Estimado en Cristo juanjose40:
Quizá lo primero que debes saber o recordar es la frase de la Escritura:
El dirigió durante su vida terreno súplicas y plegarias, con fuertes gritos y lágrimas, a aquel que podía salvarlo de la muerte, y fue escuchado por su humilde sumisión.
Y, aunque era Hijo de Dios, aprendió por medio de sus propios sufrimientos qué significa obedecer.
De este modo, él alcanzó la perfección y llegó a ser causa de salvación eterna para todos los que le obedecen,
Hebreos 5, 7-9
Nota que Cristo, siendo el mismísimo Hijo de Dios, Pidió ser librado de la muerte, y FUE ESCUCHADO, pero, aún así, no se libró de la muerte, y Él mismo tuvo que aprender la obediencia por medio del sufrimiento.
Vamos, el punto es que no esperemos que si ni el Hijo de Dios fue librado del sufrimiento a pesar de su oración perfecta, el problema sea que nuestra oración sea imperfecta y por eso no nos alcanza lo que nos gustaría tener.
Dios ciertamente te Escucha y se Compadece de ti, como en su momento se Compadeció de Su Unigénito. Pero eso no quiere decir que necesariamente serás librado. Y si, en efecto, esto es porque no necesariamente es lo mejor; pero no pienses que eso significa que de suyo sea bueno que estés enfermo o padeciendo algo; sino significa que, igual que Cristo, junto con Él y por medio de Él, puedes TRANSFORMAR esos sufrimientos tuyos en motivo de perfección para ti, y SALVACIÓN para todos los que quieres y te rodean.
Recuerda también las Bienaventuranzas y llénate de Esperanza.
Que Dios te bendiga.