Miles Dei ha dicho:
Pues que yo sepa, esencia y naturaleza son la misma cosa.
Según la RAE la esencia es "Aquello que constituye la naturaleza de las cosas, lo permanente e invariable de ellas." y la naturaleza es "Esencia y propiedad característica de cada ser."
Y según la filosofía de toda la vida usada por los cristianos, la naturaleza es la esencia en cuanto principio de operaciónes.
Por tanto esencia y naturaleza del matrimonio son una misma cosa, a no ser que estemos cambiando la naturaleza o esencia del matrimonio según antojo.
Paso a detallar:
1- Si su DRAE es posterior al de 1974, no es aceptado por mi cosmovisión. Tenemos un promer problema en la definición de los términos gramaticalmente definidos. Explico: hasta 1974 se respondía en las definiciones al Derecho Natural y a los principios de la definición indicados por la Lógica. Ediciones posteriores han diluído esto hasta anularlo. Pero a los efectos de poder tener una misma terminología, aceptaré la que Ud trae a colación, sea cual fuere, respondiendo o no a la definición del DRAE de 1974.
2- Misión del filósofo es distinguir. Quien no distingue lo distinguible, es a causa de ignorancia, cuestión que el sabio reconoce y acepta, y que el necio rechaza. Es decir, para un neófito, Mozart y Vivaldi son idénticos, puede Ud hacerle escuchar cuantos conciertos desee de la Primavera de Vivaldi junto a cualquier pieza de Mozart, y el sujeto no podrá distinguirlos ni afirmar cuál es el autor de cada obra: no distingue por ignorancia. Ilustrado acerca de las diferencias, las aceptará por lógica (o las rechazará por necedad).
3- Si bien la cuestión de la esencia, la naturaleza y la espiritualidad corresponderían abordarse en el foro de Filosofía, considero que una breve referencia filosófica es necesaria en este tema, donde estamos abordando la cuestión de la Autoridad, el Amor y la obediencia. De esto está dependiendo la respuesta, y por ello creo procedente una explicación.
4- A la pregunta de Balvaram: el tema no es el varón y la mujer, sino la autoridad y el modo en que cada cual (varón o mujer) la ejercen o son objeto de ella. La autoridad donde mejor se percibe su origen y desarrollo, es la autoridad en la familia. De allí que naturalmente salga este tema. Pero aclarando que hablamos de la Autoridad en todo su sentido: vale tanto para la familia, para la política o para la Iglesia (donde además existe el voto de obediencia).
5- Vuelvo ahora a lo planteado por Miles, quien afirma:
Según la RAE la esencia es "Aquello que constituye la naturaleza de las cosas, lo permanente e invariable de ellas." y la naturaleza es "Esencia y propiedad característica de cada ser."
Inicialmente, podemos preguntar: "si son lo mismo, ¿por qué tienen dos palabras diversas? Y otra cosa más: ¿por qué tiene distintas palabras explicando lo mismo?" Respuesta: porque son cosas diversas.
Daremos un ejemplo: la esencia de la persona humana es ser un animal racional (en el sentido de poseer un alma espiritual). Ahora bien ¿qué significa esto? Que esencialmente un varón siempre será un varon, dado que siempre será un animal espiritual (para que quede más clara la esencia lo expreso de este modo). El varón tendrá una biología y una psicología viril, así como una espiritualidad acorde. ¿Y la mujer? Aun compartiendo la misma esencia, de donde proviene la igualdad entre ambos, tendrá una biología y una psicología femenina, así como una espiritualidad acorde. Ambos, varones y mujeres, compartimos la misma esencia, pero somos distintos. A esa distinción, llamamos naturaleza, ya que es la esencia y propiedad característica de cada ser, que mejor expresado sería: la naturaleza es la esencia operando. La igual dignidad de ambos proviene de la igualdad en la esencia, pero en la naturaleza hay diferencias: no es lo mismo la naturaleza del varón que la de mujer (que esencialmente son "hombre" en el sentido de la inicial definición).
Ahora bien, podemos definir al varón y la mujer, en concordancia con sus dos esencias diversas, con dos naturalezas también diversas que corresponden a la respectiva esencia.
