones podrían hacer en nuestra contra en caso de que nos llegaramos a encontrar o interponer en su camino, y, ante tal poder, en el pasado hemos soñado con la fuerza y poder que tendría quien pudiese controlar semejantes manifestaciones. Por eso, por ejemplo, se atribuía en la mitología el control de los rayos a un dios poderoso. Hoy en día, sin embargo, nuestros sueños puede ya comenzar a aspirar en convertir en realidad el control y aprovechamiento de algunas de estas manifestaciones para realizar trabajos a nuestro servicio. Simplemente el poder convertir la misma fuerza del viento que genera los tornados y huracanes (aunque, por el momento, en manifestaciones mucho más moderadas que esas, claro está) a través de generadores eólicos que transforman esa energía en energía eléctrica que a su vez podemos aprovechar en motores y equipos electrónicos, es ya un primer paso en esa dirección.
Es en buena medida esos primeros pasos en la dirección de controlar esas monstruosas fuerzas lo que nos permite soñar en el día en que seremos plenamente capaces de controlarlas y aprovecharlas, y entonces, en una visión pueril (infantil) de la divinidad, sentirnos nosotros mismos como esos dioses de nuestras mitologías, y, por consecuencia, tan auto-suficientes que pensamos que podemos prescindir incluso del Verdadero Dios en nuestras vidas.
Pero en ello se nos olvida que nuestros dioses mitológicos y nuestros poderes actuales pueden tan solo asprirar a controlar lo que yá está, lo que de algún modo ya era, o ya existía, y a lo que simplemente se le da una nueva forma. Si nos fijamos en la mayor parte de los mitos antiguos de la creación, casi siempre se habla de algún dios que "tomó" algo y con eso "hizo". Dificilmente encontramos algo equiparable al "Entonces Dios dijo: «Que exista la luz». Y la luz existió." (Génesis 1, 3) que nos transmite el Génesis.
La idea del Génesis no es de mero control y manipulación de lo que existe. Sino la idea que transmite es la de la creación ex-nihilo, es decir, participar la existencia a partir de la nada. NO se trata de una mera transformación, sino de creación propiamente dicha.
Ahí podría pensarse ¿pero qué entonces no sería para Dios particularmente apto este concepto de la "capacidad de realizar un trabajo"? ¿no es acaso Dios el Ser que por excelencia puede realizar los mayores trabajos?
Y, sin embargo, la filosofía más elemental nos hace encontrar poderosas razones para responder negativamente.
Puesto que "capacidad para realizar un trabajo", de suyo nos transmite la noción (filosófica, NO física) de potencia. Potencia en filosofía es algo que puede ser, pero que aún no es. Y Dios, por el contrario, es ACTO puro. Es decir, en Dios NO HAY POTENCIA. Dios NO es ni se Revela como "El que PUEDE Ser", sino se Revela como "YO SOY". Por consiguiente, la noción de energía, a esta luz, se muestra particularmente contraria y poco apta para referirse a Dios.
Entendámonos para no incurrir en confusiones innecesarias: la misma Escritura en muchos momentos y formas usa expresiones relacionadas con la energía para manifestar la acción de Dios. Asi, tenemos que, para el profeta, Dios NO está en vientos huracanados, pero SI en una brisa. Tenemos también que está en una columna de fuego para detener los carros de fuego egipcios. Tenemos el soplo (viento) que da la vida, o que abre y separa las aguas del mar para su pueblo. Tenemos una Voz potente, justamente como un trueno, que anuncia al mundo que Jesús es su Hijo muy Amado. Tenemos la Luz (que por excelencia es una manifestación de energía en forma de ondas electromagnéticas) que disipa las tinieblas y que Ilumina a los hombres.
En fin, sería ocioso negar que en la Revelación Dios, consciente de nuestra forma de percibir las cosas, no se asocia Él mismo a manifestaciones de energía para ayudarnos a percibir su Grandeza, lo mucho que nos Ama y lo mucho que nos puede ayudar. Pero para poner en su justo lugar esas analogías, comencemos por recordar que esa Voz como un trueno es justamente eso ¡una Voz! Estamos plenamente entonces en el terreno de la antropomorfización (atribuir a Dios características humanas) y la analogía. La Escritura habla abundantemente de que los hombres (o Israel) "hicieron lo que era malo a los ojos del Señor" ¿y significa esto que debamos pensar entonces que Dios tiene un par de ojos físicos como los tenemos nosotros y muchos otros animales? Por supuesto que no. Entendemos que eso lo que realmente quiere decir es que Dios "ve" nuestras acciones, es decir, que las conoce en toda su profundidad. Pero NO que las vea con unos ojos físicos desde un nubecita en el Cielo con una graaaaan lupa con visión nocturna incluida que le permita detectar hasta el más ínfimo detalle de día o de noche.
De la misma manera, cuando en la Revelación y en la Escritura que la transmite Dios se muestra a Sí mismo como una manifestación de energía, debemos entender que eso no es sino una ANALOGÍA adaptada a nuestra percepción para ayudarnos a comprender lo que, de suyo, se encuentra muy alejado de nuestro entendimiento. Pero no que Dios pretenda que REALMENTE acabemos percibiéndole como energía, justo como no pretende que acabemos pensando que tiene ojos y brazos físicos.
Y es por esto último que la misma Revelación nos va ayudando a descorrer esas cortinas y a profundizar cada vez más en el sentido auténtico de los Misterios de Dios. Por eso Jesús ya no nos llama siervos, sino amigos, y por eso es que Él mismo anuncia que:Pero la hora se acerca, y ya ha llegado, en que los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad, porque esos son los adoradores que quiere el Padre.
Dios es espíritu, y los que lo adoran deben hacerlo en espíritu y en verdad».
San Juan 4, 23-24
Jesús, pues, nos invita Él mismo a superar ese terreno de la analogía, y adorar al Padre, que es espíritu (Y NO materia ni energía) en espíritu y en verdad.
Resumiendo, es posible en términos analógicos referirse a Dios comparándole con alguna manifestación de energía, pero debemos hacerlo de tal manera que sea claro que se trata de una mera analogía, tan alejada de la realidad física de la energía, como entendemos que es imposible realmente estrechar la mano del brazo de Dios Padre; porque NO ES filosófica ni teológicamente correcto relacionar o describir formalmente a Dios como energía; ni es a quedarse en ese mero terreno de la analogía a lo que aspira nuestra Fé.
Saludos y bendiciones
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