Martin comenta de este documento:
Musicam Sacram 63
En el culto divino se pueden admitir otros instrumentos, a juicio y con el
consentimiento de la autoridad eclesiástica territorial competente, siempre que
sean aptos o puedan adaptarse al uso sagrado..
Es un párrafo complejo. Deja a los Sres Obispos, y a las comisiones regionales, diocesanas, parroquiales de liturgia y música sagrada la potestad para decidir sobre la inclusión de instrumentos distintos al Órgano tubular. Sin embargo encuentro lagunas serias y enormes riesgos en la situación:
1) El documento habla en el contexto de 1967. Era común la existencia de tales comisiones y de Obispos formados en la sana Tradición de la Iglesia. La figura del cantor y del organista de Iglesia era distinta.
2)Hoy en día:
- tenemos ya varias generaciones de Sacerdotes de los cuales algunos han sido elegidos Obispos, formados en Seminarios donde hubo insuficiente, escasa o nula formación litúrgico-musical, ¿Quién garantiza su respeto a la Tradición y sano discernimiento para incluir otros instrumentos en la liturgia?
- Las Escuelas de Música Sagrada son escasas. Sus egresados no encuentran cobijo en las parroquias y/o diócesis. Deben buscar trabajos alternativos. Esto propicia la escasez de expertos para integrar las Comisiones de Música Sagrada y los elementos con perfil ideal para discernir sobre el caso.
-Las Comisiones de Música Sagrada son rarísimas, no cuentan en su mayoría con los elelementos idóneos y en la mayoría de las veces son "elefantes blancos", ya que en la parroquias y capillas "el Padre manda". En pocas palabras, serán muy contadas las eficaces.
3)Tenemos entonces el panorama de que...
-No hay discernimiento pastoral auténtico en la decisión de incluir otros instrumentos en la liturgia. Se hace por gusto, intuición, buena voluntad, personal interpretación de la norma...
-Hay un pragmatismo nefasto en estas decisiones: "Si funciona...", "Si le gusta a la gente...", "Si le gusta al Padre...", "Si los niños se sienten a gusto..." etc entonces se vale.
-Se confunde lo popular con lo folcklórico...o con lo de gusto actual (la moda)
-La Tradición de la Iglesia no es valorada. El cristiano no la asimila en su identidad como tal. En casos graves la desprecia, la ve como regresión y estancamiento.
En fin, que el punto crítico está en la "adaptación al uso sagrado, de lo cuál uno de sus grandes principios es la potenciación del TEXTO litúrgico, y otro el "uso" sin sabor a "lo profano" del mismo instrumento. La guitarra acústica ya tiene un buen camino recorrido en este campo. Ha sabido adaptarse muy bien. Y sin embargo sigue siendo un instrumento "adaptado" al uso litúrgico. Aquí está el detalle: ¿otros instrumentos? Sí...pero correctamente adaptados en su potenciación del texto y su manera de ejecutarse. Todo ello combinado con un caminar hacia la apreciación y valoración del Órgano y de toda la Tradición Musical de la Iglesia, para distinguir correctamente los "planos" de "Sagrado" y "Adaptado al uso sagrado".
Seguimos conversando, no es posible poner tantas cosas que pueden resultar útiles, en un limitado mensaje.
Bendiciones!