Y ahora viene el supuesto de una hipótesis sobre temas de actualidad que a Aristóteles jamás pudieron habérsele cruzado por la mente como realidades, ya que lo máximo a lo que podía aspirar era a una literatura de "ciencia ficción" de su época (como los ovnis modernos, por ejemplo), a lo cual llamaban "mitos". Veamos el ejemplo: un varón lo es ya desde su concepción y nace varón, con biología, psicología y espiritualidad de varón, pero alguien puede realizarle una operación para que aparezca como una mujer, colocarle hormonas femeninas para que aparente el desarrollo de una mujer, educarlo como una mujer, darle modales de una mujer, e incluso que se arregle, pinte y vista como mujer ¿Acaso habrá cambiado su esencia de varón, tras haberse realizado todo eso? Respuesta: no. El alma viril siempre estará por su psicología, y el cuerpo siempre responderá a movimientos viriles debido a su biología, y la espiritualidad será dañada porque jamás podrá asumir una espiritualidad femenina por carecer de semejante espíritu. Por ello, a la homosexualidad se la llama "contra natura", porque atenta contra la naturaleza. Si atentara contra la esencia, directamente habría desaparecido, se habría extinguido. Es decir, un ser que tiene una esencia, puede ser desnaturalizado, y tal desnaturalización obra exclusivamente en la órbita de su naturaleza, pero no de su esencia.
Veamos esto aplicado a la Liturgia, para tener un ejemplo de un ámbito completamente diverso: La Misa tiene una esencia, que opera en diversos Ritos que la Iglesia ha aprobado en la Tradición. Que haya un Ofertorio, la Liturgia de la Palabra y que se pronuncien las palabras para que haya Transubstanciación y la Comunión se distribuya (no soy liturgista, aclaro, pero trato de describir las partes más básicas de la Misa), el hecho de que todo ello se realice, responderá a la esencia de la Misa. Pero eso no significa que no pueda ser desnaturalizada. ¿Cómo es posible desnaturalizar una Misa? La respuesta es muy simple: igual que el ejemplo anterior en que el Ente (esencia y Ser) en su operación, en su acto de ser, obra de modo opuesto en orden a la aniquilación de su mismo ser. El ejemplo concreto lo dejo librado a su criterio.
El ejemplo final, proviene de la biología. La ciencia indica que existen modificaciones en las especies, pero no una "evolución" en las mismas, lo cual tiene una explicación filosófica. Supongamos hipotéticamente que alguien dijera que se produjo un salto del ratón al murciélago: entonces el hijo de un ratón dejó de ser ratón (no le cabe la definición de ratón) porque ese hijo del ratón en realidad es un murciélago (que no comparte la esencia del ratón), y por tanto tiene una esencia distinta del ratón. Dado que ese ser murciélago es un murciélago y no un ratón, se trata no de una "evolución", sino de dos esencias diversas que señalan dos seres diversos. La naturaleza del ratón no es la naturaleza del murciélago.
Vamos a otro caso, que es precisamente el que nos atañe: la autoridad. En el caso del matrimonio, el cual tiene su esencia: "consorcio de un hombre y una mujer, consorcio de toda la vida, comunicación del Derecho Divino y humano". Ahora bien: en esta definición entran el matrimonio de Adán y Eva, el matrimonio de Job, la Sagrada Familia, el matrimonio Quattrocchi (Luigi y María Corsini Beltrame Quattrocchi), así como también "la familia Ingalls", "los locos Adams" o "la familia Simpson"... Ahora bien: en este caso, cuando la esencia es cambiada ya no se está hablando de Matrimonio, sino de otra cosa (es decir, hablar de "matrimonio homosexual" implica un cambio en la esencia). Pero aun así (descartada la unión antinatural), los Adams o los Simpson son desfiguraciones de la naturaleza, son desvíos de la naturaleza que responden a un desorden que indica la autodemolición del ser.
Hay costumbres que no favorecen la santidad del matrimonio, porque responden a una desnaturalización del mismo. A mayor grado de desnaturalización, mayores dificultades se hallarán para lograr la santidad. Y precisamente de eso se trata. La Felicidad sólo puede hallarse en la santidad, pero la santidad no puede contradecir a la naturaleza (que expresa la indestructible esencia, que es dada directamente por Dios como cifra de Eternidad que Dios mismo ha puesto en las cosas).
Resulta imposible ir contra la esencia de un ser. Lo que es posible, es atentar contra su naturaleza, desnaturalizarlo.
La Autoridad, sin obediencia no es Autoridad, y sin Amor no es católica. No es Autoridad quien no manda, quien no tiene quién le obedezca, ni quien manda mal.
Y según la filosofía de toda la vida usada por los cristianos, la naturaleza es la esencia en cuanto principio de operaciónes.
Efectivamente, y es lo que acabo de expresar.
Por tanto esencia y naturaleza del matrimonio son una misma cosa, a no ser que estemos cambiando la naturaleza o esencia del matrimonio según antojo.
La conclusión del anterior párrafo transcripto es errónea. Esencia y naturaleza del matrimonio no son una misma cosa. Cambiar la naturaleza es desnaturalizar, y por tanto, en materia espiritual es un pecado, y en materia moral puede ser un vicio o incluso un delito. Aplíquese lo dicho al ámbito que corresponda.