por wilmarlm » Dom Sep 08, 2013 2:57 pm
Hola a todos, desde Colombia.
Me alegra mucho poder compartir este curso con personas de distintas latitudes, edades, experiencias, hombres y mujeres de todo el planeta.
Para un hombre de Fe, para nosotros que creemos en un Dios vivo, que se hizo hombre, ya que “el hombre no podía hacerse Dios”, para estar a nuestro lado para que le “viésemos”, “quién me ha visto a mi ha visto al Padre” (Jn 14, 8s). Para nosotros es de capital importancia el tratar al menos de conocer un poco sobre el lugar geográfico, porque Cristo vivió en el tiempo y en el espacio, se puede demostrar y hay muchos y serios indicios, pruebas irrefutables de su paso por esta tierra. El podernos acercar un poco a Tierra Santa y “caminar” con Jesucristo desde el inicio de su vida pública, su ministerio de redención y salvación eterna, nosotros estábamos condenados por el pecado de Adán, pero por Él, el nuevo Adán, entró la salvación al mundo, “Oh feliz culpa que mereció tan grande redentor…” cantamos en la vigilia pascual del sábado santo, celebrando su resurrección, su victoria sobre la muerte.
Para nosotr@s los cristianos la vida, pasión, muerte y resurrección de Cristo es el eje fundamental de toda nuestra vida de Fe, y creo que nos puede “alimentar”, fortalecer nuestra Fe, el conocer los santos lugares por donde estuvo Jesucristo, su santísima madre la Virgen María, San José, los apóstoles, y todos los personajes de que se nos habla en los evangelios.
Es muy interesante como en esta pequeña porción de tierra, se han sucedido los “eventos” más extraordinarios y misteriosos que han marcado desde siempre y por siempre la historia de la humanidad entera, allí Dios todopoderoso se “abaja”, se manifiesta al hombre, le “escoge”, le atrae hacia sí y le promete que siempre estará a su lado, que Dios siempre es y será fiel, la promesa de Dios a Abraham de una descendencia mayor que las estrellas, que se reedita generación tras generación, Moisés, los profetas, el Rey David, el Rey Salomón, el exilio y el regreso de este, así como la diáspora causada por el imperio romano, la cual duró casi 2000 años, apenas hace poco más de medio siglo el pueblo heredero de la promesa, los judíos en remembranza de la tribu de Judá, vuelven a su tierra de la que nunca han debido haberse ido, es más, al menos en “espíritu” nunca se fueron, ya lo rezaban en sus reuniones y fiestas con total certeza y el próximo año en “Jerusalén”.
En últimas y para terminar, Tierra Santa es también nuestro lugar definitivo de peregrinar por esta vida, la “Jerusalén celestial”, dónde podremos ver cara a cara a Dios y contemplarle por toda la eternidad. Preparemos entonces ese momento definitivo, ese encuentro santificador con el Dios vivo desde ya caminando con Él por estas maravillosas tierras que le “vieron”, donde se “encarno”, dónde se rebeló y hablo a los hombres de todos los tiempos y de todos los lugares de la tierra, para que todo hombre que en Él crea, tenga vida, y vida en abundancia.
Muchas gracias a todos, que mi Dios padre todo poderoso les acompañe y bendiga siempre.
Wilmar